Los regantes empiezan a certificar las medidas del acuífero, aunque muchos necesitarán prórrogas
La Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena convoca para esta tarde a los comuneros a una asamblea para informar del proceso
Numerosos propietarios y arrendatarios de explotaciones agrícolas en el Campo de Cartagena, sobre todo pequeños y medianos, piensan solicitar prórrogas a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para certificar que cumplen las medidas cautelares de protección del acuífero que deben evitar la contaminación difusa al Mar Menor. El organismo de cuenca dio un plazo de dos meses para acreditar que cumplen los requisitos, y advirtió de que en caso contrario cortará el suministro de agua para riego, cualquier que sea su procedencia, lo cual incluye las dotaciones del Trasvase Tajo-Segura.
La inquietud está calando en este colectivo, de tal forma que este miércoles por la tendrá lugar una asamblea informativa convocada por la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena, para explicar con detalle los requisitos que exige la CHS y cómo acreditar el cumplimiento de las medidas. «Hay muchos comuneros que tienen dudas y no paran de preguntar; nuestro objetivo es informar del proceso», señala el presidente de la entidad, Manuel Martínez.
Ha hecho un llamamiento para que acuda el mayor número de comuneros y regantes, a las 20 horas en los Salones Aquario (Carretera Los Alcázares-Torre-Pacheco). Los afectados, más de 3.000 titulares y arrendatarios, tienen de plazo hasta agosto para presentar la acreditación, aunque Martínez indica que se solicitarán prórrogas para disponer de más tiempo con el que poder reunir toda la documentación. Estas prórrogas tendrán carácter individual, según el organismo de cuenca.
Martínez indica que hasta ahorra se ha presentado una treintena de certificaciones, que recibe la Comunidad de Regantes y las traslada a la CHS.
Nota aclaratoria de la CHS
El pasado 23 de junio, la CHS envió un documento aclaratorio a la Comunidad de Regantes, indicando que no existen excepciones para cumplir la orden de protección del acuífero, por lo que es obligatoria para todas las explotaciones agrícolas, sin que haya una superficie mínima exenta. Las medidas impuestas por la Confederación son similares a las que contiene la ley de Protección del Mar Menor en cuanto a la limitación del uso de fertilizantes y la prohibición de que los cultivos afecten al acuífero, principalmente.
La CHS envió la nota aclaratoria a raíz de las consultas de los afectados, que tienen dos meses de plazo para presentar los certificados, aunque existe posibilidad de prórroga. Si no lo acreditan, se les cortará el agua. En el caso de las parcelas arrendadas, tanto el arrendatario como el titular deberán ser los encargados de presentar el informe visado, firmado por ambas partes. En cuanto a las sondas multiparamétricas (miden la humedad y otros factores del suelo), su implantación es obligatoria para todas las parcelas con una superficie mayor de 10 hectáreas y para todas las situadas en la Zona 0, aún siendo inferiores. El objetivo es garantizar que a esa profundidad no percola agua al acuífero, indica la CHS.
Manuel Martínez, por otra parte, señala que están utilizando de nuevo los caudales que bombea la CHS desde la rambla del Albujón, que se diluyen en los canales de riego del Postrasvase. Los regantes pagan un canon por estos recursos. El organismo de cuenca reactivó la impulsión del pasado viernes.
