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Una nueva evidencia se aprecia de la paulatina recuperación de fauna en el río Segura. La Asociación Medioambiental Keuper y la Asociación para el Desarrollo Rural del Campo de Elche-ADR ha documentado la existencia de varios ejemplares de nutrias. Y no es la primera vez en los últimos años que se ha detectado su presencia.
En mayo del año 2020, Daniel Martínez, miembro del área técnica del Juzgado Privativo de Aguas de Almoradí, captó la presencia de dos nutrias en el entorno del Azud de Alfeitamí, en Almoradí. De esta forma, se ha evidenciando la llegada de este mamífero que había desaparecido en los años 60, provocado por la presión humana, su caza, y después por la elevada mortandad de peces que trajo la contaminación al río, y con ello la desaparición de su hábitat.
En cuanto al último avistamiento, se enmarca en el proyecto de estas dos asociaciones que estudia la población de este mamífero en las comarcas de la Vega Baja y el Bajo Vinalopó. Las imágenes captadas han sido con cámaras de fototrampeo. La presencia de las nutrias se ha detectado en el azud y antiguo molino harinera de Sant Antoni en el viejo cauce del río Segura en Guardamar, a un kilómetro de la desembocadura.
La investigación realizada va más allá y, a través del análisis de las heces, busca averiguar también el impacto y abundancia de los microplásticos en la dieta de este mamífero.
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