Arranca de forma gradual el bombeo del Albujón para cortar los vertidos a la laguna
La CHS activa las instalaciones en fase de pruebas, y los regantes ya reciben esos caudales para rebajar la carga de nitratos
Después de una larga tramitación ha dado comienzo el bombeo gradual de las aguas de drenaje de la rambla del Albujón, para impedir que sigan vertiendo en el Mar Menor. La impulsión se inició el jueves, según informó el presidente de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena, Manuel Martínez, y los caudales están llegando a los canales de riego para su uso provisional, mezclados con aguas del Trasvase y de la desalación.
La operación está a cargo de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), para evitar la entrada de más de cinco millones de metros cúbicos de agua anuales de la rambla en la albufera. El organismo de cuenca informó de que las instalaciones están activadas en fase de pruebas. La CHS informó a la Consejería de Medio Ambiente, y explicó que la puesta en marcha será «gradual», funcionando unas horas al día hasta comprobar «que todo va correctamente». «Algún día estará parada, si se produce alguna rotura en las conducciones». Precisó que hubo algún problema y que toda la obra, tal y como se definió, no estará finalizada hasta dentro de 15 días. «Este inicio es un granito de arena para solucionar los vertidos de nutrientes por la rambla del Albujón al Mar Menor, una buena noticia», señaló un portavoz.
Reproches de la Consejería
La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente celebró que el Ministerio «haya activado de una vez el bombeo de la rambla del Albujón. Hace casi un año que lo pararon y desde entonces se llevaba exigiendo de forma continua su puesta en marcha». Considera que se trata de una infraestructura fundamental para impedir la entrada de agua dulce y nitratos al Mar Menor. «La relación causa-efecto entre la parada del bombeo en 2019 y el empeoramiento de los parámetros ha sido evidente y contrastable. Un año parado ha supuesto una bomba para el Mar Menor».
El departamento de Antonio Luengo señaló que el «Gobierno regional nunca se ha opuesto al bombeo. No se trata de confrontación ni enfrentamientos, se trata de colaboración y trabajo común. Eso es lo que defendemos, pero con todas las partes implicadas y actuando donde les compete. La CHS ha puesto numerosas excusas durante este casi año de parón y su presidente ha hablado de roturas, arreglos o situaciones que para nada han tenido que ver con el aliviadero.