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Deuda pública a cero del Real Murcia 805 días después

Y todo a falta del empujón definitivo, el salto deportivo al fútbol profesional que le permita acceder a los ingresos televisivos que le harán crecer todavía más. De hecho, de no ser por los últimos pagos a entidades públicas como Emuasa y el Ayuntamiento de Murcia previstos para 2025, en el cierre del ejercicio 2024-25 que se llevará a cabo el próximo 30 de junio los ingresos se habrían igualado a unos gastos anuales que este curso rondan los 5 millones. Y todo a pesar de que milita en el tercer escalón del fútbol español. Números que no maneja ningún club de la categoría, ni tampoco muchos de los que compiten en Segunda.

Con el anuncio el pasado lunes del último pago a las arcas públicas, en este caso las del Consistorio de la capital, el Real Murcia ha dejado el contador de la deuda pública a cero, un escenario por el que nadie hubiera apostado desde hace dos años para atrás. El del 5 de mayo (el abono de los últimos 50.000 euros) fue el último paso para tapar un agujero de 960.658 euros, cumpliendo así un calendario de pagos que ya ha borrado del mapa esta deuda privilegiada especial que el Real Murcia comenzó a abonar, tras años de bloqueo económico, el pasado 5 de diciembre de 2023, quedando zanjada, como estaba previsto, hace dos días. Un acuerdo similar al de Emuasa, en este caso de 399.000 euros, que también quedó a cero semanas atrás. Para asegurar el pago a estos dos últimos entes, el propio Moreno puso encima de la mesa un aval personal de 1,4 millones, dando muestras de la contundencia de su apuesta.

A su llegada al club, la deuda del Real Murcia superaba los 40 millones, pero hoy apenas quedan algunos rescoldos. Más de la mitad correspondían a la deuda privada que, en su gran mayoría, ha absorvido el Plan de Reestructuración de la entidad que apenas han impugnado algunos acreedores y que de salir finalmente adelante situará al club en la 'pole position' para ser en unos años uno de los grandes del fútbol español.

Además, estaban los 19,6 millones que sumaban los 13,8 de Hacienda, 4,3 de Seguridad Social, 399.000 euros de Emuasa y 960.658 del Ayuntamiento que se encontró Moreno y que ya son historia, un punto de inflexión que ha resucitado tras estar casi muerto.

Entre finales de abril y principios de mayo de 2023, a las pocas semanas de su llegada, el empresario cordobés comenzó a limpiar los cerca de 4,3 millones que el Real Murcia adeudaba a la Seguridad Social. Primero le transfirió 1,2 millones para llegar a un acuerdo para que cesaran los embargos. Además comenzó a abonar dos mensualidades agrupadas de 100.000 euros, para después seguir efectuando pagos de 200.000 euros cada dos meses. Hasta que el 28 de noviembre de 2023 hizo el último. De hecho, Moreno, cansado de los plazos, decidió acabar con el asunto antes de tiempo y soltó de una tacada otros 2.092.344,31 euros, recibiendo el certificado de estar al día el 10 de enero de 2024. Fue el primero de sus grandes logros y la primera muestra de que el empresario cordobés no iba a faltar a su palabra.

Respecto a Hacienda, el Real Murcia, en un escrito realizado en febrero de 2024, aseguró que, según los documentos oficiales de este organismo, la deuda grana con la misma, a 31 de diciembre de 2022, ascendía a 9.359.519,86 euros y que desde entonces se habían realizado por parte del club importantes ingresos. Así, a 22 de diciembre de 2023, y según documento público de la propia Agencia Tributaria, ésta se había reducido hasta los 6.272.485,91 euros tras un pago directo de 500.000 euros en febrero de 2023 cuando el club era gobernado por Agustín Ramos, más uno posterior de 2 millones de Felipe Moreno en mayo de 2023, mientras que también el agujero se había reducido gracias a cantidades embargadas por valor de 668.022,35 euros.

Quedaban algo más de 6,2 millones, agujero que fue tapado por Moreno y el club grana con los algo más de 3.2 millones de la ampliación de capital posterior a la aprobación del Plan de Reestructuración de la deuda privada (Moreno desembolsó 3.187.239 euros del total), más casi otros tres millones que también salieron del bolsillo del propio máximo accionista grana.

El pago de esa cantidad final tuvo lugar el jueves 18 de julio, a las 11.30 horas de la mañana, en una oficina del Banco de Sabadell de Murcia. Una a una se abonaron aquella mañana 120 actas de deuda antigua para cerrar una negro capítulo de la historia de la entidad, un agujero que comenzó a generar Jesús Samper en 2007 y que a la postre llegó a provocar el descenso, por motivos económico, a Segunda B en el verano de 2014. Es otra fecha histórica, como la del 22 de junio del mismo año en la que Hacienda reconoció que el Real Murcia estaba al día, otro gran logro en el historial de Felipe Moreno.

Tras más de veinte millones invertidos en el Real Murcia de forma directa e indirecta, parece lícito que Felipe Moreno, para poder acabar la temporada cuadrando las cuentas e incluso invirtiendo en varias infraestructuras necesarias para el estadio como los videomarcadores o los nuevos banquillos, además de otras mejoras, espere que ante el Antequera (sábado, 20.00 horas), a pesar de que sea medio día del club y los socios tenga que pasar por taquilla pagando 10 euros, «vengan 20.000 personas al estadio. Yo no puedo con todo esto, necesito ayuda», aseguró a Onda Regional el pasado domingo tras la victoria grana en el Rico Pérez.

De momento son solo algo más de 3.000 abonados los que han retirado su entrada, pero de aquí al sábado el presidente grana espera que sean muchos miles más.