El técnico de Orihuela debe atacar y respetar la historia donde todos los equipos vascos perdieron en Los Arcos

El Barakaldo juega ascendido (19.30 horas) el domingo en Los Arcos. Asciende en dos partidos sin goles, por ser subcampeón y por estadísticas: 15 goles recibió en 34 partidos, sin los 4 del campeón, el filial del Athletic Club. Su arma ofensiva son los goles de su segunda línea atacante si pisa con ventaja el área. Pero el técnico Sergi Guilló debe atacar y respetar la historia donde todos los equipos vascos perdieron en Los Arcos: (3-1) el Bilbao Athletic de Iñaki Sáez, (1-0) Eibar y (3-1) Sestao River, en 1990-91 en Segunda, con el invencible Orihuela Deportiva siempre a golear, a un puesto y 5 puntos del ascenso a Primera. Brillante historia que debe mantener, con astucia y valentía, el joven entrenador.

Con lleno hasta la bandera, casi como en los mejores tiempos en Segunda -este domingo 5.000 fieles aficionados escorpiones, comandados por el incansable bombo del Frente Eskorpión- las gradas de Los Arcos deben ser caldera que convierta las piernas y el cerebro de los futbolistas sobre el césped en alto horno infernal en ataque que funda la férrea defensa del Barakaldo. Han recibido sólo 19 goles en 36 partidos, sumados los dos de promoción, y sólo perdieron 2 partidos. «El tercer partido lo pierden aquí», ha afirmado Jacinto, de los más fieles escorpiones.

¿El joven técnico del Orihuela CF jugará como siempre a evitar goles y esta vez también a marcar al menos uno o dos goles de ventaja para el partido de vuelta? Dosificar riesgos y beneficios es la clave. Pero mucho más crucial ser atrevido: en la vida y en el fútbol. Sin goles: ascienden los fabriles tras prórroga de 30 minutos en Lasesarre, con fiesta y alirón alegre de más de 8.000 espectadores.

El técnico Sergi Guilló tiene entre sus responsabilidades, emotivas para miles de aficionados, conservar la historia de victorias escorpiones contra todos los equipos vascos que jugaron en Los Arcos. Es más, jamás perdieron en tierras vascas. Fue en Segunda (1990-91), cuando el club presidido por José Esquiva ganó (3-1) al filial del Athletic Club que dirigía Iñaki Sáez, antes de ser el seleccionador de España, con cachorros que luego fueron leones en el primer equipo; (1-0) Eibar y (3-2) Sestao River, para empatar (1-1) en San Mamés, y bajo la lluvia (1-1) en Ipurúa y en Las Llanas. Jamás perdió el fútbol escorpión en Euskadi. Porque jugaba siempre con valentía a marcar goles.

Sergi Guilló, en rueda de prensa, advirtió: «El Barakaldo carga el área rival, en ocasiones, con 4 y 5 atacantes; y es un punto muy a tener en cuenta». ¿Tal vez lo dijo porque planea sorprenderle con un veloz despliegue escorpión en ataque para hacerles goles? Y añadió: «En la vuelta, arrolló al rival. Fueron muy dominantes».

Sergi Guilló acostumbra a poner sobre el campo un sistema ultradefensivo con cuatro zagueros y dos pivotes defensivos. Pero ahora el técnico ilicitano debe asumir, con valentía, que es el máximo responsable de cómo juegue su equipo y con quiénes juegue en el once inicial y los cambios, hasta cinco, durante los partidos. Y tras estudiar al rival es el responsable de acertar, con sus planteamientos tácticos y psicológicos, al sopesar riesgos y beneficios.

El Barakaldo para nada arrolló al At. Paso en Lasesarre, como asegura el técnico Sergi Guilló. Ganó 1-0 con gol en saque de esquina, a tres minutos del descanso, con el cabezazo de un jugador, por veloz anticipación sobre su marcador, como casi siempre marcan los futbolistas del Barakaldo, entrando al remate desde la segunda línea de atacantes.

Sin embargo, el equipo que dirige Imanol de la Sota sufrió cuando los canarios tuvieron, abrumadoramente, la posesión del balón en los veinte últimos minutos. El técnico canario, como suele suceder a muchos, tal vez confió en exceso en el (0-0) de la ida, si bien tuvo una ocasión con tiro que el veterano portero Jon Tena evitó el (0-1). Pero tal vez por arriesgar en ataque demasiado tarde, ya perdiendo, a su equipo lo eliminó el Barakaldo.

De La Cuevas -indiscutible mejor atacante en el final de liga; marcó 2 goles al San Roque, y en estado de forma sobresaliente- juega ahora los 'minutos de la basura' por decisión de Sergi Guilló que prefiere futbolistas más defensivos. El técnico lo sacó en el minuto 94 en Badalona. Por si se le olvidó: De las Cuevas fue titular y goleador en un ascenso del Osasuna a Primera, y también en ascensos a Segunda de Hércules y Córdoba. ¿Se está desaprovechando su calidad y experiencia?

