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Las cifras no casan. Los directivos de los colegios e institutos murcianos consideran que es «imposible» mantener las distancias de seguridad marcadas en la orden de vuelta a las aulas redactada por Salud y Educación si se tienen en cuenta el tamaño medio de las aulas de los centros educativos de la Región y las ratios de estudiantes por aula (25 alumnos en Infantil y Primaria, hasta 30 en la ESO y hasta 35 en Bachiller). La medida solo podría aplicarse, advierten, si se contratan docentes extra de apoyo que permitan desdoblar los grupos de alumnos.
Las instrucciones sanitarias publicadas hoy en el Borm establecen que los centros deben garantizar «que se mantenga de forma general una distancia de seguridad de, al menos, 1,5 metros en las interacciones de las personas en el centro educativo, manteniendo el uso de la mascarilla independientemente de la distancia. El alumnado mantendrá de forma general una distancia interpersonal de, al menos, 1,5 metros cuando se desplace por el centro educativo o esté fuera del aula». Educación establece que en casos excepcionales y en función de cómo evolucione la pandemia, la distancia podría reducirse a 1,20 metros o un metro. Esa medida solo está marcada para los alumnos de Secundaria y Bachillerato.
«Nos sorprenden esas normas. Los grupos de ESO y Bachiller son de entre 27 y 30, y es imposible que quepan en un aula media. No nos han dicho si tendremos profesores de apoyo», ha denunciado Isabel Saturno, presidenta de la Asociación de Directores de Educación Secundaria.
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Tampoco en Primaria, donde el tamaño medio de las aulas no permite mantener ese límite espacial. «Con las ratios que tenemos, que llegan a 27 alumnos por aula, es imposible marcar esas distancias sin desdoblar las clases, y para partir los grupos en dos necesitamos a los profesores de apoyo», reivindica la presidenta de los directores de Primaria, Mariola Sanz.
La orden no especifica si el próximo curso se contrará de nuevo a los 1.500 docentes extra que este año han prestado apoyo en las aulas por la Covid, tal y como reclaman los docentes. Hasta la fecha, la Consejería de Educación ha evitado concretar si lo hará o no. En la nueva Programación General de la Enseñanza, la Consejería estableció contratar profesores de refuerzo Covid, para lo que cuenta con 1.142 interinos, 350 menos de los 1.500 que este curso han prestado apoyo en los centros para garantizar esos desdobles, cubrir sustituciones puntuales y controlar el cumplimiento de los protocolos sanitarios.
En Educación Infantil la organización del alumnado se deberá establecer en grupos de convivencia estable, formados por el tutor y grupos burbuja de alumnos. «En estos grupos se debe garantizar la estanqueidad en todas las actividades que se realicen dentro del centro educativo y se evitará la interacción con otros grupos, limitando al máximo el número de contactos. Idealmente, se debe minimizar el número de personas adultas que interacciona con cada grupo de convivencia estable, siendo la figura fundamental el tutor o tutora. A cambio, dentro del grupo no será necesario guardar la distancia interpersonal», establecen las instrucciones de Educación.
Sin embargo, la organización en grupos burbuja en Primaria es complicada, advierten los docentes, ya que los alumnos reciben clases de profesores especialistas distintos al tutor, como los maestros de Inglés, Música, Educación Física...
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