La razón por la que darte una ducha de agua fría es la peor idea para aliviar el calor
El efecto de esta supuesta solución es contraproducente para la temperatura corporal
Aire acondicionado, ventilador, piscina o ducha de agua fría son las opciones que más apetecen para enfrentarse a los intensos calores de la ola de calor que está arrasando el país. Las altas temperaturas hacen que todo el mundo busque opciones para mitigar el calor, pero aunque todo lo que sea frío puede parecer una buena alternativa, lo cierto es que darte una ducha fría es la peor idea e, incluso, puede ser contraproducente. De hecho, y aunque pueda parecer disparatado, es mejor que el agua esté caliente o tibia.
El motivo por el que no deberías ducharte con agua fría
La razón la explica la propia naturaleza del ser humano. Es un animal homeotérmico, con mecanismos para regular la temperatura en función del calor o frío externo. Cuando hace frío, el cuerpo responde produciendo calor; cuando hace calor, suda para evacuar las altas temperaturas. Por eso, si echas agua fría a un cuerpo caliente, este responderá produciendo calor para contrarrestar el frío. Cuando salgas de la ducha es probable que sientas más calor que antes de entrar.
Además de que no te ayudará a rebajar el calor, la ducha de agua fría puede tener riesgos. Por ejemplo, si acabas de hacer deporte, con la exigencia corporal que conlleva, el frío puede provocar un 'shock' ante el cambio brusco de temperatura.
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Sin embargo, el agua cálida o tibia generará una sensación de frescor, porque al evaporarse de la piel, la temperatura bajará. Por eso es recomendable no secarte nada más salir de la ducha, sino aprovechar la humedad residual para dejar que se evapore por sí sola y dejar que la evaporación te haga sentir fresco. Es un mecanismo similar a la idea de pulverizarte agua encima y dejar que se seque sola.
Lo mismo sucede al ingerir bebidas. Aunque ingerir líquidos fríos es lo más agradable, en realidad lo más efectivo para combatir el calor son las bebidas calientes, pues el cuerpo lo toma como una señal para bajar la temperatura. Así que, contrario a lo que seguramente creas, olvida la ducha fría y el refresco helado y cámbialo por un té y una ducha tibia.
Consejos ante la ola de calor
-Resguárdate del sol. Si sales de casa, que sea a primera hora de la mañana o a última hora del día, al atardecer.
-Mantén tu casa fresca.
-Bebe agua.
-Haz comidas ligeras y equilibradas.
-Mantente en contacto con tu entorno.
-Viste con ropa ligera.
-Evita esfuerzos físicos.
-No abuses de alcohol, cafeína o refrescos.
-Aumenta el cuidado de tus mascotas.
-No dejes a niños, niñas ni mascotas, ni personas mayores solas en el coche.
