Borrar
Blas Cantó en la furgoneta, antes de un concierto. vicente vicéns / AGM
Estío a la murciana

Blas Cantó: «No suelo escuchar mis propias canciones»

El antiguo miembro Auryn es uno de los cantantes murcianos del momento

Martes, 23 de julio 2019, 09:22

Comenta

Nacido en Ricote, criado y estudiado en Molina de Segura y en la actualidad residente en Madrid, Blas Cantó se ha ganado a todo el mundo en base a su enorme capacidad vocal, tanto como a su encanto personal. A sus 27 lozanos años ya ha tenido tiempo de ganar varios concursos juveniles, de haber formado parte de la 'boy band' Auryn, de proclamarse vencedor del programa televisivo 'Tu cara me suena', así como de iniciar hace un par de temporadas una carrera en solitario saldada de momento con un único álbum, 'Complicado' (2018), disco con el que alcanzó el Top 1 y cuya gira apenas le deja tiempo libre. Una (bendita) ocupación que lo trajo hace poco a Cieza, donde respondió amable las preguntas de 'La Verdad'.

DOCE TRAGOS

  • 1 -¿Un sitio para tomar una cerveza? -En la plaza de Santo Domingo, en Murcia.

  • 2 -¿Una canción? -'Love of my life', de Queen.

  • 3 -Libro para el verano. -'Firmamento', de Maxim Huerta.

  • 4 -¿Qué consejo daría? - Déjate llevar por tu intuición. Primero hay que escucharse a uno mismo.

  • 5 -¿Cuál es su copa preferida? -No suelo beber, pero me gusta el ron miel.

  • 6 -¿Le gustaría ser invisible? -A veces sí, tiene que ser alucinante.

  • 7 -¿Un héroe o heroína de ficción? -El Chapulín Colorado, es el mejor.

  • 8 -Un epitafio. -Fue generoso con todo el mundo.

  • 9 -¿Qué le gustaría ser de mayor? -Viejo.

  • 10 -¿Tiene enemigos? -Si hablo por boca de ellos se hacen más poderosos. Prefiero pensar que no.

  • 11 -¿Lo que más detesta? -Las mentiras y la deslealtad.

  • 12 -¿Un baño ideal? -En el Balneario de Archena.

-Imagino que se le presenta un verano sin tregua.

-Sí, la verdad es que tenemos una gira muy extensa, no solo ahora de cara al verano, sino que llevamos enlazando desde hace año y medio. No tengo la sensación de haber parado.

-Después de los conciertos, ¿es de salir a alternar?

-No, no... No soy de esa clase de artista. Sé que eso es muy rock and roll, pero yo soy un poco más... Soy distinto, no sé. A veces sí que me doy una vuelta, pero normalmente me suelo ir a dormir pronto.

-¿Tiene manías o alguna superstición de cara a los conciertos?

-Bebo mucha agua. Yo creo que también es porque soy de Murcia y he sufrido su falta desde pequeño. Hemos sido ahorradores de agua, de poquito a poquito, y esto me lo han inculcado de siempre. Bebo mucha agua, ahora que puedo [ríe].

-¿Cuándo se perderá en alguna isla griega o algo?

-No creo que haga falta ir a ninguna isla griega cuando tengo las playas de Murcia aquí al lado. Calblanque me encanta y hay muchos sitios que tengo ganas de visitar. La verdad es que sí necesito descansar. Necesito un tiempo para mí, para mi familia, para mis amigos y para construir de nuevo. Y creo que es lo que va a pasar después del último concierto de la gira, el 17 de diciembre en Madrid.

-¿Se suele poner nervioso antes de salir a escena? Le imagino una persona bastante tranquila.

-Créeme que soy muy nervioso, en mi vida, con los amigos, trabajando... Antes de salir al escenario trato de estar en calma, pero siempre me pongo muy nervioso, es algo que me caracteriza. Siempre estoy para acá y para allá, bebiendo un último trago de agua, calentando la voz, comprobando que el micrófono esté bien... Es como que tengo que estar pendiente de todo. Pero trato de calmar todos esos nervios para dar lo mejor de mí.

-Nació en Ricote, pero pasó la infancia en Molina.

