Una columnista rusa dice que Manchester está lleno de «mujeres gordas» y homosexuales
Los medios británicos, y la opinión pública en general, no se han mostrado demasiado halagados por el artículo
f. olmos
Viernes, 5 de mayo 2017, 10:48
«Manchester me ha enseñado lo equivocados que están algunos cuando dicen que en Moscú deberíamos ser más tolerantes con la homosexualidad» es tan sólo una de las perlas que la columnista rusa Alisa Titko ha 'soltado' en un artículo de opinión no tan largo como podría parecer. Pero es que un 95% de sus palabras son ofensivas para algún colectivo, principalmente para los británicos y los homosexuales. Durante el texto desarrolla su impresión de la ciudad británica tras un viaje allí y no le ha gustado mucho lo que ha visto, empezando por las mujeres.
«Sus mujeres son muy gordas, les resultan desagradables a los hombres. Incluso las jóvenes, no sólo no les importa que la grasa les cuelgue de la barriga y el cuerpo, si no que encima cuando van a pubs por la noche usan 'leggings' o mini vestidos», toda una diatriba que remata con un potente: «Sería una tontería suponer que tantos hombres de allí son gays por eso pero el hecho de que las mujeres allí sean tan gordas y poco apetecibles sexualmente seguro que influye».
La columnista cree que los padres de las personas homosexuales «no les 'zurraron' lo suficiente de niños»
El artículo prosigue con todo un alegato homófobo en el que se muestra escandalizada mientras pasea por el 'Gay Village' y ve como «los hombres van cogidos de la mano en plena calle, sin ningún tipo de pudor, incluso vi a algunos besándose y fue asqueroso». Para coronarse, Alisa reflexiona sobre la homosexualidad como orientación sexual en sí y llega a la conclusión de que todo parte de «padres que no 'zurraron' lo suficiente a sus hijos cuando eran niños».
Como es entendible, los medios británicos (y la opinión pública en general) no se han mostrado muy entusiasmados con el artículo y algunos llegan a hablar incluso de un antes y un después en las relaciones diplomáticas entre ambos países. Aunque no parece posible que llegue la sangre al río, lo que sí es cierto es que la población en general no está demasiado contenta con los rusos ahora mismo.
