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Rocío Carrasco. Telecinco
Rocío Carrasco se derrumba al hablar de su «enano»

Rocío Carrasco se derrumba al hablar de su «enano»

La hija de Rocío Jurado está segura de que su hijo la echa de menos pero también de que «es feliz»

joaquina dueñas

Jueves, 13 de mayo 2021, 11:48

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Hasta ahora, solo habíamos escuchado algunas pinceladas sobre el hijo de Rocío Carrasco y Antonio David Flores. Eran muchas las voces que ponían el solfa su testimonio al justificar la falta de relación con su hija por los «malos tratos continuados» avalados por una sentencia firme sin decir nada sobre los motivos que le llevaron a vivir la misma situación con su hijo. Anoche fue el momento. Rocío hablaba por fin de su «enano» y no podía evitar derrumbarse al recordar lo felices que eran juntos.

Lo describe como un niño muy alegre y cariñoso que empezó a cambiar cuando su hermana dejó la casa. Ella se sentía «amada» por su hijo, un niño que adoraba a Fidel y a sus amigas, como a María Teresa Campos o a Terelu. Pero según dice, se volvió «arisco, un niño reaccionario, en cierta forma, desagradable en la forma de hablar». Un cambio que según explica, se debió a la influencia de su padre que llegó a amenazarlo con hacerlo bajar del coche en el que viajaban si volvía a defender a su madre en presencia de ellos.

Rocío relata que el padre iba a verlo al colegio junto a la hermana durante el turno de convivencia con ella. La hija de Rocío Jurado asegura que David era víctima de «chantaje emocional». Y peor aún, explica que en una ocasión, su hermana, Rocío Flores, le dijo que «iba a meter a su madre en la cárcel y que iba a llorar lágrimas de sangre», algo que el niño le contó de vuelta del colegio. Por entonces, Antonio David Flores utilizaba exactamente las mismas palabras poniéndolas en boca de su exmujer, dirigidas hacia él. Versiones totalmente contrapuestas.

La boda de Rocío Carrasco y Fidel Albiac sin la presencia de sus hijos era uno de los puntos más cuestionados. En el décimo episodio, Rocío no dudó en mostrar la ropa que le había comprado al pequeño para que le acompañara durante ese día tan especial, pero «no le dejaron», dijo amargamente.

El último día que ve a su hijo es el 23 de junio, cuando el joven se marcha para compartir el verano en Málaga con sus hermanas. A su regreso en septiembre, podría ir a la boda de su madre y de Fidel. Sin embargo, ese día no llegó, ni siquiera vuelve para realizar las prácticas de sus estudios de FP. David debía estar de regreso en casa de su madre el 5 de septiembre pero no es así, por lo que Rocío recurre a los juzgados y obtiene un decreto para que devuelvan de inmediato al menor, algo que no se produce y cuando poco después el niño cumple 18 años finaliza el régimen de custodia y se queda definitivamente con el padre.

Olga Moreno «es otra sinvergüenza»

En cualquier caso, Rocío dice que «hablo de él sin pena, porque sé que es feliz. Mi pena con él es en otro sentido, por la utilización que ha sufrido, porque esta persona ha utilizado esas circunstancias del niño para hacer más daño, para hacer más mal y para lucrarse».

La hija de Rocío Jurado también contó su versión sobre el día que se encontró con su hijo en los juzgados y no deja en muy buen lugar a la mujer de Antonio David, Olga Moreno, de la que dice, «es otra sinvergüenza» que le despertó tanta ira en aquel encuentro que estuvo a punto de llegar a las manos con ella, algo que no sucedió gracias a que su abogado la ayudó a controlarse. Una situación desgarradora de la que termina diciendo: «Ese día me di cuenta de que he parido a dos hijos, pero que no tengo a ninguno».

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