Zeidane hace volar al Murcia en el derbi

Lo hizo con un buen partido a pesar de solo hacer un gol, y en el que mereció la victoria por ocasiones y por las intenciones demostradas durante los noventa minutos. Lo hizo ante un rival que se asustó con el escenario y no fue el equipo tan aguerrido y vivo que demostró en las últimas semanas. En el Enrique Roca decepcionó, sobre todo en la segunda parte, y no pudo hacer nada ante un Murcia mejor que leyó mejor el encuentro. Al menos los de Stankovic siguen fuera del descenso tras el derbi y el resto de resultados, y siguen dependiendo de ellos para evitar el descenso a Tercera RFEF.

Mario Simón sigue en su empeño de recuperar a Dani García para el momento más importante de la temporada y ante el Águilas decidió situarlo en el puesto de '9', dando descanso una semana más a Carrasco. Además, el entrenador manchego volvió a apostar por Javi Saura en la medular una semana más en detrimento de Armando, buscando más control de balón en el centro del campo. Stankovic, por su parte, solo introdujo un cambio respecto al once de las últimas semanas dándole la titularidad a Óscar Castro en lugar de Junior.

La primera parte fue una batalla táctica entre los dos equipos murcianos que estuvo cargada de emoción pero a la que le faltó ritmo y profundidad en ataque en los dos bandos. En el equipo grana fue Ganet el futbolista con más presencia en los primeros minutos, aunque no terminó de encontrar a compañeros como un Zeidane Inoussa al que siempre le cuesta entrar en los partidos. En el otro bando eran Chumbi y Cristo Martín los que más intentaban aparecer, aunque no lo conseguían del todo. El delantero aguileño se peleó una y otra vez con Alberto González y Pedreño en un duelo que echaba chispas.

Hasta que al cuarto de hora llegó la primera ocasión del derbi. Fue a balón parado y el centro envenenado botado por Ganet lo tocó ligeramente Dani García con la cabeza y lo atrapó Buigues en una intervención cargada de reflejos. El centrocampista ecuatoguineano del Murcia destacaba en todas las facetas del juego e imprimía veneno a todas sus acciones, aunque sus compañeros estaban por debajo. Cristo Martín ejecutó el primer disparo a puerta del Águilas, pero se fue arriba. El de Santi Jara, sin embargo, fue raso y pegado al palo, pero lo atajó de nuevo Buigues.

La primera parte concluyó con empate a cero, con dos equipos cargados de buenas intenciones a los que les faltó inspiración en los últimos metros. Con un Murcia que ejerció de local y un Águilas que fue de más a menos. En lo único que se parecían mucho ambos equipos fue en que jugaron con el freno de mano echado debido a la importancia de los puntos en juego en el Enrique Roca; mientras que los granas pretendían conservar la tercera plaza y sellar su pase matemático al 'playoff', los aguileños sabían que una victoria les daba prácticamente la permanencia en Segunda RFEF. Las noticias que llegaban en el descanso del derbi eran buenas para los blanquiazules por la derrota del Mancha Real, pero no para los granas con las victorias del Hércules y Eldense.

Para la segunda parte Simón dio entrada a Carrasco. El Murcia necesitaba morder más arriba y el delantero murciano podía cumplir mejor esa misión que Dani García. Y el entrenador manchego lo consiguió casi de inmediato. Tras unos compases de tanteo el Real Murcia explotó y fimó diez minutos brillantes. Primero llegaron tres ocasiones de gol claras: un mano a mano de Zeidane que detuvo Buigues, una internada por la línea de fondo de Alberto López que abortó un defensor aguileño cuando el balón llegaba a la zona más caliente y seguidamente un remate de Pedreño tras un saque de esquina que detuvo Buigues.

Pero lo que no pudo detener el portero del Águilas, el mejor de su equipo el domingo, fue la vaselina sutil del propio Inoussa para poner el 1-0 en el marcador. Fue una jugada elaborada por Ganet que el sueco representado por Quique Pina convirtió en gol con una obra de arte que levantó a la grada del Enrique Roca. Era su cuarto tanto de grana, y también el mejor de todos. Stankovic reaccionó casi de inmediato y refrescó su delantera con Roberto Núñez y Cristo García. El que se sentó fue Chumbi, que se llevó la pitada de la temporada.

Los cambios hicieron que el Águilas tomara cuerpo, que comenzara a aparecer más en el partido. Los jugadores del Águilas reclamaron una mano de Carrasco dentro de su área, aunque después fueron los granas los que hicieron lo mismo por una situación parecida en el área blanquiazul. El Murcia se metió atrás y comenzó a sufrir, sobre todo con un Cristo García que ya marcó en la casa en la primera vuelta con el Pulpileño.

El derbi estaba caliente, emocionante, hasta que lo estropeó Roberto Núñez, que acababa de saltar al terreno de juego. Tras una volea de Cristo García que se marchó desviada, su compañero fue a recoger el balón y empujó contra la valla metálica de forma temeraria a un recogepelotas que se disponía a devolver el balón al campo, lo que provocó su expulsión inmediata.

El Murcia, tras el parón y quedarse en superioridad, lo tenía todo de cara para sentenciar el choque, pero dejó pasar los minutos sin hacerlo. Se aproximó con peligro y superioridad al área aguileño, pero no supo definir, una constante esta temporada. El equipo de Stankovic, con diez, no renunciaba al empate y asustó a un Enrique Roca que tiene el corazón a prueba de bombas y que el domingo ganó una nueva batalla clave para agarrar un 'playoff' que promete para el equipo grana. Sobre todo, por la raza y el coraje que demuestra cada semana.