El lince se cruza en el proyecto de la autovía Lorca-Caravaca

«Construir una nueva autovía cerca de la zona de suelta no parece la mejor de las bienvenidas posibles», advierte la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) ante este proyecto, anunciado el lunes en Lorca por el consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga, que supone recuperar una idea planteada hace trece años y que se iniciaría entre 2026 y 2027 con un coste de más de 500 millones de euros.

«Queremos que suelten linces pero no la responsabilidad de conservarlos. Aún falta mucha sensibilidad ambiental en la Región de Murcia; quizás el lince nos va a llegar demasiado pronto», añade el biólogo de ANSE Jorge Sánchez, quien recuerda que los atropellos son la mayor causa de mortalidad de los linces ibéricos, que ya cuentan con más de 1.400 ejemplares en libertad gracias al éxito de la estrategia de recuperación de la especie, apoyada con cuantiosos fondos europeos, que se inició hace más de veinte años, cuando el 'Lynx pardinus' parecía abocado a la extinción.

También la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de los Mamíferos (Secem) se sumó a las críticas a través de las redes sociales: «Si el planteamiento era ese, mejor no haber considerado la zona para la reintroducción del lince ibérico. Se podrían haber priorizado otras zonas. Y si los responsables políticos lo sabían previamente, es una negligencia grave. Es absurdo pensar en liberar linces en una zona que está sujeta a un plan de desarrollo de infraestructuras de esta envergadura», lanzó esta sociedad científica.

La selección del conjunto de espacios protegidos y montes públicos en las pedanías altas de Lorca, colindantes con el Parque Natural de Sierra María-Los Vélez y otras áreas montañosas de Bullas, Cehegín y Caravaca de la Cruz, cerró un estudio minucioso de gran parte de la geografía regional en la que se descartaron otros enclaves a priori propicios como el Altiplano, la Sierra de La Pila y zonas en tramos altos del río Segura como Moratalla, Calasparra y Cieza. En unos casos, por la ausencia de conejo, la presa principal del lince; y en otros, por no llegar a la superficie mínima de 10.000 hectáras con el hábitat adecuado y sin fragmentaciones importantes por infraestructuras como carreteras, autopistas o vías de ferrocarril.

El área elegida finalmente es una de las más despobladas de la Región, aunque cuenta con núcleos habitados y carreteras con posibles puntos negros de atropellos que la Consejería de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación ya ha detectado y donde va a acometer obras para mejorar la seguridad ante la presencia de los felinos (cuatro parejas en total, de aquí al verano), según confirma el Gobierno regional.

Acerca de la futura construcción de la autovía Lorca-Caravaca de la Cruz, este departamento asegura que el Gobierno regional «está actualizando el proyecto» y que «evidentemente se realizará la evaluación ambiental y se tendrán en cuenta todas las afecciones medioambientales necesarias para no perjudicar el entorno natural».

«Una autovía no tiene por qué ser más insegura para los linces que una carretera convencional», declara a LA VERDAD el coordinador del Proyecto Life Lynxconnect, el técnico de la Junta de Andalucía Javier Salcedo. «No conozco el proyecto de esa obra y por eso prefiero ser prudente, pero siempre es más complicado establecer medidas de protección en vías ya en funcionamiento que preverlas en proyectos de nueva construcción, sometidos además a evaluación ambiental», añade Salcedo, quien «confía plenamente» en el trabajo de los técnicos de la Dirección General de Medio Natural y en «la selección de un espacio idóneo para los linces que ha llevado años encontrar».

Acerca del peligro que suponen las vías de comunicación para los linces y otros animales, Javier Salcedo recuerda que otra área de reintroducción reciente, Sierra Arana (Granada), se encuentra cerca de la autovía A-92. En este entorno, explica, se están instalando sensores lumínicos y sonoros para evitar atropellos.

La adecuación de carreteras, autovías, vías férreas y otras infraestucturas con pasos de fauna y otras soluciones que las hagan 'permeables' a la circulación segura de los linces es una reivindicación recurrente de grupos ecologistas y organizaciones científicas, ya que el éxito del proyecto de conservación de la especie y el funcionamiento óptimo de los centros de cría en cautividad está propiciando una expansión continua de los felinos, a menudo a merced del tráfico durante su búsqueda de nuevos territorios.

Unas aventuras de exploración en ocasiones sorprendentes: como la de 'Litio', el lince que en 2018 llegó hasta las cercanías de la ciudad de Barcelona desde Portugal, y especialmente el de 'Kentaro', que murió en 2016 en Galicia, arrollado por un automóvil, después de recorrer 2.400 kilómetros por el centro y el norte de la península tras ser liberado en los Montes de Toledo a finales de 2014.