Alejandro Valverde critica el recorrido de la tercera etapa: «No hubo más caídas porque controlamos increíblemente bien»

El paso por Utrecht, s'Hertogenbosch y Breda de la tercera etapa de La Vuelta a España fue un éxito de público este domingo. Una fiesta para cada localidad, donde la afición salía a la calle. Pero también significó una fábrica de nervios y tensión para el pelotón. Estrechamientos de calzada, curvas de noventa grados y más, pasos por el centro de muchas localidad, isletas... Y esto enfadó mucho al murciano Alejandro Valverde (Movistar), quien se mostró especialmente crítico con el recorrido diseñado por la organización. «Mejor no quiero decir nada», soltaba al llegar a la meta.

«No ha habido más caídas porque controlamos increíblemente bien», afirmó en una jornada que al contrario que el día anterior en Utrecht, donde sufrió una caída sin consecuencias en los 700 metros finales consiguió «salvar el día». «No puede ser este tipo de circuitos. Hemos pasado siete veces por el mismo pueblo y parece que no había más pueblos por los que pasar aquí», se quejó un molesto Valverde.

El ciclista irlandés del Bora-Hansgrohe, Sam Bennett, se impuso al esprint en una apretada etapa. Tal y como hiciera en la jornada del sábado, Bennett no se descolgó del pelotón y logró una nueva victoria en una ajustada llegada a meta. Dos de dos para el irlandés, quien fue más rápido que Mads Petersen, Daniel McLay y Bryan Coquard. Desde la edición de 2019, solo Primoz Roglic (9) ha logrado más victorias de etapa en La Vuelta que Sam Bennet (cinco, como Fabio Jakobsen).

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