Miles de pétalos de rosas reciben a la Morenica en Murcia
La Virgen de la Fuensanta pudo realizar el tradicional recorrido desde su santuario del monte y el calor no evitó la presencia de miles de fieles
La ciudad de Murcia estaba preparada para recibir, pasadas las 19.30 horas de este jueves, a su Patrona, la Virgen de la Fuensanta, que bajó desde su santuario del monte para vivir con sus fieles la Feria de Septiembre desde la Catedral, como la tradición manda. El intenso calor de la tarde no evitó la presencia de numerosos devotos y visitantes, unos que la habían acompañado desde Algezares, más que ningún otro año, según los romeros, y otros que la recibieron en la iglesia del Carmen con vítores de '¡Guapa, guapa, guapa!', aplausos, 'vivas' y emoción a raudales.
La Morenica, como cariñosamente se la conoce en Murcia, vestía para la ocasión un manto multicolor de flores bordadas de los años 60 que hacía medio siglo que no vestía. En la iglesia del Carmen la esperaba la comitiva institucional, que desde allí la acompañó hasta la Catedral de Murcia, final del trayecto. Entre las novedades de este año, a la Patrona de Murcia la recibió la Coral Discantus, en el edificio del Puente Viejo, con la interpretación del himno de la Coronación de la Virgen, un acto que provocó no pocas lágrimas entre los asistentes, llevados por la emoción.
No faltó el tradicional repique de la campana de la Virgen de los Peligros, que vela por la seguridad de los murcianos desde su camarín del puente.
Al cruzar el puente la Fuensanta pasó por un pórtico compuesto por más de 7.000 elementos florales, una recreación de los arcos clásicos con tintes modernistas que embellecían la ciudad antiguamente durante la Feria.
La bajada de la Fuensanta a Murcia, en imágenesVer 30 fotos
Fue al llegar a la calle Arenal, que desde la Glorieta desemboca en la plaza de Cardenal Belluga, cuando una lluvia de pétalos procedentes de 15.000 rosas casi la cubrieron por completo, mientras una potente traca anunciaba la llegada de la Virgen. Entusiastas aplausos de los fieles allí congregados la acompañaron durante el corto trayecto por esta calle.
Desde allí, la comitiva siguió hasta la plaza de la Cruz, por donde, debido a los andamios instalados en la fachada de la Catedral para su próxima rehabilitación, entró este año la Virgen de la Fuensanta al templo catedralicio, ya pasadas las nueve de la noche.
«Mucho que agradecerle»
Entre los miles de fieles a la Patrona, la acompañaron desde su santuario de Algezares las hermanas María José, Julia, Manoli y su amiga Pilar. «No nos perdemos ninguna romería, ni de bajada ni de subida porque tenemos mucho que agradecerle», explicaron y reconocieron que tampoco les falta hacerle alguna petición a la imagen. Muy emocionadas, agradecieron a la Virgen «que salga de su casa para estar con nosotros».
«Esto es lo más grande», aseguraban Juan y Fuensanta, un matrimonio del barrio del Infante que siempre que pueden acompañan a la Morenita en sus idas y venidas a la ciudad.
