'Al que no quiere caldo, dos tazas'. Después del acuerdo alcanzado en la Comunidad Valenciana y Baleares entre PP y Vox para aprobar sus ... presupuestos, le tocaba el turno a la Región de Murcia. Se caía por su propio peso, aunque el pacto llega tarde, y además con una cesión total de los populares a las exigencias de los voxistas, que tras un interminable goteo de exigencias han conseguido colocar el lote completo. Unos requisitos que ya estaban recogidos en gran parte en el acuerdo de investidura de López Miras. No hay de qué extrañarse. El equipo de José Ángel Antelo ha cantado bingo justo un año después de que abandonara el Gobierno regional, señal de que Vox está más cómodo haciendo oposición.
Las exigencias de Vox tienen escaso calado financiero, ya que lo que realmente interesa a la formación de Abascal es el terreno ideológico, poder colocar su discurso sobre la inmigración, el rechazo al Pacto Verde europeo, el cambio de la ley el Mar Menor y el recorte de asignaciones a patronal y sindicatos, entre otros puntos no menos importantes como la llamada «neutralidad ideológica y ausencia de adoctrinamiento en las aulas».
Es llamativo que la opción mayoritaria de los encuestados por el Cemop para LA VERDAD (un 47,6%) fuera un pacto PP-PSOE para sacar adelante las cuentas, lo cual suscita reflexiones interesantes, pero al final se ha impuesto la 'realpolitik' murciana con unos toques madrileños.
Habrá que ver cómo maneja el PP algunos acuerdos, como el cierre del centro de menas de Santa Cruz, o el rechazo a acoger a más menores inmigrantes. En cuanto al Mar Menor, el trámite de reforma se encuentra a medias, sin saber si la Asamblea parirá al final una paloma o un halcón, aunque algunos se olvidan de que aparte de la ley regional, están las medidas restrictivas de la CHS.
Como apunte final, el consejero Marín opta por la prudencia en las macrocifras, lo cual es razonable para un presupuesto anclado en un marco incurable de infrafinanciación, y en un escenario estatal al albur de las exigencias de los separatistas.
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