-Sí, en Molina de Segura. Realmente me empadronaron en Archena, donde solo estuve 16 meses, luego me fui a Ricote y con 12 años o así me fui a Molina de Segura porque allí podía hacer el conservatorio y el instituto en la misma ciudad. Así que mi madre compró una casa en Vega de Thader, que fue mi casa durante muchos años.

-¿Qué recuerdos guarda de aquellos años, a qué solía jugar?

-En Ricote, hasta los 12, estuve en un colegio público donde jugábamos al fútbol.

-¿Era bueno?

-No era de los mejores, pero era un buen defensa [ríe].

-¿Solía veranear con su familia?

-Nosotros nunca hemos tenido dinero para ir a veranear a la playa. Sí que íbamos a pasar el día con el coche de mi madre, estos viajes de ida y vuelta. Nunca tuvimos para permitirnos unas vacaciones de 15 días o incluso de una semana. Por eso ahora cuando puedo lo hago y vamos toda la familia.

-Y de adolescente, ¿era muy bala o más bien buen chico?

-Era un balilla, lo que pasa es que era bueno. He sido revoltoso, pero malo no.

-Me decía que le gusta controlar hasta el último detalle, ¿no?

-Sí, suelo estar bastante encima de las cosas, me gusta estarlo, entender qué sucede a mi alrededor. No me gustaría ser un ignorante, quiero saber qué pasa y por qué. Y cuido bastante a la gente que está a mi alrededor, me parece fundamental que todo el mundo esté contento.

-Dice Quique González que los músicos son inseguros y obsesivos por naturaleza. ¿Lo es también Blas Cantó?

-Yo creo que de algún modo forma parte de nuestra personalidad. Somos un poco locos, pero eso es lo interesante, aunque normalmente sabemos lo que queremos. Creo sinceramente que, aunque estemos un poco locos, normalmente sabemos lo que queremos. La inseguridad está invitada siempre, pero cuando estás en el escenario desaparece.

-¿Qué decisiones le cuesta tomar?

-Me gusta escucharme a mí mismo, eso para mí es muy importante. Oírme primero a mí y luego al resto. Sé que puede parecer un poco egoísta pero creo que debemos serlo, porque a veces la intuición de uno es mucho más importante que lo que te puedan decir porque al final las opiniones son muchísimas y cada una es diferente. Lo primero es escucharse a uno mismo y luego ya dar pasitos acompañado de un gran equipo, que tengo la suerte de tener.

-Escucharse en el escenario y también en la vida.

-Exacto. Escuchar a tu corazón.

-Da la impresión de ser una persona muy natural y accesible.

¿Cómo lleva el fenómeno fan, los autógrafos, las fotos...?

-Pues no sé, bien. Supongo que forma parte de esto y no todo el mundo tiene la oportunidad de ser interrumpido en la calle y recibir el cariño. Quieren guardar un recuerdo, entonces sí lo entiendo y lo hacemos con la mejor de las sonrisas. Hay que ser agradecido.

«La intuición es importante, no siempre hay que hacer lo que a uno le dicen que haga, por eso estoy aquí»

Fenómeno fan

-¿Es importante la generosidad?

-Muy importante. Porque además el día de mañana quien fue tu trabajador se puede convertir en tu jefe y porque no sabes las vueltas que puede dar la vida. Y sobre todo y lo más importante, por sentirme bien conmigo mismo y tranquilo. Quiero estar tranquilo con las cosas que digo y hago con los demás. O a los demás. Es importante para mí.

-Las redes sociales ni tocarlas, supongo. ¡Menuda locura!

-Sí, sí que las toco. Es la nueva vida y aunque yo soy un poco de vieja escuela en ese sentido y me cuesta un poco, sí que las llevo.

-Es muy joven pero, ¿le gustaría ser padre en algún momento? ¿Lo ha pensado?

-Sí, sí me gustaría y además es algo en lo que pienso a menudo. Solamente tengo un perrito, un pomerania, y apenas puedo cuidarlo, me ayuda gente porque siempre estoy fuera. Cuando puedo me lo llevo. Pero imagino que si es difícil un perrito, un bebé o una bebé tiene que ser lo más grande y tienes que dedicarle todas tus horas, entonces de momento no está en mis planes. Pero sí que últimamente me lo planteo.

