López Miras se la juega en Madrid ante la posible caída de García Egea
Si Casado decide prescindir de su secretario general para restaurar la paz interna en el PP, el presidente regional quedaría muy expuesto al perder a su principal apoyo en la dirección nacional
La dirección regional del PP sigue con asombro y consternación la evolución de la guerra civil desatada entre el presidente nacional, Pablo Casado, y la ... presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, e insiste en mantener la posición oficial de que este enfrentamiento no tendrá repercusiones en la Región. Sin embargo, la situación es muy delicada en la sede de González Adalid -mucho más de lo que la mayoría admite en privado-, hasta el punto de que el PP de la Región de Murcia es la organizacion autonómica que más puede perder en este conflicto.
Visto con perspectiva, tiene hasta cierta lógica, porque lo que hoy monopoliza las portadas de todos los medios de comunicación tiene su origen en la fallida moción de censura que PSOE y Cs presentaron contra López Miras en la Región. El efecto dominó que aquella maniobra política desencadenó, con el adelanto electoral en la Comunidad de Madrid y el triunfo arrollador de Díaz Ayuso, entre otros, podría terminar ahora, casi un año después, por generar graves problemas al partido que originó esta cadena de acontecimientos.
Las consecuencias en la Región para los populares serían mayores porque es donde más terreno les puede comer Vox
Una sólida relación
Fuentes del partido aseguran que la relación de confianza entre Casado y García Egea no se ha agrietado lo más mínimo en los últimos días, pero es tal la cantidad y densidad de ataques que está sufriendo el ciezano que no sería de extrañar que el presidente deba prescindir de su secretario general para restaurar la paz interna, aunque solo sea temporalmente.
La dimisión de García Egea como 'número dos' del PP sería mala para la Región, que no anda sobrada de políticos en puestos de tan alta responsabilidad. Y nefasto para López Miras. Si Pedro Antonio Sánchez le hizo presidente de la Comunidad en 2017, a García Egea le debe en buena parte su posterior elección como presidente del PP regional y su continuidad al frente del Gobierno regional, a pesar de haber perdido las elecciones autonómicas de 2019.
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Sin el sólido apoyo de García Egea desde Génova, López Miras quedaría muy expuesto ante otro batacazo electoral o ante una contestación interna organizada. Desde el aparato popular se le resta importancia a la que denominan con displicencia 'vieja guardia', de la que aseguran que no tiene influencia más allá de Archena, pero las consecuencias de los cambios traumáticos que parecen avecinarse pueden ser imprevisibles.
Algunos de los integrantes de esta 'vieja guardia' conservan, además, cierto ascendiente sobre una militancia que echa de menos los años de gloria y mayorías absolutas.
El factor diferencial
En la Región de Murcia hay, además, un elemento diferencial que puede amplificar los daños sufridos por el PP: la pujanza de Vox. El partido de Santiago Abascal ya fue el más votado en la Región en las elecciones generales de 2019 y sería el principal beneficiario por la pérdida de votos que la actual crisis ocasionaría en el PP murciano. No es extraño, por tanto, que López Miras se haya significado como el único barón popular que ha defendido expresamente a García Egea frente a la avalancha de peticiones a Pablo Casado para que prescinda de su mano derecha.
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