Ni tampoco sacó el técnico del banquillo al goleador Florián -veterano con experiencia profesional en Francia, Bélgica y Grecia-. ¿Ha olvidado Sergi Guilló el golazo de la victoria 2-1 con el Águilas en Los Arcos tras ir perdiendo 0-1? Los aficionados sí lo recuerdan.

Es más, Sergi Guilló renunció a la velocidad de Sebas, ex internacional con Venezuela, pese a su golazo al contraataque en el último partido en Los Arcos. ¿Olvidó que su gol y los dos de De Las Cuevas valieron el cuarto puesto gracias también -fue una carambola de suerte- al gol del Estepona en Sevilla? Pero aficionados sí echan de menos la velocidad del venezolano -sin convocar en la promoción- y la agresividad en ataque de Goyo por la banda izquierda donde se carece de extremo veloz. Pero el técnico está en su derecho de preferir futbolistas más defensivos.

Recordar que el pasado mes de enero, sin titubeos, el presidente, Eloy Moreno, reforzó la plantilla con siete futbolistas que llegaron en enero para luchar por el ascenso a Primera Federación: Espejo (cedido por el At. Madrid), Goyo (Villarreal y Selección Sub17), Alui (Selección de Sierra Leona), Kamal (Real Madrid), Hamza (cedido por el Nastic), Sebas (Selección U16 Venezuela) y Florián (ex profesional en Francia, Bélgica y Grecia).

«¿Vamos a Los Arcos sólo a pagar la entrada?», preguntaba un aficionado a otro. «A ver al Orihuela sólo defender todo el partido con 6 y 7 futbolistas, sin acercarse a la portería contraria para marcar goles. ¡Qué sólo tiramos en el gol de Kamal contra el Badalona!». Y otro apuntaba: «El presidente fichó futbolistas en enero para marcar goles pero algunos como De Las Cuevas, Florián, Sebas y Goyo, apenas juegan. El técnico prefiere futbolistas más defensivos». Y es comprensible esta decepción porque la mayoría de aficionados disfrutó de muchas promociones y ascensos con equipos escorpiones que jugaban siempre a marcar y a ganar.

Sirva de ejemplo el Orihuela Deportiva, presidido por José Esquiva, con Vicente Carlos Campillo (ascenso con el Real Murcia a Primera) y Tomeu Llompart (técnico del Mallorca) ambos como entrenadores, plantilla que logró un brillante ascenso a Segunda en la temporada 1989-90, jugando siempre a marcar goles. En la alineación de la fotografía del inolvidable reportero de LA VERDAD, Tony Sevilla (RIP): (De pie izq. a dcha), Casuco, J. Ramón (p), Gambín, Maqueda, Sigüenza y Ricardo; en cuclillas, Verza con Verza Junior (ex profesional de Primera con Villarreal, Almería y Levante), López Recarte, Sagarduy y Cazaurang.

Sin olvidar al Orihuela Deportiva, brillante espectáculo goleador en la temporada 1990-91 en Segunda, a un puesto y sólo 5 puntos del ascenso a Primera con los entrenadores Nando Yosu y Tomeu Llompart. O el Orihuela Deportiva, con el entrenador Enrique Mateos (extremo goleador con cinco Copas de Europa de 1956 a 1960 en el Real Madrid de Di Stéfano), en la temporada 1984-85 a un puesto del ascenso a Segunda División que lograron el Sestao River, Deportivo Aragón filial del Real Zaragoza, Rayo Vallecano y Albacete. O la promoción de ascenso de Asier Garitano (hoy técnico del Tenerife en Segunda).

Importante es recordar hoy dos cuestiones cruciales a Sergi Guilló. Primero: si la eliminatoria terminase sin goles o con empate en el partido de vuelta en Lasesarre, asciende el Barakaldo tras la prórroga de 30 minutos es quien asciende, sin lanzamientos desde el punto de penalti, por mejor clasificación que el Orihuela CF. Fue el subcampeón del grupo 2 de Segunda RFEF, mientras que los escorpiones fueron cuartos clasificados del grupo 4.

En segundo lugar, el joven técnico del Orihuela debe tener muy en cuenta otra situación deportiva que puede resultar definitiva para conseguir el ascenso a Primera Federación: el valor de los goles. Porque es idéntico el valor del gol en campo propio como en el feudo del rival. Por lo tanto, que marque el Barakaldo en Los Arcos nada importante es, siempre que el Orihuela consiga al menos una renta de dos goles de ventaja para el transcendental choque de vuelta en Lasesarre.

El entrenador Sergi Guilló debe reflexionar y tener en cuenta que, frente a la debilidad el Badalona, -ni una sola vez tiro con peligro a la portería del Orihuela en dos partidos- contra el Barakaldo es crucial una renta de al menos dos goles en Los Arcos; todo ello sin importar si marca el rival porque los goles valen igual en campo propio que fuera de casa. El objetivo debe ser viajar con garantías y probabilidades reales de rubricar el ascenso en Lasesarre ante más de 8.000 espectadores apoyando al equipo gualdinegro.

Sin entrar en excesivos detalles del Barakaldo, su entrenador, Imanol de la Sota, fue entrenador del Juvenil A de División de Honor del Athletic Club y en competiciones europeas U19. También del Basconia y del filial del Athletic Club en Primera Federación. La temporada pasada logró el ascenso con el Barakaldo para que recuperase la Segunda Federación. Igual que hizo la temporada pasada Óscar Sánchez con el Orihuela.

El exentrenador Antonio Pedreño, hoy consejero del Real Murcia, en compañía de Lico, Julián Rubio y el internacional Marcial (Elche CF, Español, FC Barcelona y At. Madrid), tres futbolistas con indudable liderazgo y gen ganador en el mejor Elche en Primera, comentaba a este periódico: «El domingo no me pierdo el partido en Los Arcos como ante el Badalona. El Orihuela no puede cometer ni un error ante el Barakaldo. Pero es necesario el riesgo porque sin goles ascienden ellos. No hay que recibir goles. Lo más importante es llevar por lo menos un gol de renta a Lasesarre».

Del actual Barakaldo destaca que, en sus 34 partidos, de la competición liguera en el grupo 2 de Segunda Federación, tan sólo perdió 2 (2-1 y 1-2 con el campeón y filial del Athletic Club), empató 10 y sumó 22 victorias. Marcó 61 goles (por 39 el Orihuela en el grupo 4) y recibió tan sólo 19 gracias a su férrea defensa y la veteranía del guardameta Jon Tena (por 37 que el portero Aitor Arias salvó a los escorpiones al menos de 6 derrotas).

Por su parte, José Antonio Rodríguez Girona 'Machuca', entrenador con más partidos en el banquillo escorpión, y cuatro promociones de ascenso a Segunda B con el actual Orihuela CF, ha estudiado al Barakaldo: «Es un equipo complicado como lo son los buenos equipos vizcaínos. Fuertes atrás y con guardameta veterano. Me llama la atención que todos sus futbolistas han marcado gol, menos el lateral Beñat de Jesús y el central Sagastibeltza».

Y precisó el veterano técnico oriolano: «Viajar a Lasesarre con un solo gol de ventaja es muy poca renta para ascender. Ellos basan mucho su capacidad goleadora en los mediocampistas llegando con velocidad a la finalización dentro del área. Porque la segunda línea de ataque marca muchos goles entrando al área. Tienen una goleadora segunda línea atacante. Y además un par de futbolistas muy vivos y muy veloces como procede a la mejor esencia del fútbol vasco».

El miércoles, en Beniel, localidad vecina de Orihuela, el ex presidente del Orihuela Deportiva, José Esquiva, con dos ascensos seguidos como campeón en Tercera (1988-89) y en Segunda B (1989-90), y la inolvidable 1990-91 en Segunda División, quintos a un puesto de la promoción y 5 puntos del ascenso del Albacete, con Benito Floro, y del Depor con Arsenio Iglesias, se reunía con exfutbolistas y un grupo de empresarios, del sector inmobiliario y de la exportación.

«Esperamos el ascenso del Orihuela a Primera RFEF. Categoría que se merecen los aficionados y la Vega Baja, donde siempre dije, y repito hoy, existe potencial económico y población, además de cantera de futbolistas (hoy en el Elche, Murcia, Hércules y Villarreal) para mantener un club en Segunda. A nosotros sólo nos faltó entonces mayor apoyo económico», recordaba emocionado.

Sobre el partido frente al Barakaldo, Esquiva pronosticó: «El Orihuela debe salir a marcar dos goles al Barakaldo, siempre que los futbolistas tengan el espíritu ganador de los nuestros en el Orihuela Deportiva. Por ello logramos dos ascensos seguidos», sentenció Esquiva, en compañía de los exfutbolistas de Segunda, hoy empresarios, Rocky y Verza (padre del exprofesional 7 temporadas en Primera con el Villarreal, Almería y Levante), junto con Subirats, exprofesional 15 temporadas con el Valencia en Primera.

El presidente del Orihuela evidencia su capacidad como empresario en la gestión del club. La última prueba de ello es su atinada decisión de rebajar los precios de las localidades frente al Barakaldo. Porque subir los precios contra el Badalona supuso la pérdida de más de 1.000 espectadores en ese partido en Los Arcos.

Quedó ya claro que pase lo que pase sobre el césped, el presidente del Orihuela, Eloy Moreno, ha cosechado lo más difícil en el fútbol: emocionar. Porque ahora ya, la afición dormida y decepcionada por la pérdida de la Segunda B, otra vez se emociona y vibra con el equipo escorpión. Eloy Moreno recuperó el interés de una afición de nuevo emocionada por el fútbol en Orihuela y la comarca de la Vega Baja.

El fútbol escorpión, con Eloy Moreno, y con la conversión en sociedad anónima ya a falta sólo del visto bueno del Consejo Superior de Deportes, quiere recuperar la tercera categoría del fútbol español donde jugó en las etapas más brillantes de su historia en los años ochenta y noventa. Y disputó numerosas promociones de ascenso a Segunda División.

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