Los vecinos de Cartagena empiezan a movilizarse ante el riesgo de que se cierren consultorios

El objetivo principal de esta movilización es reclamar al Servicio Murciano de Salud (SMS) que cubra la plaza del médico que falta y liberen de trabajo al facultativo que queda.

El problema se dio a conocer el pasado 12 de mayo cuando, tras alertar los vecinos de La Palma de que los concursos de vacantes del Servicio Murciano de Salud dejaban al descubierto dos plazas de médico en su consultorio, los responsables vecinales de Pozo Estrecho y El Albujón se dieron cuenta de que afectaba a todos los pueblos que dependen de la zona básica de salud de Pozo Estrecho.

Los residentes obtuvieron de inmediato el respaldo de la Federación de Asociaciones de Vecinos (Favcac) y se organizaron movilizaciones en los tres pueblos que se fueron retrasando conforme la Gerencia del Área II de Salud fue avanzando en la contratación de los facultativos necesarios para esta zona de salud.

Así, mientras que en las localidades de La Palma y Pozo Estrecho se han cubierto las dos plazas que quedaron vacantes, los vecinos de El Albujón continúan esperando que se les encuentre un médico. «Están sobrecargando de trabajo al único médico que nos queda, porque ahora tiene que atender al doble de pacientes que antes. Nos prometieron una contratación que no llega y nos jugamos mucho si no se cubre esa plaza vacante. La situación es insostenible, tanto para nosotros como para el médico que sigue trabajando en nuestro consultorio», alertó el presidente de la Asociación de Vecinos de El Albujón, Andrés García.

Cabe recordar que el médico que se ha ido del pueblo es precisamente el que prestaba servicio dos días a la semana en el consultorio de Las Lomas, por lo que el que facultativo que queda también ha de atender a los cerca de 400 vecinos de este pueblo, la mayoría de ellos de edad avanzada y con gran dependencia del consultorio debido a sus enfermedades crónicas.

Otra de las preocupaciones que han mostrado los usuarios que dependen de esta área básica de salud es si las contrataciones que se han hecho para cubrir las plazas de La Palma y Pozo Estrecho son o no de larga duración, ya que lo que buscan es una solución permanente a su problema.

«Queremos que esta situación se resuelva, pero también que se haga para siempre. Lo que nos gustaría saber también es si los contratos que se han ofrecido a los médicos que están viniendo son indefinidos o vamos a estar igual dentro de tres o seis meses», comentó.

Tanto los integrantes de la Federación de Asociaciones de Vecinos como los responsables vecinales de La Palma y Pozo Estrecho aseguraron que acudirían a la concentración, como muestra de apoyo a los usuarios de El Albujón y para reclamar un refuerzo en la Atención Primaria que garantice la asistencia médica de calidad. Precisamente por eso, el cartel de la convocatoria para la protesta de esta tarde reza: «la salud de los vecinos está en juego, únete a la concentración sanitaria».

En el centro de salud de Pozo Estrecho la vacante del médico que falta está a punto de cubrirse. Según el presidente de los vecinos de El Albujón, Andrés García, en contacto permanente con los responsables del centro de referencia para buscar una solución, «hay un médico que quiere firmar la plaza que queda disponible en Pozo Estrecho y se incorporaría el 7 de julio».

Sobre el avance para encontrar otro facultativo para El Albujón, García indicó que desde el mismo centro de salud se está barajando que el nuevo médico se desplace desde Pozo Estrecho a El Albujón dos días a la semana. También están gestionando que autoricen a que un médico de allí pase su consulta por la tarde lunes y miércoles, y por la mañana vaya a Las Lomas y al Albujón».

En referencia a los problemas de estos consultorios para encontrar profesionales sanitarios, desde el Colegio de Médicos indicaron que la razón es el estrés de cubrir el Punto de Atención Continuada de Pozo Estrecho, que está abierto hasta las diez de la noche. «Los médicos, además de atender a sus pacientes, deben salir en ambulancia medicalizada cuando les llaman, interrumpiendo su consulta, algunas veces, para atender urgencias muy graves, sin ser médicos de urgencias y tienen que cubrir la atención continuada por las tardes si no hay médico de refuerzo».