-Visto desde fuera, su carrera parece un guion de Hollywood.

-¿Ah, sí? Pues muchas gracias [ríe]. Constantemente luchas contra mil factores que no dependen de ti, pero lo más importante, como te decía, es escucharte a ti mismo. A la hora de hacer música no siempre hay que hacer lo que a uno le dicen que haga. Y yo creo que por eso estoy hoy aquí, porque casi nunca hice lo que me dijeron que debía hacer.

-Que además imagino que no serían pocos.

-Claro, al final no dejan de ser opiniones. Pero creo que tenemos que seguir nuestro destino e ir marcándolo nosotros a nuestro ritmo, ni muy lento ni muy rápido, hay que ir a paso firme.

-¿Está un poco al tanto de lo que sucede musicalmente en Murcia?

-No sé, estoy al tanto de algunas cosas. Conozco a Road Ramos, que es una buena amiga y una gran compositora que ha hecho cosas maravillosas. Ha estado hace poco en México de gira. Hemos estado componiendo para próximos proyectos y me parece que tiene un talento increíble. Es de Molina de Segura, como yo, y de hecho su cumpleaños es el 26 de octubre, como el mío, aunque ella es un par de años mayor.

-¿Y en el ámbito social?

-Tengo pendiente saber lo que ocurre con el AVE, que no lo tengo muy claro. Me gustaría que lo solucionaran de alguna manera que no entorpeciera a la ciudad. No estoy muy al tanto, mi vida es un poco loca.

-¿Qué concierto nunca olvidará?

-Creo que la primera vez que fui con Auryn a Murcia. Fue como sentir que había dado un paso más en mi vida. Y traer a toda esta gente a mi casa... Al principio, como no teníamos mucho dinero dormíamos en mi casa. Y luego cuando regresé y canté en Molina de Segura, el año pasado, fue muy emocionante para mí. Uno cuando llega a su tierra se emociona.

-¿Y qué experiencia prefiere no recordar?

-No lo sé, fíjate, realmente no la recuerdo. Yo creo que nuestro cerebro se defiende a sí mismo y olvida las cosas negativas. Por eso no sabría decirte, creo que tenemos una autodefensa importante que nos hace olvidar los malos momentos y el dolor.

Solo entretenimiento

-Hay quien se queja de que los programas musicales de televisión sean básicamente 'reality shows'. Usted no se va a quejar, claro, pero, ¿cree que debiera haber otros formatos más de autor?

-Bueno, al final la televisión es entretenimiento. Una carrera no se hace por haber salido en la televisión. Eso es para consumir, para usar y tirar al día siguiente, es como un pañuelo. El mismo Freddie Mercury decía de sus canciones que eran como kleenex. Las carreras se construyen 'después de', no en ese momento que no deja de ser muy fugaz. Eso es solo entretenimiento.

-El caso es que funciona.

-Evidentemente, muchos lo han sabido usar a su favor y han construido una carrera grande porque tuvieron esa oportunidad. A veces no solo los 'realities' son entretenimiento sino lo que hacemos también. No todo trasciende, ojalá las buenas canciones siempre quedaran para la eternidad, pero a veces no es así y son solo para un momento en la vida de alguien.

-¿La voz es un talento natural o se puede trabajar?

-Evidentemente, hay que trabajar. A veces me preguntan si me gusta mi voz y es difícil de contestar, porque simplemente pienso que me gusta hacerlo, que me gusta cantar. Pero no me detengo a escucharla. No escucho mis propias canciones si no es para repasarlas de cara a los conciertos. La voz es un instrumento más y como tal hay que trabajarlo. Yo tuve la suerte de tener un gran profesor durante muchos años aquí en Murcia, Ginés Torrano Soler, ya fallecido y a quien recuerdo con mucho cariño.

-¿Qué tiene pendiente el joven Blas Cantó?

-Buf, muchas cosas. Quiero hacer muchas cosas y dejar huella de alguna manera. Y también ayudar a quien esté en mi mano.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

laverdad Blas Cantó: «No suelo escuchar mis propias canciones»

Blas Cantó: «No suelo escuchar mis propias canciones»