Omar Nicolás, el director deportivo del Mar Menor, se plantea su marcha del club costero
Necesita que algo cambie para no tener que decir adiós
Omar Nicolás, director deportivo del Mar Menor, no vive su mejor momento al frente del conjunto costero, a pesar de que su equipo está situado en la zona alta de la tabla. Tras ascender al cuadro de San Javier de Tercera a Segunda Federación y después firmar un año brillante en la cuarta categoría del fútbol español quedando a solo un paso de jugar el 'playoff' de ascenso, siguió finalmente en el Pitín a pesar de contar con ofertas potentes de conjuntos como el Águilas y el Linares, de Primera Federación. De hecho, aceptó seguir pensando y convencido de que el proyecto para este curso tendría unos cimientos muy sólidos.
Pero no es así. También lo ha sondeado el Real Murcia, pero Nicolás prefiere esperar de momento, a pesar de que no se están cumpliendo los hitos a nivel estructural en un club en el que desembarcó un grupo japonés el pasado verano. Un inversor que no ha vuelto a dar señales de vida, a pesar de que ya ha desembolsado una parte del importe de venta pactado con Daniel Núñez, todavía dueño de la entidad murciana.
Omar Nicolás, la cabeza visible del proyecto, se gastó la mitad en armar la nueva plantilla de la cantidad señalada por este grupo el pasado mes de septiembre, a la firma del contrato. Y no se arrepiente ya que ahora la incertidumbre es total. Aunque el primer equipo va al día, los problemas económicos en las bases del club son notorios y prolongados, igual que los de algunos proveedores como el de la ropa deportiva o el transporte.
Omar Nicolás
Mensaje de tranquilidad
Daniel Núñez, al menos, mandó el miércoles un mensaje de tranquilidad a la primera plantilla, aunque no parece suficiente para relanzar en lo anímico a un equipo que acaba 2022 de la peor manera posible. Omar Nicolás no quiere dar un portazo e irse porque se siente responsable de la plantilla y ha convencido a muchos de los futbolistas que apostaron por el Mar Menor, aunque necesita que algo cambie para no tener que decir adiós.