Los comercios de Murcia se lanzan a la campaña de rebajas con descuentos de hasta el 70%

«No sabemos si se debe al calor o a la crisis, pero las compras de junio están siendo un poco extrañas». Así de perplejo se mostraba este viernes Paco Meseguer, dueño de M53, un comercio situado en el centro de la ciudad, después de afrontar las primeras horas de las rebajas. Regenta su tienda desde hace 23 años y se dedica al comercio desde que tiene «uso de razón». Empezó trabajando como aprendiz, barriendo las esquinas de otros locales; ejerció como jefe de compras durante dos décadas y, finalmente, consiguió crear su marca, especializada en moda italiana. «Pero este año el ciclo de compra ha cambiado. Hemos vivido días maravillosos y otros que han sido terribles», aseguraba.

Un cambio en la actitud de los clientes que se debe a la tardía -o al menos aparentemente- llegada del calor. Esta demora en el tiempo ha provocado, según la presidenta de la Asociación de Comerciantes de Platería y Trapería, Marisa Cano, que los consumidores atrasasen sus compras ya que «el comercio funciona como la agricultura, se encuentra a expensas de lo que el tiempo le dicta». Con firmeza, sostenía que «una de las razones por las que las ventas han empezado más tarde es porque los consumidores han esperado a que entrase el calor que vivimos en Murcia todos los veranos».

Pero no es el único motivo que Marisa Cano, presidenta de la entidad desde hace un lustro, encuentra para explicar este fenómeno. Para Cano, las rebajas dejaron de existir desde el momento en el que «iniciaron las semanas de descuentos que algunos grandes almacenes ofrecen a lo largo del año; en cualquier época. Se pasan la vida haciendo ofertas». La consecuencia directa de este hecho, según la presidenta, es que «la ley de las rebajas ha desaparecido y el súper 'boom' que antes generaban ya no se puede recuperar».

Por esta razón, algunos comercios asentados en el centro de Murcia decidieron adelantar la llegada de los grandes descuentos a la segunda semana de junio. Ocurrió, por ejemplo, en Coosy, una tienda que desde el jueves ya lucía en su interior los carteles de las segundas rebajas, con descuentos de hasta un 60%. «Nosotros solemos adelantarlas siempre», comentaba Mamen García, dependienta del local, mientras ordenaba diversos vestidos de fiesta y sus complementos más veraniegos. «Las primeras rebajas empezaron el viernes pasado y finalizaron ayer. Aún así, en estas fechas del año, los clientes suelen esperarse». Según la empleada, los consumidores pasean, entran a la tienda, observan los artículos y, «cuando han empezado las que supuestamente son las oficiales, por estas fechas, a finales de junio, es cuando parece que se tiran a la calle».

Jesús Madrid, dependiente de Rude Shop, también es consciente de este hecho. Para el empleado de la tienda, especializada en moda urbana de hombre, la tardía llegada del calor es un factor sustancial al realizar el balance del mes. «Decidimos empezar con las rebajas el 18 de junio», explicaba. «Pero la venta de junio, en general, ha sido un poco más floja». Respecto al año anterior, «no ha ido tan bien». En este local, los artículos estarán rebajados hasta un 50%.

Y no solo los pequeños comercios situados en el casco urbano decidieron anticipar su calendario; algunas firmas nacionales, como Rumbo, también realizaron esta jugada. En la empresa de calzado, «empezamos con los descuentos el 27 de junio», comentaba María Rojas, dependienta de uno de los locales de la marca. Desde su escaparate, situado en Trapería, ayer observó a los cientos de murcianos que salieron a la calle en busca de gangas.

Los grandes descuentos, como los de M53, de hasta un 50% , llamaron la atención de grupos de amigos y familias. Murcianos que ayer salieron a la calle para realizar sus primeras compras de verano.

Gastarse unos cien y no superar los doscientos euros. Este es el límite que muchos consumidores se ponen a la hora de sacar la cartera, como María del Carmen Nieto, ama de casa, que ayer aprovechó las primeras horas matinales para echar un ojo a los descuentos de El Corte Inglés. Tenía claro qué buscaba: «un pantalón y algún traje de baño». Y cuánto pensaba gastarse: «mi presupuesto ronda sobre los cien euros, ya que tengo de todo para estas vacaciones».

Un presupuesto algo más flexible era el de Gregorio Martínez. Acompañado por su familia, prefirió pasear por las tiendas del centro en busca de «algo de ropa». En su caso, pensaba gastarse «unos 150 euros, aunque quizá llegue a los 200, si compramos para toda la familia». Manolo Vigueras, fotógrafo, junto a un compañero de profesión, también aprovechó las primeras horas del día para echar un ojo a los descuentos. «No creo que me gaste mucho. Solo compraré lo que necesite».

Unas compras que también podrán realizarse mañana en los comercios del centro, ya que «abrimos en horario normal», recordó Marisa Cano, y en las grandes superficies, como en El Corte Inglés.