Alfredo Ortuño: «Me gustaría disfrutar con Rubén Castro en el campo, no competir contra él por un sitio»
El ariete cree que puede «ayudar mucho» teniendo más minutos; «sigo intentando hacer méritos para que Carrión opte por mí», dice el yeclano
Qué más debe hacer Alfredo Ortuño (Yecla, 30 años) para ser titular es una de las preguntas repetidas estos días. El yeclano se ha alzado ... como el héroe de la Copa del Rey en el cuadro albinegro. Marcó los dos goles del Efesé ante el Racing Rioja, además de anotar y asistir frente al Castellón. En liga, lleva tres dianas y en todas sus actuaciones aprueba con nota. Incluso ha hecho dianas decisivas. Pero ni con esas salta al verde desde el inicio.
Su único problema es que tiene por delante a un Rubén Castro al que es imposible sentar. Es necesario. Y Carrión no está optando por utilizar a dos arietes. Porque, si fuera por rendimiento, sin duda Ortuño sería un fijo acompañando al canario.
Ortuño atiende a LA VERDAD convencido de que con más minutos de juego puede «ayudar mucho al equipo». Él, de momento, sigue buscando esa oportunidad sin rechistar. «Me gusta que mi trabajo hable por mí», dice.
«Nunca antes me he enfrentado a un equipo de Primera en la Copa del Rey. Ojalá les ganemos»
El rival en Copa
–El pasado miércoles volvía a convertirse en el héroe copero. ¿Cómo lo lleva?
–Estoy contento. Es el premio al trabajo que no se ve, a entrenar intenso, a cuidarse y a permanecer fuerte mentalmente.
– Sus goles son culpables de que vayamos a ver un Efesé- Valencia. No está nada mal...
–Hombre, es un club grandísimo, un histórico de la Copa del Rey y de la liga española. Un rival muy bonito e ilusionante. Será una fiesta para los aficionados. Ojalá y pasemos. En toda mi carrera no me he enfrentado nunca a un equipo de Primera en la Copa. Siempre me habían eliminado antes. Este año por fin se ha dado.
– Le pregunto por su situación personal. ¿Qué valoración hace de estos meses en Cartagena?
–Estoy contento por el rendimiento individual y por la situación del equipo en la tabla. No estoy entrenado en los planes del entrenador, pero yo sigo intentando ponérselo lo más difícil posible para que esa situación cambie.
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– ¿Por qué cree que no está saliendo más desde el inicio?
–No lo sé, la verdad. Creo que podría ayudar mucho al equipo teniendo más minutos. Pero eso es una decisión del técnico y una pregunta para él. Mi trabajo es ponérselo complicado y, cuando él decida que salga, jugar. Siempre voy a acatar sus órdenes.
– ¿Qué le dice Carrión?
–Bueno, yo no soy un jugador de muchas palabras. No he pedido explicaciones nunca. Me gusta dejar que mi trabajo hable por mí. Es la manera en la que se consiguen las cosas en el fútbol. Creo en la meritocracia e intento hacer méritos para que el entrenador opte por mí.
«Ningún entrenador hace las alineaciones para que su equipo no gane. Yo a acatar y a trabajar»
Sus minutos
– Este viernes el técnico dijo que «ojalá todos los jugadores del vestuario» fueran como usted. ¿Qué le parece?
– No sabía que había comentado eso (risas). A todo el mundo le sientan bien los halagos. Me lo tomo bien. Pero ya te digo, me dedico a hacer mi trabajo y a asumir sus decisiones. Ningún entrenador en el mundo hace las alineaciones para que su equipo no gane. Si ahora mismo no está en sus planes que Ortuño salga de inicio será porque considera que es lo mejor. Y yo, ya te digo, a acatar y a trabajar.
– Rubén Castro es contra quien compite por el puesto. ¿Qué piensa de él?
– La verdad, me parece un espectáculo de jugador, extremadamente bueno dentro del área. Se coloca muy bien. Define de lujo. Me gustaría disfrutar más con él en el campo, no competir por un sitio. Creo que somos compatibles y nos podríamos ayudar mucho el uno al otro. Haríamos una buena dupla.
– Hablemos de su pasado. Muy joven, con 22 años, quiso dejar el fútbol. ¿Qué pasó?
– Bueno, más que querer dejarlo, el fútbol me estaba dejando a mí. Llevaba dos o tres años muy malos, que no jugaba y no metía goles. Fue después de estar en el Getafe 'B' y el Levante 'B'. Terminé allí y no tenía equipo donde irme. En el último momento salió la oferta de La Hoya Lorca y decidí apostar. Me lo jugué todo a esa bala.
– ¿Que significó para usted aquel año en Lorca? Llegó a marcar diez goles en medio curso.
– Piensa que allí volví a estar cerca de mi familia y me encontré con un grupo de jugadores que atravesaban una situación parecida. Cifuentes llegó del Murcia que se quería retirar, Josan venía de no estar jugando, Fran Carnicer... Hicimos un buen grupo. José Miguel Campos nos ayudó a todos psicológicamente. Y al final ese equipo acabó dando guerra. Allí nos cambió la carrera porque muchos fuimos a Segunda o a Primera. Fueron seis meses muy intensos y bonitos.
– En el 2017 vivió otra mala experiencia. En Las Palmas, donde jugaba, le dijeron que no contaban con usted. Después que sí. Al final fichó por el Valladolid, se le presentó en rueda de prensa y LaLiga no inscribió su traspaso, por lo que nunca jugó de albivioleta. Cuéntenos qué ocurrió.
– En resumen, yo tuve la mala suerte de estar firmado con una agencia de representación, Bahía Internacional, la cual actuó en mi contra. Me paró la carrera en seco en un momento importante para mí, con 26 años, cuando venía de hacer una temporada muy buena en el Cádiz (17 goles). Aquello fue un lío muy grande en el que el único perjudicado era yo. LaLiga no aceptó esa operación por un motivo: porque era inaceptable (fuera de plazo). Fue una lección que me llevé para mi vida. Lo que no te mata te hace más fuerte y aquí estoy. Es un capítulo que tengo cerrado.
«Soy de los que le gusta conseguir los 50 puntos lo antes posible. La Segunda es muy difícil»
Objetivo
– Y terminó en los Estados Unidos, en el Salt Lake, donde tampoco fueron las cosas bien...
– No tenía ilusión por jugar. En Estados Unidos se me juntó todo: no dominaba el idioma, me tuve que ir obligado y, bueno, tampoco tuve el recibimiento que necesitaba, con un entrenador o un club que me diesen cariño. Casi no jugué. A los seis meses me salió la opción de ir al Albacete y regresé.
– ¿En qué ha cambiado ese Alfredo Ortuño que cogió las maletas y el de hoy?
– El de ese momento no sabía perdonar y cuando uno lleva una mochila con un peso tan grande como el que yo llevaba no se puede jugar al fútbol.
– ¿Es de los que piensa que este año tienen que jugar el 'playoff' o de los que cree que la permanencia es el objetivo?
– Soy bastante ambicioso y optimista. Y también sé que la Segunda división es muy difícil. Vayamos paso a paso. Cuanto antes consigamos los 50 puntos, mejor. Y a ver si nos podemos ir de vacaciones con 30. Ya en marzo o abril veremos dónde estamos y buscaremos una buena posición. Pero soy de los que le gusta conseguir los 50 puntos lo antes posible.
– ¿Qué le pedirá a los Reyes Magos este año?
– Sería un buen regalo que le ganásemos al Valencia. Individualmente les pediré más goles.
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