El curso arranca en la Región de Murcia entre protestas por la falta de transporte escolar para miles de alumnos
El primer día de clase fue una carrera de obstáculos para las familias que tuvieron que llevar a sus hijos en sus coches
La vuelta al cole ha sido una complicada carrera de obstáculos para miles de familias que dependen del servicio de transporte escolar para llevar a sus hijos al colegio, y que tuvieron que improvisar a última hora fórmulas alternativas o, directamente, no llevar a los niños a su primer día del curso. Apenas unas horas antes de que comenzaran las clases, durante la tarde del jueves, miles de familias tuvieron conocimiento de la suspensión de las rutas escolares que utilizan 7.500 alumnos de la Región, la mitad de ellos de Primaria, porque la Consejería de Educación no ha logrado adjudicar el servicio, que las empresas no quieren asumir porque, aseguran, no solo no les es rentable, si no que pierden dinero.
Al margen del conflicto, la realidad es que miles de padres se encontraron ayer con que no disponían de transporte para llevar a los niños al cole. Algunos optaron por pedir permiso en sus trabajos para acercarlos ellos mismos, y otros no pudieron encajar el contratiempo y no les llevaron. «A falta de doce horas de que los niños empezaran el colegios nos mandaron un mensaje para decirnos que no hay transporte. Yo no he llevado a mi hijo, pero el lunes tendré el problema», denunciaba una madre de El Garbanzal, en La Unión. «No es aceptable la falta de consideración a las familias a las que se les avisa con menos de 24 horas de antelación, no dejando lugar alguno para la conciliación pues, quien no tenga posibilidad de organizar o hacerse cargo de la situación con tanta premura ¿qué hace? ¿no va al trabajo?», denunció la presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos, Marisa Maldonado, quien lamentó, con los sindicatos de enseñanza, otras carencias que encontraron en el primer día de clase, como el retraso en algunas obras de aulas de 2 años y en la adjudicación de bajas de maestros, según sus fuentes.
La Consejería de Educación no ha conseguido adjudicar el servicio para 7.500 estudiantes
Las calles de la Región recuperaron a primera hora de la mañana la rutina escolar con el trajín ilusionante de miles de niños, unos 150.000, que se reencontraron con la cotidianidad de las aulas de Infantil y Primaria, los compañeros, sus maestros y un año académico por estrenar.
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Los alumnos murcianos, a quienes se sumarán la próxima semana los estudiantes de ESO y Bachillerato, encaran un curso en el que la reforma educativa de la Lomloe ya se aplica en todos los niveles educativos, y en el que la caída de la natalidad y los nuevos programas para atajar el fracaso educativo, junto con la entrada de los menores de 2 años por primera vez a los colegios, son algunas de las novedades más destacadas.
Mientras la Consejería de Educación ponía ayer en valor las mejoras de este curso, sindicatos y padres cargaban contra las carencias. «Este curso, por primera vez, se ha reducido la ratio de alumnos por aula en segundo ciclo de educación Infantil (3 años), al pasar de 25 a 22 alumnos. Otra de las novedades es la gratuidad de los libros de texto para el alumnado de centros sostenidos con fondos públicos desde tercero de Primaria hasta cuarto de la ESO», reivindica Educación.
Sindicatos y padres denunciaron los retrasos en las obras de adaptación de siete aulas de 2 años
Los sindicatos y los partidos de la oposición, Podemos y PSOE, pusieron el foco en las carencias. Entre ellas, los retrasos en las obras de adaptación de siete de las 66 aulas para niños de 2 años en colegios públicos, como el Reino de Murcia y Santa María de Gracia, los de Murcia. «Empezamos con menús escolares más caros pero con las becas de comedor congeladas y con obras sin terminar en las nuevas aulas de infantil de 2 a 3 años», denunciaron desde Podemos. En CC OO lamentaron la «deficiente e improvisada puesta en marcha de las aulas de 2 años. Resulta inconcebible que lleven dos años preparando la implantación de este nivel y que en muchos centros las obras no hayan finalizado y en otros falte el mobiliario o no esté aún montado». La Consejería de Educación explicó que los retrasos en las obras de siete centros se han solventado adaptando otros espacios del colegio; o postergando la incorporación de los niños «al lunes 11 y al miércoles día 13».
