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Cristalización de las preferencias políticas

CENTRO DE ESTUDIOS MURCIANO DE OPINIÓN PÚBLICA (CEMOP). GRUPO ESPECIAL DE INVESTIGACIÓN DE LA UNIVERSIDAD DE MURCIA

Martes, 26 de enero 2021, 01:34

El Barómetro de Invierno del Cemop muestra una cristalización de los cambios en las tendencias de voto que ya habían sido anunciados tanto en el estudio de primavera de 2020, al inicio de la pandemia, como en el de otoño de ese mismo año. Esta nueva toma de datos confirma, por una parte, el cambio de preferencias experimentado tras el rally electoral de 2019, y, por otra parte, muestra un escenario de gobernabilidad que pasa siempre indefectiblemente por el Partido Popular.

De celebrarse hoy las elecciones a la Asamblea Regional, el Partido Popular obtendría el 38,7% de los votos válidos a candidatura y 19 escaños, frente a los 14 escaños y el 27,6% de voto que conseguiría el Partido Socialista Obrero Español. El PP mantiene este porcentaje de voto prácticamente inalterado desde la primavera de 2020, mientras que el PSOE se estabiliza en torno a este 27%, porcentaje similar al obtenido en la toma de datos de otoño de 2020. Por el momento, y mientras se mantenga como referente político principal el escenario actual dominado por la crisis de la Covid-19, este parece el marco más probable de competición entre los dos grandes actores de la política de la Región de Murcia.

También se produce una estabilización de las preferencias en el resto de los actores del sistema partidista. Unidas Podemos se mantiene inalterable desde las propias elecciones de mayo de 2019, con estimaciones cercanas al 5% y dos escaños. También se puede dar por consolidado, a corto plazo al menos, el escenario para Vox y Ciudadanos. Sus resultados actuales en el Barómetro de Invierno apenas difieren de las mediciones del otoño, y cristalizan las tendencias que se iniciaron en el marco del ciclo electoral de 2019: Ciudadanos estabiliza sus resultados en torno al porcentaje de voto que obtuvo en las Generales de noviembre de 2019, y que han sido las predicciones más estables tanto en los barómetros de primavera como de otoño de 2020, y Vox mantiene la fuerte presencia electoral, que se confirmó ya en primavera y se estabilizó en los últimos datos registrados en otoño.

Desde un análisis de comportamiento electoral, las captaciones y transferencias dentro del sistema se mantienen estables respecto a la medición de otoño.

Desde las elecciones de mayo de 2019, hay dos grandes captadores de voto, Vox y el PP, aunque este último con un matiz, y dos grandes transferidores de voto: el PSOE y, en especial, Ciudadanos.

El PP capta en términos netos, desde mayo de 2019, unos 12.000 electores del PSOE (su mayor captación desde mayo de 2019), unos 14.000 de Ciudadanos y unos 18.000 abstencionistas (seguramente antiguos votantes del PP en comicios anteriores a mayo de 2019). Y transfiere unos 10.000 electores a Vox, cifra que se mantiene estable con el paso del tiempo y que no tiene visos a corto plazo de volver a su lugar de origen.

Además de estos diez mil votos que capta del PP, Vox se alimenta de los electores de partidos que no obtuvieron representación, unos 7.000, y principalmente de abstencionistas y nuevos electores, unos 18.000. Es el partido que mejor se desempeña en la captación de electores que no votaron en las autonómicas de 2019, una característica habitual entre los partidos populistas de la derecha radical.

Por su parte, el problema de la reducción de votos en el marco de Ciudadanos y del PSOE, con sus transferencias al PP, se agrava por el refugio que sus electores de 2019 hacen en la abstención o desmovilización, siendo de unos 20.000 en el caso del PSOE y de unos 16.000 en el caso de Ciudadanos.

La consolidación de esta tendencia que se observó en el Barómetro de Primavera y ahora toma un carácter más consistente con los datos de Otoño e Invierno, implica también una modificación en las posibles coaliciones de gobierno. El PP podría seguir gobernando como hasta ahora, en minoría con Ciudadanos con la aquiescencia parlamentaria de Vox. Pero también se le abre la alternativa de un gobierno en mayoría con Vox, sin necesidad de la participación de Ciudadanos, ni siquiera de su apoyo parlamentario. Por el contrario en este escenario, no hay una coalición de gobierno alternativa, dado que la suma de la izquierda, incluso contando con un pacto de ésta con Ciudadanos, no les daría la oportunidad de ser gobierno.

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