Borrar
Nueva era en el cielo. «El Pilatus es un ordenador con forma de avión», explican en la AGA, porque es más seguro y con menos necesidad de combustible y mantenimiento. A. Salas
La Princesa en la AGA

Pilatus, el avión digital

El 'Arpón', según su indicativo de radio, ha llevado el sistema de enseñanza de vuelo a la era tecnológica

Domingo, 14 de septiembre 2025, 07:44

Comenta

El rugido del reactor ha dado paso al zumbido del turbohélice. La Princesa de Asturias se entrenará en el Pilatus PC-21, el avión suizo que ha sustituido al veterano C-101 en la Academia General del Aire y del Espacio (AGA), en San Javier. Con esta incorporación, el Ejército del Aire y del Espacio entra de lleno en la era digital. El nuevo sistema tecnológico deja atrás los mandos analógicos que utilizaron su padre, el Rey Felipe VI, y su abuelo, Juan Carlos I, durante su formación como pilotos militares.

El Pilatus PC-21, designado como E-27 en nomenclatura militar, 'Arpón' según su indicativo de radio, es un avión de entrenamiento avanzado con motor turbohélice Pratt & Whitney PT6A-68B, capaz de alcanzar velocidades de hasta 685 kilómetros por hora. Está dotado de una aviónica digital similar a la de los cazas de combate, con pantallas multifunción, sistema de navegación GPS, visualización frontal HUD y controles tipo HOTAS (Hands On Throttle And Stick). Su diseño permite realizar maniobras acrobáticas, vuelos en formación y simulaciones de combate, pero lo que convenció al Ejército del Aire y del Espacio para su compra es que ofrece una plataforma más eficiente y segura que sus predecesores.

Un motor turbopropulsor, con una hélice de cinco palas, le permite alcanzar los 685 kilómetros por hora y volar a más de 11.500 metros de altitud. Su autonomía alcanza los 1.333 kilómetros.

Ventajas operativas y logísticas

El Ministerio de Defensa ha invertido 445 millones de euros en la adquisición de 40 unidades del PC-21 y cinco simuladores, que permitirán unificar todo el proceso de enseñanza de vuelo en la AGA. «Es un salto considerable para la formación del Ejército del Aire», señaló la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, durante la firma del contrato con la compañía suiza. El sistema integrado permite practicar maniobras en tierra antes de ejecutarlas en vuelo, lo que reduce riesgos, optimiza las horas de vuelo y ahorra combustible. En concreto, la Princesa Leonor tendrá que superar 50 horas en el simulador durante este curso, antes de subir a la cabina del avión para despegar por primera vez sobre el Mar Menor.

Según un informe del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), la modernización de la flota de la AGA con el Pilatus PC-21 «acorta la transición hacia las cabinas de los aviones de combate modernos, lo que mejora la eficiencia y la seguridad de la formación militar». Este paso sitúa a España como uno de los países líderes en la formación de pilotos, sumándose a la lista de fuerzas aéreas de la OTAN que ya emplean este sistema.

Sucesor del C-101

El C-101, apodado 'Culopollo', fue el avión con el que Felipe VI realizó su 'suelta' en 1988. El reactor de fabricación española, tan elogiado por los pilotos de la AGA por su maniobrabilidad, sorprendía al comprobar su cabina analógica, propia de otro tiempo. Juan Carlos I, por su parte, se formó en los años cincuenta en aviones convencionales de hélice, sin apoyo digital ni sistemas automatizados. El Pillán, de origen chileno, fue el último modelo en uso para la fase elemental, pero ya retirado con la llegada del PC-21, que cubrirá toda la fase de aprendizaje, desde el tercer curso hasta el quinto.

Un sistema de enseñanza completo

Con la adquisición del lote de Pilatus, España se convierte en el mayor operador europeo del PC-21, por delante de países como Francia, Reino Unido, Australia o Suiza. «El excelente rendimiento y la capacidad de responder a todos los retos propuestos» es lo que convenció al Ejército del Aire para completar su cadena de formación con el método suizo, según explicó el subdirector general de Adquisiciones de Armamento y Material, el coronel Alfonso Francisco Torán Poggio.

Infraestructura y futuro industrial

La llegada del 'Arpón' ha supuesto una transformación profunda en la AGA. El Ministerio ha construido un edificio específico para los simuladores, con una inversión de 1,6 millones de euros, y proyecta una sede definitiva con un presupuesto de 5,5 millones. Además, se ha anunciado que España asumirá las funciones de mantenimiento, lo que abre nuevas posibilidades para la industria nacional.

Un paisaje que cambia

Los hangares de San Javier ya albergan los nuevos refugios para los aviones grises con morro rojo y banda amarilla, que lucen la bandera nacional en el fuselaje. El paisaje sonoro también ha cambiado: el rugido del reactor ha sido reemplazado por el silbido del turbohélice. La formación de Leonor se desarrollará en este nuevo entorno, donde la tecnología y la tradición vuelan juntas.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

laverdad Pilatus, el avión digital

Pilatus, el avión digital