La crisis de suministros amenaza con dejar los pubs sin bebidas extranjeras
Los empresarios admiten que ya no reciben ciertas marcas de ginebra, champán, vodka y whisky por el 'Brexit' y la subida generalizada de precios
Pubs y discotecas de la Región comenzaban a ver la luz al final del túnel debido a la progresiva eliminación de las restricciones marcadas por la crisis sanitaria. Pero poco ha durado la alegría. Los propietarios de estos negocios, principalmente los de ocio nocturno, se encuentran ahora con otra amenaza: la crisis de suministros que existe a escala internacional.
El problema que se encuentran es que cada vez es más complicado importar bebidas alcohólicas de procedencia extranjera, como determinadas marcas de ginebra, vodka o 'whisky'. «Hoy en día tienes muy complicado tomarte un 'gin tonic' de Seagram o de Beefeater. Si te sirven, es que es de estocaje. No llegan botellas», declara el presidente de la Federación de Hostelería y Turismo de la Región de Murcia (Hoytu), Jesús Jiménez.
«Y no solo ocurre con Reino Unido, sino con otros productos procedentes de Francia, como el vodka Absolut, que ha reducido drásticamente sus pedidos. Por eso, no todo es imputable al 'Brexit'», añade Jiménez, que culpa a «la escalada de precios generalizada» en todo el continente.
Regalos de Navidad
La federación confía en que el problema no vaya a más, sobre todo porque se acercan las fiestas navideñas, donde no solo se produce un mayor consumo de este tipo de bebidas, sino que suelen servir como regalo. Sobre todo el champán de procedencia extranjera, «como el Moët, que prácticamente está desapareciendo del mercado en las últimas semanas», insiste Jiménez.
Comparte la visión del responsable de Hoytu el presidente de la Asociación de Discotecas, Pedro Alarcón. Afirma que en las últimas fechas se ha incrementado el consumo de marcas españolas como Larios. Mientras tanto, aconseja a los empresarios de su sector que vayan realizando acopio de provisiones «por lo que pueda pasar este invierno».
Sobrecostes
El problema no solo afecta a la materia prima en sí, sino a toda la cadena logística. Y es que, como consecuencia del elevado precio de la electricidad, se han disparado la práctica totalidad de productos. Eso es lo que preocupa a la Denominación de Origen Vinos de Jumilla. «Los costes de muchas cosas están subiendo. Una simple caja de cartón es carísima. Los contenedores de los barcos cuestan cantidades desorbitadas y esto afecta al funcionamiento normal», afirma el presidente del Consejo Regulador, Silvano García. El sector vinícola sufrió hace un mes y medio episodios puntuales de ruptura de la cadena logística, con las botellas y las cajas, pero actualmente la situación es normal.
Este corte de suministros no afecta, por ahora, al sector agroalimentario. Eso sí, cada vez tienen mayores costes de producción debido a la subida del precio de todo. No obstante, el director general de Proexport, Fernando Gómez, asegura que el sector «cruza los dedos» y recomienda el aprovisionamiento.