Romper el tabú del suicidio adolescente: «Hablar con quien lo necesita no le incita a cometerlo»
La FAPA presenta una guía para las familias, elaborada por la experta Dolors López Alarcón, que derriba falsos mitos e informa sobre los factores de riesgo
La creencia de que hablar sobre el suicidio incita a cometerlo es un mito, una falsa creencia «que nos aleja de quien nos precisa o ... necesita. Debido al ocultamiento, las personas que están pensando en quitarse la vida no encuentran a nadie para poder compartirlo. Hablar con ellos de forma respetuosa, responsable, escuchando sin juzgar, discutir o ignorar estos sentimientos reduce el riesgo y alivia su angustia». Es una de las indicaciones básicas de la guía para familias 'Prevenir el suicidio', que este martes presenta la Federación de Padres de Alumnos (FAPA) Juan González, y que ha sido elaborada por la experta Dolors López Alarcón, asesora del Ministerio de Salud y coordinadora del Plan de Formación del Profesorado en prevención, detección e intervención del suicidio de la Conselleria de Educación de la Generalitat Valenciana. Dolors López es además autora de 'Te nombro', un libro en el que recoge sus años de travesía por el dolor tras la muerte de su hija.
La experta y madre ha querido compartir todos los conocimientos que le han proporcionado sus experiencias vitales y profesiones en la guía para prevenir el suicidio entre los menores y adolescentes, en la que detalla de forma clara y concisa información clave para enfrentar en familia la situación. «Es clave hablar y preguntar ante cualquier señal; hablar de ello no incita, lo previene; y no solo eso, hay que tener el valor de repreguntar. La palabra suicidio hay que atenderla, hay que escuchar y estar», reclama.
La guía, que apuntala la idea de que la palabra suicidio no puede ser tabú, desmonta una serie de mitos, además del de que hablar sobre la autolisis incite a cometerla. «Pensar que si se dice no se hace es falso. La mayoría de suicidios vienen precedidos de alteraciones en la conducta habitual y de señales verbales. No hay que ignorar las amenazas y autolesiones. Considerarlas como una búsqueda de atención y chantaje nos aleja de la posibilidad de anticiparnos a una desgraciada muerte». La guía desglosa como falsos mitos sobre el suicidio creencias equivocadas como que solo las personas con trastornos mentales se suicidan, que la persona con conducta suicida está decidida a morir, y que solo los profesionales pueden prevenir un suicidio. «La verdad es que asusta, nos hace sentir inseguros, pero no podemos dejar que nadie se desmorone en nuestro entorno sin intentar ayudarle. Hablar del suicidio con alguien que lo necesita no va a quitarle la vida; al contrario, le ayuda a que no se la quite».
Entre los factores de riesgo, la guía detalla como primero la tentativa reciente de suicidio, y los trastornos mentales, con prevalencia de la depresión, como segundo. Entre los factores protectores, figuran la imagen positiva de uno mismo, la buena autoestima, la conducta extrovertida, las redes de apoyo, los protocolos de actuación y la formación de los adultos de referencia (profesores, médicos, orientadores...).
Entre las señales de alarma que deben ser tomadas en consideración, detalla la guía editada por la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), destacan las señales verbales (despedidas o escritos fuera de lo común, expresiones repetidas relacionadas con la muerte, los comentarios que expresan desesperanza...) y los cambios repentinos en el comportamiento habitual que se mantienen en el tiempo (resolver asuntos pendientes cuando no es el momento, signos depresivos de todo tipo, un acontecimiento desencadenante de importancia, tristeza, entrega de posesiones valiosas, despedidas en las redes sociales, conductas temerarias…). La guía será presentada por su autora a las siete de la tarde de este martes en el Centro Cultural de Santiago y Zaraiche.
Los últimos datos sobre los suicidios dejan una devastadora cifra en la Región de Murcia: entre los menores de 29 años, el número aumenta más de un 90%, de los 11 casos en 2020 hasta los 21 suicidios en 2021, según publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) y tal y como pone de manifiesto la Federación de Salud Mental de la Región en una nota de prensa. El incremento de los suicidios entre los menores de 29 años registrado en la Región en 2021 supone casi duplicar las cifras de 2020. Los datos se publican cada dos años por el INE. Además, el 16,7% de los estudiantes de entre 12 y 18 años han tenido en algún momento «ideas de quitarse la vida», el 7,5% ha llegado a planificar cómo hacerlo, y el 4,9% ha protagonizado intentos de suicidio.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión