Joaquín Buendía barre en Alcantarilla con una mayoría aplastante del PP

Pasó el día de colegio en colegio, visitando a los presidentes de las mesas electorales y comprobando que no había incidencias reseñables. «Me gusta hacer esto cada día que hay que votar», explicó ayer sonriente el alcalde de Alcantarilla, el popular Joaquín Buendía, que el domingo logró cosechar por segunda vez consecutiva la ansiada mayoría absoluta. El PP pasó de los doce concejales que logró en 2019 a los trece de estos comicios y Vox subió hasta los tres sillones (en 2019 sacó solo dos). Sin embargo, las urnas castigaron al PSOE, que descendió un escaño, quedándose con cinco ediles en la corporación. En la batalla política también pelearon Tercera Edad en Acción, IU-Verdes, Podemos-Alianza Verde y Ciudadanos, pero no consiguieron representación.

«Lo peor del domingo fue la incertidumbre que vivimos hasta que vimos la respuesta de los ciudadanos», relató Buendía. «Cuando salieron los resultados sentimos una alegría tremenda por el respaldo de los vecinos. Además, fue muy bonito porque todas las personas del partido estábamos unidas y lo celebramos por todo lo alto», añadió.

Es la tercera vez que Buendía se enfrenta a una legislatura en el gobierno. Primero lo hizo tras las elecciones de 2015, cuando estuvo dirigiendo el Consistorio en minoría. «Aquellos años fueron muy complicados. Creo que la gente se dio cuenta de que los partidos minoritarios nos chantajeaban y, en 2019, logramos mayoría suficiente para garantizar estabilidad. Pero los dos primeros años nos pilló la pandemia y solo hemos tenido otros dos para poder desarrollar proyectos», puntualiza. Ahora, el regidor afronta una nueva etapa «con serenidad, centrado en los proyectos que vamos a desarrollar y pensando siempre en los ciudadanos que nos han dado su voto en las urnas. Por ello, vamos a trabajar con ilusión, con el objetivo de devolver a todos los vecinos esa confianza que han vuelto a depositar en nosotros».

El equipo de Joaquín Buendía tiene varios retos encima de la mesa para los próximos cuatro años. El primero de ellos, que ya estaba en el programa electoral de los populares en 2019, es la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana, que se encuentra en fase de tramitación por parte de la Comunidad Autónoma. Esa norma será clave para el desarrollo urbanístico e industrial del municipio.

Una de las problemáticas que tendrá que intentar solucionar el alcalde y su equipo atañe al ferrocarril. Aunque el actual gobierno del PP llegó a un acuerdo con Adif para soterrar un kilómetro del paso del AVE y eliminar la barrera que este suponía en superficie, la vía con Madrid continúa ahí y el municipio queda dividido con el paso de Entrevías.

Su programa electoral contempla medidas, por ejemplo, como incrementar la limpieza en las calles para acabar con las zonas más sucias; la instalación de cámaras de videovigilancia en la vía pública para aumentar la seguridad y un plan que acabe con la ocupación ilegal de viviendas. El regidor también apuesta por la renovación de plazas y jardines y por la creación de un gran centro donde los jóvenes tengan una sede con actividades y espacios para ellos en el jardín de La Aviación, así como un nuevo auditorio y centro de congresos municipal. El regidor popular también contempla actuaciones para mejorar los espacios deportivos del municipio y prevé levantar «un gran pabellón» para competiciones profesionales, «dado el auge de deportistas locales».

El Partido Popular de Alcantarilla llegará a la alcaldía con caras nuevas en su candidatura. Destaca la incorporación, como número 13 de la lista, del veterano Pedro Hernández Caballero, de 97 años. Este alcantarillero ostentará alguna concejalía, según informaron fuentes municipales. «Tengo 97 años y Buendía me llamó para que le acompañe estos cuatro años», relata con humor Hernández Caballero. «Y no estoy dispuesto a morirme en tres años, así que espero irme dentro de 50, por lo menos», bromea el concejal popular.

Este dirigente nació en el número 93 de la calle Mayor de Alcantarilla y ha dedicado toda su vida a construir ataúdes. «He pasado mucho. Empecé en el oficio cuando era muy pequeño; me enseñaron, primero, el trabajo de carpintero y, después, monté mi propia empresa», rememora Hernández, que fue impulsor de la junta local de la Asociación Española Contra el Cáncer, de la que llegó a ser presidente y una persona muy activa. «De joven empecé a ayudar a la gente que no tenía medios y me di cuenta de que era algo que me llenaba y me hacía feliz», revela el concejal popular.

Los años pasaron y Pedro se jubiló. El año pasado, la parca se llevó para siempre a su mujer y a su hermana, lo que lo sumió en una enorme tristeza. Sin embargo, la fuerza de sus tres hijos volvió a hacer que este hombre recuperara la ilusión. «Yo nunca he estado en política. Joaquín Buendía me llamó para que le acompañara en este proyecto y no me pareció mala idea. Sinceramente, creo que puedo aportar muy poco. Pero, quizás, ese poco pueda servir de algo para mejorar la vida de los ciudadanos de este municipio», se enorgullece.

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