Desde Anpe insistieron en las carencias de climatización de las aulas, y reclamaron la implantación de más unidades de 2 años en los colegios públicos. En cambio, valoraron de forma muy positiva la realización de dos actos de adjudicación semanales para cubrir las vacantes docentes, que ha permitido que este curso hayan faltado menos maestros a las aulas en el primer día de clase. Según los datos de Educación, solo «en los casos de bajas que se han presentado estos días de inicio de curso, dado se han conocido después de convocar el último acto de adjudicación, que se están tramitando para cubrirlas en el próximo acto de adjudicación; para cubrir los puestos más urgentes, se realizarán llamadas telefónicas».
Pocas lágrimas y toda la atención en la adaptación de los de 2 años
Con horas de vuelo en la guardería, a Carla, uno de los 2.500 menores de 2 años que ayer entrenaron plaza en los colegios, no le asomó ni media lágrima en la despedida de su primer día de clase. La atención de una decena de cámaras de televisión, fotógrafos, periodistas, y directivos de la Consejería de Educación tampoco perturbó a la niña, sonriente y encantada en el aula recién inaugurada y repleta de cuentos, juegos adaptados y vistas al patio. Atenta al jaleo, la niña de 2 años se entretenía ordenando sobre la mesa sus galletas de dinosaurio del almuerzo, y respondiendo resuelta con lengua de trapo las preguntas de tanto extraño.
La pequeña tuvo ayer sus primeras horas de adaptación en el colegio Juan XXIII, que ha organizado turnos con solo dos niños cada dos horas durante las primeras jornadas. Toda la atención de las dos técnicos de Educación que la atenderán durante el curso junto a sus 19 compañeros era ayer para ella.
Con Carla se incorporan por primera vez en la Región a los colegios de Primaria 2.500 niños de 2 años en una experiencia piloto para facilitar la conciliación de las familias y, a la vez, aprovechar el 'hueco' que deja la caída de la natalidad. Una fórmula que convence a la Consejería de Educación, que centrará los recursos futuros destinados a la educación de 2 años en los colegios. El proyecto arrancó ayer con 1.300 plazas en 66 colegios públicos y otras 1.160 en 58 concertados, y los planes de la Consejería pasan por incrementar la oferta el próximo curso, como mínimo, con mil puestos más.
El formato gusta también a padres y sindicatos de enseñanza -no tanto a las guarderías privadas, que pierden alumnos-, que no están tan conformes en cambio con el reparto de recursos con los colegios concertados, ya que, consideran, deberían centrarse solo en la red pública de centros.
Sin servicio tampoco para decenas de chicos de la ESO el lunes
La negativa de varias empresas de transporte escolar a aceptar los precios fijados en el último acuerdo marco que regula los contratos ha impedido cubrir rutas escolares que utilizan casi la mitad de los estudiantes murcianos. El conflicto, que Educación quiere resolver contrarreloj, complicará también la vuelta a las aulas en los institutos. De hecho, decenas de centros de ESO empezaron a recibir el viernes el comunicado avisando de la falta de transporte. También muchos de Primaria recibían la confirmación de que el lunes tampoco tendrán bus. «En este momento ya se han adjudicado más del 62% de las rutas escolares», aseguran desde Educación, que tratan de buscar soluciones al problema, que afecta a casi 8.000 estudiantes murcianos. Desde las patronales Froet y Direbús insisten en que no pueden asumir un servicio que les hace perder dinero. «En abril ya se advirtió a la Consejería de que el 40% de las rutas podrían quedar desiertas por no ser rentables; cuanto más trabajamos más perdemos», denunció Direbús.
