Consigue unas alitas de pollo muy crujientes: el ingrediente secreto de un carnicero para mejorar este plato

¿Tienes antojo de unas alitas de pollo crujientes? Lo cierto es que preparar este tentador bocado para una cena improvisada en casa es más fácil de lo que puede parecer. Además, es un plato que encanta a niños y adultos y se pueden combinar con una gran variedad de guarniciones, como patatas fritas, arroz blanco o simplemente con una ensalada si se busca una opción baja en calorías.

La buena noticia de este alimento es que no necesitas encender obligatoriamente el horno para cocinarlas. La receta también se puede hacer con la freidora de aire, que permite reducir la cantidad de aceite y supone un ahorro significativo de luz, ya que este electrodoméstico es más pequeño. Asimismo, acelera el tiempo de cocción, por lo que permite disfrutar de la comida en tan solo unos minutos.

No es necesario desplazarse a ningún restaurante ni ser un buen chef para conseguir unas alitas crujientes. Mariano Sánchez Díaz, un carnicero muy famoso en Instagram (@el_as_carnicero) por compartir trucos y consejos, ha desvelado su secreto para conseguir ese acabado perfecto. Se trata de un método muy sencillo y que tan solo requiere de un producto que se suele tener en casa.

En primer lugar, hay que coger papel absorbente de cocina para secar bien la carne y quitarle la humedad a la piel. El siguiente paso consiste en utilizar por cada kilo de alas media 'cucharita' de bicarbonato de sodio. Llegados a este punto, tan solo hay que mezclar bien ambos ingredientes con las especias que se suelen utilizar normalmente.

Para que haga efecto, hay que dejarlo reposar 30 minutos en el frigorífico. «Lo que va a hacer el bicarbonato es romper la proteína de la piel», asegura. De este modo, según el experto, va a permitir que se dore mejor. «Eso sí, no os paséis en echar bicarbonato, que si no os va a saber a un sabor métalico», advierte. De esta forma, con un gesto tan simple como este, se consigue un resultado mucho más sabroso.