Ureña malogra con la espada una importante actuación

Fue un festejo raro el quinto de abono de la Feria del Pilar. Hasta 25 toros pasaron el reconocimiento veterinario por la mañana para aprobar seis. Los tres anunciados de Hermanos García Jiménez, se desecharon y por chiqueros, finalmente salieron cuatro de José Vázquez, la otra ganadería anunciada, uno de José Luis Pereda, que abrió plaza y otro de Valdefresno que la cerró.

Comenzó la corrida con el público enfadado y abroncando a la empresa y a la presidencia y así devino la lidia de los dos primeros. Al de Pereda, que le correspondió a El Fandi, le faltó fuelle, y el segundo se quedó muy corto en la muleta de Castella. Con sendos silencios saldaron sus actuaciones. Hasta que salió el tercero. Un toro de Vázquez manso en los primeros tercios al que acabó por dominar Ureña en una faena de mucho mérito, en la que sacó al toro a los medios, dónde ligó dos tandas diestras en las que alargó las embestidas. Logró convencer al respetable con su verdad, al natural, y la última serie, de compás abierto, fue arrebatadora. Tres pinchazos, antes de la estocada, le privaron de una merecida oreja. Saludó una fuerte ovación.

Luego, El Fandi estuvo muy variado con la capa y protagonizó un espectacular tercio de banderillas. Le faltó fondo en la muleta al de Vázquez, estuvo entregado el granadino y se le pidió la oreja tras una estocada caída y un descabello. Saludó una ovación. No tuvo oponente Castella en el quinto, silencio, y el sexto, de Valdefresno fue un mulo de grande. Lo brindó Ureña, que se la jugó con él. Un inicio de faena enseñándole los caminos y una serie diestra de mando y empaque fue lo que duró el toro, que se rajó y buscó tablas. Allí plantó guerra el de Lorca, sorteando oleadas. De nuevo la espada, con dos pinchazos antes de una buena estocada, le privó de mayor premio que la ovación de despedida.

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