Apoyo científico al trabajo de Pérez Ruzafa
Todavía quedan organismos y científicos terraplanistas que, con hipótesis fraudulentas, buscan satisfacer sus intereses espurios
En el año 2000 el autor publicó un artículo en la revista francesa Hydrogéologie, con el título: 'Transformaciones físicas, químicas y biológicas, por la acción ... de las aguas del Trasvase Tajo-Segura, en el Campo de Cartagena y en el Mar Menor'. En dicho artículo se mencionaban los efectos negativos producidos, especialmente en el Mar Menor, que con el tiempo se han agravado como se sabe, produciéndose una hipoxia el 16 de agosto de 2021 y un riesgo de extinción de ciertas especies animales, como caballito de mar, anguilas, mújoles o doradas.
Con el fin de al menos reducir el grado de contaminación, el autor propuso una serie de actuaciones, que vienen registradas en el libro 'El Mar Menor: estado actual del conocimiento científico' editado en 2009 por la Fundación Instituto Euromediterráneo del Agua (FIEA) y más recientemente en LA VERDAD del 18 de agosto de 2021, por lo que no vamos a repetirlas aquí de nuevo. No obstante, y con motivo de un artículo publicado en LA VERDAD el día 14 de mayo del presente año, en el que hace referencia a un trabajo reciente realizado por Ángel Pérez Ruzafa para la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (este conspicuo científico, recientemente condecorado con la Orden del Mérito Civil, es pionero en la investigación del Mar Menor, pues lleva estudiándolo al menos 35 años), voy a analizar alguno de los temas que aparecen en el periódico, pues el trabajo original completo no he tenido la ocasión de verlo.
Comenta varias veces que es necesario «extraer agua del freático y rebajarlo por debajo del nivel del mar (entre 1,5 y 2 m), conducir y tratar esas aguas y las salmueras eliminando los nutrientes y reutilizando esas aguas». Estoy totalmente de acuerdo en que urge realizar esta extracción, mediante sondeos de gran diámetro, existentes o nuevos (esto ya lo aconsejaba yo, en 2009, en el libro de la FIEA); con ello, al existir menos carga hidrostática, entraría menos agua contaminada al Mar Menor. Sin embargo, el nivel piezométrico rebajado (mal llamado nivel 'freático' por la sociedad en general, pues este último término se debe aplicar solo cuando se refiere a un acuífero aluvial, que no es el caso) no puede llegar a colocarse a una cota topográfica situada por debajo del nivel del mar, como dice Ruzafa, pues de esta manera se produciría una intrusión marina y un empeoramiento grave de la calidad química del acuífero Cuaternario, como ocurrió en la década de los años 70 del siglo XX. Esta actuación, que el Ministerio se muestra renuente a llevar a cabo, creo que debería haber sido la primera en realizarse. En mi artículo de LA VERDAD del 16 de agosto de 2021 decía: «Puesto que el agua subsuperficial sale mayoritariamente por la rambla de Albujón, hay que 'taponarla' ya, mediante la recogida de los excedentes y traslado hasta la planta desnitrificadora del Mojón, pero de forma segura y duradera, sin posibilidad de que existan frecuentes averías en la conducción, como viene ocurriendo». Parece ser que el Gobierno central tiene previsto colocar próximamente una tubería nueva de impulsión, pero mientras tanto la rambla-río está arrojando al Mar Menor 300 l/s de agua contaminada. El que demos prioridad a esta operación no implica que las demás actuaciones se tengan que detener o anular, especialmente las que propone en origen el Ministerio para la Transición Ecológica; lo que ocurre es que estas últimas suelen estar proyectadas a medio y largo plazo y el 'taponamiento' es relativamente rápido de realizar, además de ser el más perentorio.
Creo, igual que Ruzafa, que el desmantelamiento de la red de salmueroductos, en 2016 por la CHS, fue una actuación desacertada, pues son compatibles las medidas medioambientales, para salvar la laguna, con un desarrollo ordenado agrícola; incluida la utilización de plantas desalobradoras, ya que el agua subterránea del acuífero Cuaternario siempre fue de mediocre calidad química, pero si se trata, se puede utilizar.
Por último, y aunque soy consciente de ser repetitivo, quiero decir una vez más que la causa predominante de la eutrofización del Mar Menor está en el exceso aplicado en la agricultura de abonos nitrogenados y en los excedentes de regadío, al margen de que existan otros agentes contaminantes 'menores' (minería, industria, aguas residuales, etc.). Y lo digo porque todavía quedan organismos y científicos terraplanistas que, con hipótesis fraudulentas, buscan satisfacer sus intereses espurios.
En resumen, diremos que la llegada al Campo de Cartagena de las aguas del TTS ha creado mucha riqueza, especialmente en la agricultura, pero también ha originado transformaciones físicas, químicas y biológicas, casi todas negativas, en el continente y en el Mar Menor; este último, al ser más frágil, exige que se le preste mayor atención por parte de los organismos competentes, pero de una manera coordinada, hecho que parece ser que se está consiguiendo últimamente. Si esto fuera así, tengo esperanza de que con el tiempo el Mar Menor vuelva a recobrar la singularidad que siempre tuvo, teniendo en cuenta la capacidad regenerativa que posee.
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