Encargan un estudio previo para encomendar las basuras de Orihuela a una empresa pública
El informe dirimirá si conviene implantar la gestión a través de una sociedad municipal como paso previo a la votación de una encomienda de gestión en la antigua Surpal
El Ayuntamiento pisa el acelerador para encomendar la gestión de las basuras en la empresa municipal Servicios de Gestión Mediambiental SL (la antigua Surpal). La mercantil pública presidida por el exconcejal popular Dámaso Aparicio está llamada a hacerse con la encomienda de gestión, según los planes del equipo de gobierno PP-Vox. Antes de elevar este encargo a pleno, se hace preciso un estudio técnico y económico cuya redacción ha salido al fin este lunes a concurso público.
El objeto del informe es que la empresa que resulte adjudicataria evalúe la viabilidad de gestionar de forma directa los servicios de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos urbanos a través de la citada empresa municipal, resucitada por el ejecutivo de Pepe Vegara tras largos años de inactividad.
El presupuesto base que se estima para la redacción del informe de idoneidad es de 9.680 euros (IVA incluido), con un plazo máximo de ejecución de seis semanas. Aun así, se premiará aquellas ofertas que reduzcan los plazos al máximo.
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La voluntad del equipo de gobierno es que la encomienda de gestión, en caso de que el informe lo avale, se vote por parte de todos los grupos políticos en el pleno de enero o, en su defecto, de febrero. Un paso que recuerda al recientemente dado también en el caso de Ildo, que, aparte de la gestión de los jardines de las pedanías y de la zona azul, esta legislatura deberá asumir las zonas verdes de la costa. Todavía pendiente de poner en marcha tras muchos años con Actúa prestando este servicio fuera de contrato.
Condiciones «obsoletas y deficitarias»
Este nuevo estudio sobre las basuras, según recoge la memoria publicada en el portal municipal de contratación, surge ante la necesidad de analizar alternativas a la actual prestación directa del servicio, que, según los técnicos municipales, presenta deficiencias importantes. La gestión, asumida de forma excepcional y provisional en 2012 tras la resolución del contrato con la anterior adjudicataria vinculada a la familia Fenoll, continúa operando en condiciones que se califican de «obsoletas y deficitarias». No en vano, las condiciones actuales del servicio y su dimensión fueron planificadas para el tamaño poblacional que tenía Orihuela en 2008.
Entre los problemas destacados, figuran la falta de personal suficiente para atender necesidades ordinarias y extraordinarias, el elevado absentismo laboral, una flota de vehículos y maquinaria anticuada con altos costes de mantenimiento (en algunos casos heredada de la contrata privada), y la ausencia de sistemas tecnológicos modernos y sostenibles. Problemas a los que se les ha estado intentando poner parches con la contrucciónde un nuevo centro de trabajo en la costa o la adquisición de algunos vehículos y maquinaria que todavía son insuficientes.
Más medios materiales
En estos momentos, de hecho, se encuentra en licitación dos nuevos contratos para reforzar más los medios materiales disponibles tras un año largo de espera. Estas adquisiciones fueron de hecho una de las primeras iniciativas del actual ejecutivo PP-Vox a su llegada, cuando se sacó gran cantidad de remanentes de tesorería para financiar proyectos como este.
El objetivo del nuevo informe es recopilar y analizar información detallada sobre los recursos actuales (contenedores, rutas, vehículos, personal, etc.) y evaluar la normativa vigente, con el fin de determinar si la prestación directa del servicio mediante la empresa municipal es la opción más eficiente y sostenible. Un estudio de la consultora Garrigues impulsado por el propio Dámaso Aparicio cuando ostentó las competencias de RSU ya apuntaba a esta solución como una alternativa más garantista que el actual modelo gestión directa por parte del Ayuntamiento.
Cuestión de agilidad
Desde el equipo de gobierno valoran que la asunción del servicio por parte de una empresa municipal optimizará más la gestión. Actualmente los trabajadores de la contrata forman parte del personal del Ayuntamiento y su reemplazo es complicado. Asimismo, cualquier adquisición de material, desde vehículos hasta bolsas de basura, deben pasar por licitaciones que se demoran demasiado para atender urgencias. En el ejecutivo municipal entienden que, con Surpal al mando, esas contrataciones serán más ágiles. Todo ello, de momento, sin renunciar a una gestión que seguirá siendo íntegramente pública, aunque no se descarta que, en un futuro, si los resultados no son satisfactorios, se pueda abrir la puerta a la entrada de capital privado en la antigua Surpal.
La Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local establece que los municipios deben prestar servicios básicos como la limpieza viaria y la recogida de residuos de la manera más sostenible y eficiente posible. Esto puede realizarse mediante gestión directa o a través de entidades públicas empresariales o sociedades mercantiles de capital íntegramente público, siempre que se justifique su viabilidad técnica y económica.
El estudio incluirá, entre otros aspectos, una evaluación de costes, necesidades de personal e infraestructuras, y un análisis del cumplimiento normativo. Además, el Ayuntamiento busca garantizar que la prestación cumpla con las exigencias legales y los planes de residuos municipales.
La antigua Surpal fue creada en sus orígenes, en los años 80, para gestionar la urbanización del polígono Puente Alto. En los últimos meses, el actual gobierno local ha nombrado a los nuevos miembros del consejo de administración, actualizado las cuentas y el patrimonio de la sociedad pública. También se ha puesto en marcha las mesas de contratación, con proyectos básicos como la asesoría jurídica ya en licitación. Pasos que se han dado no sin polémica por parte de los consejeros de la oposición, que tienen la lupa echada a cada movimiento del gerente Aparicio y siempre con el recuerdo perenne de todo lo acontecido en el pasado con las derivadas del -todavía sin cerrar- caso Brugal.
Prisas para aprobar la tasa
Asimismo, sobre la mesa está la actualización de la tasa de basuras, la cual subirá este próximo año en un 250% fruto de la aplicación de una ley estatal que adaptar a su vez una normativa europea. La propuesta recibió su aprobación inicial en pleno el pasado noviembre gracias a un acuerdo entre PP y PSOE, que incluía una serie de bonificaciones a colectivos vulnerables. Un escudo social que grupos como Cs o el propio secretario municipal pusieron en duda que se puedan llevar a término porque la ley exige que la tasa cubra el coste íntegro del servicio.
El periodo de alegaciones vencía este mes y, según ha podido saber este diario, solo se han presentado dos alegaciones, que ahora deberán ser resueltas a favor o en contra por los servicios técnicos municipales. Con este paso hecho, el tiempo apremia al ejecutivo, ya que la nueva tasa debe estar plenamente vigente, es decir, publicada en diario oficial antes del 31 de diciembre para que se empiece a cobrar con el nuevo año. Eso requerirá, claro está, de un pleno extraordinario y urgente.
