Los vecinos amplían la denuncia por las riadas al Mar Menor desde los cultivos

Los vecinos afectados por las riadas de agua y lodo procedentes de los campos de cultivo que rodean el Mar Menor en la ribera sur han ampliado su denuncia por delito ambiental contra propietarios de terrenos de la zona y empresas agrícolas, ante los nuevos episodios de inundaciones y de contaminación de la laguna ocurridos este otoño, en particular por el temporal de los últimos días.

La Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena y Comarca, que ejerce la acusación popular y Miguel Guillén, un residente de la zona personado como acusación particular y representado por el abogado Eduardo Salazar, pidieron ayer en el Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad que tenga en cuenta los daños sufridos por bienes públicos y privados en Los Nietos, Mar de Cristal y otras localidades del municipio.

Con motivo de una declaración en el juzgado, donde se ratificaron en su acusación, el representante de la Federación Ángel Monedero y el vecino que actúa a título propio explicaron que las lluvias torrenciales han vuelto a afectar a garajes, locales comerciales y viviendas, así como a zonas de baño.

«Desde que pusimos la denuncia, en mayo del 2015, hemos ido haciendo ampliaciones. En este caso, hemos informado de lo ocurrido desde el 23 de noviembre hasta hoy mismo. Cada vez está más claro que las nuevas explotaciones agrícolas son uno de los focos que está contaminando el Mar Menor, porque desde ellas proceden nitratos y arcillas. El agua está marrón porque hay arcillas y llega a los pueblos y al mar porque, desde 2012, se hicieron obras que han generado canalizaciones», dijo Monedero. Y añadió: «En otros pueblos del litoral ha habido desbordamientos de ramblas, como la del Albujón en Los Urrutias, pero en esta otra parte no hay ramblas. Las han creado de manera artificial con las roturaciones ilegales de los terrenos, para convertirlos en zonas de cultivos intensivo».

Monedero se refirió también al «miedo» que impera entre los vecinos cada vez que hay amenaza de lluvia, y denunció que la Comunidad Autónoma tiene paradas desde noviembre las obras de construcción de un sistema de contención en Mar de Cristal y que aún no ha licitado las de Los Nietos.

Una empresa niega daños

Acerca de ambos proyectos, criticó que la Consejería de Agricultura, Agua y Medio Ambiente haya optado por el procedimiento de urgencia, porque, según indicó, «quieren evitar el trámite de evaluación de impacto ambiental, pero como no hacen estudios geológicos se topan con que hay rocas a un metro y medio de profundidad y hay que parar la obra». «Y encima -añadió Monedero- es una supuesta urgencia, porque va a llegar el invierno y hay obras sin iniciar, con lo cual no estarán listas para el próximo verano y seguramente tampoco para el otoño» de 2017.

La titular del juzgado, María Pascual, tomó declaración también como denunciante al presidente de la Asociación de Vecinos de Villas Caravaning, Juan García, y a un representante de la empresa Ans Inversiones Mediterráneo SL, que explota campos de cultivo en régimen de alquiler. Según fuentes del caso, la mercantil desvinculó las obras realizadas en sus parcelas con las riadas.