Blancos y azules preparan su artillería para la gran batalla en la arena de la carrera
Más de 300 caballos que han sido cuidadosamente seleccionados durante el año en picaderos de toda España, con características muy concretas para cada caballería y cada enganche, ocupan ya las cuadras de los pasos Blanco y Azul para participar esta noche en la procesión del Jueves Santo. Podrán ser visitadas hoy y mañana hasta pocas horas antes de la procesión del Perdón, en la que las dos cofradías rivales se batirán en el primer gran duelo por ofrecer el mejor espectáculo y levantar al público de sus asientos. Un año más, los aurigas llevarán las riendas de veloces cuadrigas y sigas y jinetes y amazonas realizarán depurados ejercicios de doma y arriesgadas acrobacias para deleitar a la grada. La procesión comenzará a las 19 horas desde la iglesia del Carmen, sede del Paso Morado.
La calzada por la que discurrirá este cortejo y el del Viernes Santo ya está preparada. Esta madrugada se acometió la segunda fase del enarenado con 450 kilos de zahorra, que se han distribuido por la carrera principal, en la avenida Juan Carlos I, y la secundaria, en la calle Lope Gisbert. El concejal de Limusa, Juan Miguel Bayonas, recordó que la arena tiene una composición específica creada para la ocasión, que mezcla tres sustancias calizas distintas para facilitar el paso de caballerías y evitar que se lastimen los animales.