Las arcas municipales de Murcia engordan casi 4 millones con las inspecciones tributarias de 2021

Los Impuestos de Actividades Económicas (IAE) y de Bienes Inmuebles (IBI) acaparan las sanciones impuestas a consecuencia de las inspecciones, que en total ascendieron a 772.984 euros. Estas sanciones suponen siete veces más que las de 2020 (ejercicio en el que se recaudaron 109.705 euros por este mismo concepto).

«El objetivo es claro: evitar la competencia desleal y la distorsión en el mercado, que supone que unos ciudadanos y empresas paguen sus impuestos y otros no», destacó el concejal de Gestión Económica, Enrique Lorca, quien recordó que estos ingresos «se utilizan en prestar más y mejores servicios públicos al conjunto de los ciudadanos».

La actuación inspectora se ha centrado en los sectores industriales, en empresas con una alta cifra de negocio; y, en materia catastral, en todo el término municipal de Murcia.

En los últimos siete años (desde 2015 a 2021), la Inspección de Tributos ha obtenido unos ingresos de 22,5 millones de euros por cuotas descubiertas (liquidaciones practicadas como consecuencia de la comprobación e investigación) en el municipio. Actuación que también ha repercutido en las altas en los padrones, incrementando la recaudación en 14 millones de euros.

«Estos datos cobran especial relevancia si tenemos en cuenta que, desde 2017 y por diversas causas, los principales impuestos municipales han venido sufriendo un notable descenso», apuntó Lorca. Entre los motivos, figuran sentencias como las de las plusvalías o los cambios de la clasificación de suelo urbano a rústico en varias zonas del municipio. En este último caso, se excluyó del suelo urbano a efectos catastrales aquellos sectores de suelo urbanizable sectorizado que no contaban con plan parcial aprobado definitivamente y vigente, con lo que no tenían que pagar el IBI.

También se ha visto mermada la recaudación tributaria desde hace cinco años por la exención de la tasa de tramitación administrativa de la licencia de actividades y, desde que comenzó la pandemia, por el impago de las tasas de ocupación de la vía pública de las terrazas.

En 2021, el Ayuntamiento recaudó un total de 187,3 millones de euros en impuestos directos, cantidad que alcanzó los 185 millones en el año previo a la pandemia (2019). En 2020, la cifra se situó en 183,6 millones de euros.

En concepto de tasas, el año pasado los ingresos alcanzaron el mismo nivel que en el año anterior a la Covid y se recaudaron 41,8 millones de euros, una cantidad superior en dos millones a la ingresada en 2020 (la cifra se situó en los 39,7 millones de euros), según consta en las respectivas memorias de la Agencia Municipal Tributaria.

Desde el Ayuntamiento destacan que, en general y teniendo en cuenta todos los ingresos que gestiona esta Agencia, el año fiscal cerró en 2021 con un incremento de 9,4 millones de euros en la recaudación, respecto a 2020. Y ello «a pesar de que se congelaron todos los tributos y precios públicos y no se actualizó el IPC». Un ejemplo del impacto de estas medidas es la exención del pago por las terrazas, que supone una merma en los ingresos de 1,2 millones de euros al año.

Pese a todo, se incrementó la recaudación en más de 5 millones por el IBI urbano, 1,3 millones en el IAE y 852.000 euros en las tasas de la basura. A pesar del temor de un descenso acusado de los ingresos por las plusvalías (a raíz de la sentencia del Tribunal Constitucional que anulaba la fórmula para su cálculo), Murcia cerró 2021 con un incremento de recaudación superior al medio millón de euros, según datos de la Agencia.