Bengalas y cánticos en una previa de derbi que recordó a los de antes de la pandemia

La vuelta del Real Murcia a la que fue su casa durante 82 años no se vivió con la misma pasión que años atrás. Además de que estaban en juego puntos vitales para la supervivencia del club grana, la afición murcianista no se pudo agolpar en la puerta del viejo estadio para recibir a los suyos como en otras ediciones de este derbi, aunque de todas formas se dejó notar un par de horas antes de que el colegiado pitara el inicio.

Para empezar la jornada, más de una treintena de coches se citaron en la explanada del Enrique Roca para acompañar a la expedición grana hasta el BeSoccer La Condomina, donde a pesar de las restricciones esperaban a su equipo cerca de quinientos aficionados murcianistas. Eso sí, los que aguardaban en la calle que daba acceso al estadio de la Puerta de Orihuela, estaban persuadidos por una veintena de agentes de Policía Nacional para que no se apiñaran a la llegada del autobús y no ocurrieran incidentes de ningún tipo entre los aficionados.

Aún así las fuerzas de la autoridad no pudieron impedir el encedido de una decena de bengalas por parte de los seguidores granas, ni tampoco los cánticos y la agitación de banderas y bufandas de la entidad centenaria. El primero en llegar fue el del UCAM, que entró a La Condomina cerca de las tres y media de la tarde, mientras que el autobús del Murcia, con Loreto en primera fila, lo hizo quince minutos más tarde. No hubo incidentes a la entrada de los dos equipos, aunque minutos después y antes del choque los agentes tuvieron que acordonar la zona tras registrarse unos incidentes con los aficionados más radicales de la entidad grana.

Los jugadores de ambos equipos saltaron a reconocer el terreno de juego y muchos de ellos aprovecharon para saludar a los amigos que ayer se encontraban en el bando contrario y fueron rivales durante los 90 minutos del partido. Entre ellos, Santi Jara, Víctor Curto, Charlie Dean o Biel Ribas, entre otros, muchos de ellos futbolistas que han militado en ambas escuadras.

Con las gradas ya cuajadas de público, gracias al protocolo de acceso al estadio inaugurado en 1924, el primero en saltar a calentar fue el Real Murcia, que fue recibido con una gran ovación. Después le tocó el turno al cuadro universitario, que también recibió los aplausos de sus aficionados y algún silbido de la afición visitante, que hizo acto de presencia en las tres gradas del estadio.

El único incidente digo de reseñar fue el desvanecimiento de un aficionado del Real Murcia en la grada lateral y que fue trasladado a un centro hospitalario por los servicios médicos presentes en el estadio universitario. En total, el derbi registróla presencia de 2.734 espectadores que mezclaron el azul con el grana en un derbi cordial que se vivió con nervios en ambos bandos por la importancia de los puntos en juego en el día de ayer. También el palco, donde José Luis y Samuel Mendoza ocuparon presidieron el choque junto a Francisco Tornel y Francisco Miró, presidente y consejero delegado respectivamente de la entidad grana.

A diferencia de otras ocasiones, no hubo cánticos despectivos contra la afición rival por parte de ninguna de las dos. De hecho, aparte de los gritos de apoyo a los respectivos equipos, el único cántico en este sentido fue el dirigido a Julio Algar, director deportivo del Real Murcia. La propia afición del Real Murcia pidió la dimisión del madrileño en el tramo final del encuentro, justo tras dos pérdidas de balón de Mendes, uno de los futbolistas fichados por el Real Murcia en el mercado invernal y que no está dando un buen rendimiento.

Los seguidores de ambos conjuntos vivieron durante buena parte del encuentro muy pendientes de los resultados del resto de equipos del subgrupo. Las preguntas sobre el marcador en otros campos fueron frecuentes durante los 90 minutos y es que, ante lo igualado de la clasificación, los aficionados se dedicaron a hacer cuentas con cada gol para analizar cómo afronta su equipo la última jornada que se disputará el domingo a las 12.

El UCAM va a llegar líder con 30 puntos, empatado con el Linares, pero por delante gracias a que su diferencia de goles general es mejor. Los universitarios viajarán para medirse frente al Recreativo Granada. El Real Murcia tendrá que recibir a El Ejido y necesita ganar para no tener que mirar precisamente al partido de los azulones y hacer cuentas. Si saca los tres puntos evitará la promoción de descenso.