Maristas se queja al Defensor del Pueblo de que «las lagunas legales» permitieron a un condenado por abusos dar clases en Murcia

Maristas elevó la semana pasada una queja al Defensor del Pueblo por «la desprotección en que han podido quedar sus alumnos al tener como profesor a una persona condenada por abusos». El pasado abril, el Tribunal Supremo confirmó la condena de 10 años de cárcel para un profesor de un colegio religioso de Valencia. Padres del colegio Maristas de Murcia denunciaron que el docente dio clase allí hasta 2020 y se preguntan cómo se le contrató si tenía pendiente la sentencia por esas razones.

«Ningún juzgado comunicó la condena del docente ni al Instituto Marista ni a la Consejería de Educación de la Región de Murcia; al docente tampoco se aplicaron medidas cautelares a pesar de la gravedad de los hechos por los que fue condenado; y el Certificado del Registro Central de Delincuentes Sexuales aportado por el docente no contemplaba el hecho de estar inmerso en procedimiento judicial por delitos de naturaleza sexual contra menores», sostuvo la Provincia Marista Mediterránea en un comunicado.

El centro considera que estos hechos «ponen de manifiesto algunas lagunas legales en las leyes de protección jurídica de los menores (2015) y de protección integral de la infancia (2021), y por las que cabe preguntarse si ha primado el interés superior del menor sobre los derechos del condenado».

Según la institución docente, el escrito al Defensor del Pueblo incluye algunas sugerencias para las citadas leyes, «con objeto de evitar en un futuro situaciones análogas a las vividas en Maristas de Murcia, y seguir trabajando por la creación de ambientes seguros a todos los niveles». «Nuestro compromiso de mejora en la protección infantil ha sido reconocido por la entidad internacional 'Keeping Children Safe' con la certificación Nivel 1 (mayo 2021)», concluye Maristas.

• Temas
• Murcia
• Defensor del Pueblo