La madrugada en que las orcas atacaron en Cabo de Palos
Los incidentes de estos cetáceos con barcos no solo se han producido en el Estrecho de Gibraltar y Galicia: el patrón de un velero que tuvo que ser remolcado hasta Cartagena asegura que le embistieron hasta romperle el timón
El 'Sula', un velero de catorce metros de eslora, navegaba en la madrugada del miércoles 20 de octubre de 2021 a 13 millas al sureste de Cabo de Palos cuando un golpe en el casco puso en alerta a su patrón, que cubría el trayecto entre Formentera y Benalmádena en compañía de su pareja. Cuando recibieron esta embestida que les sacó de rumbo, a las 2.30, se desplazaban a vela, con el piloto automático y a una velocidad de siete nudos.
¿Qué estaba ocurriendo? El barco comenzó a temblar y se escuchaban resoplidos, así que el patrón enfocó la linterna al mar por estribor en busca de una explicación. Lo que vio fueron dos orcas –aunque la sonda marcó hasta cuatro cuerpos más debajo del barco y alrededor– que aparentemente reproducían el extraño comportamiento de estos cetáceos desde 2020 en aguas del Estrecho de Gibraltar y Galicia, donde persiguen embarcaciones, preferentemente de vela, incluso hasta echarlas a pique. El último caso, el mes pasado, terminó con el hundimiento del 'Alborán Champagne' en Barbate (Cádiz).
Mientras los tripulantes del 'Sula' recogían velas, encendían el motor y trataban de gobernar la embarcación, el velero quedó a la deriva por la rotura de la pala del timón después de 45 minutos de asedio. Este es el relato que consta en el parte de trabajo de ese día en Salvamento Marítimo de Cartagena, que acudió al rescate con su embarcación 'Salvamar Mimosa' tras recibir por radio una llamada de auxilio.
Varias orcas golpearon el casco del 'Sula' hasta dejarlo ingobernable, dijeron sus tripulantes a Salvamento Marítimo
El director de la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE), Pedro García, que habló con el patrón del 'Sula' tras conocer este incidente, más raro si cabe por haberse producido lejos del Estrecho, aporta más información: «Había pasado la pandemia con el barco en Nueva Zelanda. Me dijo que allí había tenido la suerte de navegar con orcas y que no podía esperarse que precisamente también unas orcas le diesen un susto así en el Mediterráneo», recuerda el dirigente ecologista, con gran experiencia en el seguimiento científico de cetáceos desde el velero 'Else' en las costas de la Región de Murcia, Alicante y Andalucía. «Él no tenía ninguna duda, asegura que las vio claramente», añade Pedro García, consultado por LA VERDAD.
Avistamiento en Escombreras
Antes de que comenzasen los ataques a barcos, las orcas ya habían visitado Cartagena: una familia formada por cuatro ejemplares –un macho y una hembra adulta, una cría y un inmaduro– fue avistada y grabada durante dos días en noviembre de 2019 frente a la dársena de Escombreras desde una zódiac del Centro de Buceo de la Armada (CBA) y una embarcación de la Autoridad Portuaria. Un avistamiento «excepcional», en opinión de Pedro García, que supuso la primera cita de esta especie en aguas de la Región.
El director de ANSE destaca el gran interés científico de las orcas del Estrecho de Gibraltar, unos cincuenta ejemplares divididos en cinco grupos –según el censo más reciente–, asentados durante el verano en la costa de Cádiz para aprovechar la entrada y la salida de atunes rojos entre el Atlántico y el Mediterráneo. En invierno se desplazan al litoral de Galicia.
Las orcas ('Orcinus orca'), grandes depredadoras, pueden medir hasta nueve metros y pesar cinco toneladas.
No hay consenso entre los investigadores sobre los motivos de los ataques: en un principio se estudió como un entrenamiento para la caza de atunes y ahora se especula con que podría tratarse de la respuesta defensiva a un incidente traumático entre un barco y una orca. Pedro García alerta sobre el «peligro» para esta especie en situación vulnerable de un comportamiento «que, como ocurre en los cetáceos, se transmite a los individuos jóvenes».
Solo en lo que va de año se han producido 53 interacciones con orcas en el Estrecho, la mayor parte de ellas atribuidas a un grupo liderado por la hembra conocida como 'Gladis'.
Control por satélite de seis ejemplares
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) está impulsando el marcaje satelital de seis ejemplares de orca, en colaboración con Circe –Conservación, Información y Estudio sobre Cetáceos–. Ya se ha marcado un ejemplar, identificado previamente como uno de los que interactúan con las embarcaciones. Los datos que proporcione la marca satelital permitirán, durante el periodo en que esté operativo el dispositivo, identificar su localización en las últimas horas y elaborar un mapa semanal de la zona en la que se mueven en ese periodo. Esta información se difundirá para conocimiento de los navegantes.