Sanidad y educación centran un nuevo Plan Estratégico regional tasado en 4.430 millones

La inversión en que están cuantificadas todas las medidas del plan alcanza los 4.430 millones de euros, según el documento final confeccionado por el Ejecutivo autónomo, y en él se presta una mayor atención a los ejes centrados en la mejora de la asistencia sanitaria y de la educación, que son de los mejor dotados económicamente.

El Plan Estratégico parte de un análisis de los puntos débiles de la Región de Murcia para precisar los aspectos en los que más hay que incidir y que requieren actuaciones prioritarias. Entre las debilidades que se apuntan está el menor porcentaje de población matriculada en educación superior y la «desconexión» de la formación, tanto la superior como la FP, de las necesidades del tejido productivo. También se alude a la alta tasa de fracaso y abandono escolar y a que la Región esté por debajo de la media española en competencias de matemáticas y científica.

Poseer salarios inferiores a la media (11,5% menos en 2020 por hora trabajada), situación que se da en todos los sectores productivos, y la concentración de las exportaciones en un número reducido de empresas, junto con la escasa propensión a exportar de las pequeñas y medianas empresas y el que la competitividad de las exportaciones se base especialmente en precios bajos, son otros indicadores que el diagnóstico en el que se basa el plan considera necesario corregir.

Para hacer frente a estos problemas, el documento, cuya elaboración ha dirigido la Consejería de Economía y Hacienda, plantea diez objetivos estratégicos, entre los que figuran «mejorar la competitividad a través de la innovación y la diferenciación, profundizar en la internacionalización de la economía, reforzar las conexiones exteriores y la conectividad logística competitiva y optimizar los sistemas de agua y energía».

También aparecen entre los objetivos del plan «promover un modelo turístico basado en los atractivos diferenciales del territorio, adaptar el sistema de salud y de cuidado de las personas a las nuevas necesidades, incrementar significativamente las capacidades del sistema de educación y formación, integrar los procesos productivos y de bienestar en los límites bioterritoriales y avanzar en gobernanza pública».

La protección y regeneración ambiental del Mar Menor se ha incluido como un objetivo estratégico con entidad propia dentro del plan.

Cada uno de estos objetivos o ejes estratégicos en que se estructura el plan se componen de una serie de líneas de actuación, dentro de las cuales, a su vez, se concretan las medidas que se llevarán a cabo.

Entre las acciones que recoge el plan figuran el reforzamiento de la red de carreteras, especialmente las autovías de conexión exterior; se vuelve a incluir la terminal portuaria de El Gorguel, que ya aparecía en el anterior plan estratégico, y también se apuesta por el desarrollo de proyectos de hidrógeno verde y por la obtención y uso de biocombustibles de origen regional.

Una de las propuestas en materia turística es reforzar la oferta de interior para favorecer la diversificación de productos y contribuir a la desestacionalización y la desconcentración de la actividad.

Con respecto a la asistencia sanitaria se propone reforzar y mejorar el sistema de atención primaria, impulsar la atención a la salud mental y a las personas mayores y discapacitados.

El que la oferta de formación no responda a las necesidades de la actividad económica regional es una de las preocupaciones del plan, de ahí que proponga mejorar la integración entre la acción formadora universitaria y las demandas de las empresas, e incorporar la Formación Profesional Dual de forma generalizada en el sistema educativo para insertarlo en la estructura productiva.

También se recogen la necesidad de completar la ordenación de espacios naturales y medidas de conservación de la biodiversidad, y, dentro del área de la administración pública, reforzar los servicios esenciales para la tramitación de la autorización de nuevas instalaciones y avanzar en la modernización y simplificación administrativa.

El presupuesto del plan para el periodo 2022 a 2027 asciende a 4.430 millones de euros, de los que 2.144 se prevén gastar en la primera parte de su vigencia, de 2022 a 2024.

En la distribución del gasto por objetivos se favorecen claramente los de carácter social. Así, la mayor cantidad (1.250 millones) se reserva para la mejora del sistema de salud y el cuidado de las personas, seguido del incremento de las capacidades del sistema educativo-formativo, al que se destinan 880 millones de euros. En tercer lugar, el objetivo con más fondos es la mejora de la competitividad a través de la innovación, con 590 millones.

Para el seguimiento y evaluación de la ejecución del plan, este fija una serie de indicadores y objetivos cuantificables, como elevar del 5,9% al 12% el porcentaje de jóvenes de entre 15 y 24 años que cursan FP Dual y subir del 25,8% al 35% las personas de entre 20 y 24 años que cursan estudios superiores.

Otros objetivos son alcanzar para 2027 las 110.000 empresas registradas en la Región, frente a las 95.294 existentes en 2021, según el Directorio Central de Empresas del INE; que el 92% de las empresas tengan conexión a internet y sitio web; lograr 20 conexiones internacionales desde el aeropuerto de la Región (ahora tiene ocho); reutilizar 200 hectómetros de agua al año (unos 110 hm³ en 2022), y conseguir llegar a los 130 megavatios de potencia energética renovable instalada para autoconsumo, el doble de los 65 mw que había instalados en 2021.