El Museo de la Patrulla Águila expondrá tres aviones a orillas del Mar Menor

Serán aeronaves que han completado su periodo de actividad y se convertirán en pieza de museo, aunque el público podrá acercarse y visitar la cabina. Para los aficionados a la patrulla acrobática militar, se abrirá un punto de venta de variados productos de 'merchandising'.

El que ya es conocido como Museo de la Patrulla Águila modificará radicalmente el extremo sur de la línea de costa en la localidad, hasta ahora degradado por las escorrentías que bajan por la calle Coronel López Peña y por el tanque de tormentas. La solución más probable a esta avenida de aguas será un paso elevado que permita acceder al nuevo centro, que pretende convertirse «en un revulsivo para el turismo de Santiago de la Ribera, que siempre recibe a miles de personas con cada exhibición aérea», tal y como afirma el alcalde, José Miguel Luengo.

El Ministerio de Defensa ha cedido 5.000 metros cuadrados por un tiempo de 15 años, renovable por periodos iguales hasta un límite de 75 años. Para el proyecto, el Ayuntamiento invertirá más de un millón de euros en levantar este recinto dedicado a la cultura y la historia de la aviación militar.

Luengo asegura que esperan en breve el visto bueno al diseño por parte del Ejército del Aire, que será partícipe y supervisor de toda la actividad que se realice en el centro. Si no se presentan pegas, la licitación del proyecto se publicará en octubre y las obras podrían empezar a principios de 2023, según explicaron desde el Ayuntamiento.

En el edificio de 655 metros cuadrados construidos, se dedicarán al museo unos 47 metros cuadrados para las salas de exposiciones y multiusos, más otros 135 metros cuadrados para la cafetería con terraza. A este nuevo espacio se trasladará la oficina de turismo en un espacio de 50.000 metros cuadrados. Unos 2.150 metros cuadrados serán espacios libres ajardinados y, para viales y aparcamientos se ha calculado una superficie de 1.560 metros cuadrados frente al Mar Menor. La valla de seguridad del recinto militar se tendrá que retranquear unos metros hacia dentro, por lo que el Ayuntamiento tendrá que incluir este coste en el presupuesto. El Ayuntamiento prevé conservar una antigua garita de vigilancia, como elemento de la arquitectura militar.

En el convenio firmado entre las dos instituciones se especifica que el Ejército del Aire podrá contemplar la participación de su personal en determinadas actividades que organice el centro, pero también podrá disponer de este espacio para realizar acciones formativas, de difusión de la cultura aeronáutica y otras convocatorias relacionadas con la docencia. La AGA se reserva el derecho de vetar cualquier actividad que considere «lesiva para la imagen del Ejército del Aire o de las Fuerzas Armadas» o que no esté incluida en los usos acordados, como exposiciones temporales o permanentes de la cultura aeronáutica y militar, conferencias de la misma temática o relacionadas con San Javier, además de la oficina de turismo. Cualquier otra iniciativa deberá acordarse entre la dirección de la AGA y el Ayuntamiento.