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Honor para el Jimbee Cartagena, que este domingo concluyó su histórica participación en la Champions League en la tercera posición. El equipo melonero superó al ... Sporting de Portugal en la tanda de penaltis (3-1), tras un partido de alto voltaje donde los árbitros, como en la semifinal del viernes ante el Kairat Almaty, dejaron mucho que desear. El italobrasileño Gabriel Motta ejecutó la pena máxima definitiva.
Jimbee Cartagena
Chispi, Tomaz, Waltinho, Mellado y Darío Gil (quinteto inicial). También jugaron Linhares, Pablo Ramírez, Motta, Gon Castejón, Jesús Izquierdo, Osamanmusa y Mouhoudine
2 (3)
-
2 (1)
Sporting de Portugal
Bernardo Paço, Tomás Paço, Sokolov, Merlim y Taynan (quinteto inicial). También jugaron Diogo Santos, Wesley França, Joao Matos, Pauleta, Nuno Dias, Dyzalo, Vinicius Rocha, Freire y Henrique Rafagnin (ps).
Goles (2-2) 0-1, Tomás Paço (minuto 9). 1-1, Motta (15, de penalti). 1-2, Sokolov (17). 2-2, Waltinho (35)
Penaltis (3-1) 0-0, falla Taynan. 1-0, Waltinho. 1-0, falla Wesley França. 2-0, Darío Gil. 2-1, Tomas Paço. 3-1, Motta. 3-1, falla Diogo Santos.
Árbitros: Grondal Nissen (noruego) y Dominykas Norkus (lituano). Amarillas a Motta, Pablo Ramírez, Taynan, Osamanmusa.
Incidencias: Unos dos mil espectadores en el Pabellón Antares de Le Mans (Francia), doscientos de ellos de Cartagena. Hubo protestas por la ubicación esquinada de los aficionados cartageneros y tanto la alcaldesa Noelia Arroyo como el presidente Miguel Ángel Jiménez Bosque intentaron mediar sin éxito.
El conjunto dirigido por Duda mereció, como en la semifinal del viernes, ganar sobradamente en los cuarenta minutos reglamentarios. Fue superior en todo momento tanto en juego como en ocasiones, pero volvió a faltar puntería con dos remates al palo de Pablo Ramírez, Waltinho y un doble penalti errado por Motta. Pero más que eso, el Jimbee volvió a chocar contra un arbitraje infame del noruego Grondal Nissen y el lituano Dominykas Norkus. Ambos permitieron demasiado contacto y hasta la violencia.
El jugador más machacado fue Pablo Ramírez. El pívot malagueño recibió una patada de Taynan que terminó en el penalti de Motta para el 1-1; los árbitros revisaron la jugada previamente pero no había ninguna discusión. El partido jamás debió decidirse en la tanda de penaltis porque después, en el minuto 33, a Ramírez le clavaron el codo en la cara. Tanto Duda como el resto del cuerpo técnico, con Rafa Fernández enfurecido, reclamaron el videoarbitraje y la roja a Marlim. Tras revisión en el VIR no se pitó nada. Con cinco faltas los lusos, era doble penalti. Osamanmusa vio una amarilla sin tocar al rival y la jugada concluyó en el doble penalti de Sokolov.
Esa jugada en concreto terminó por indignar al personal. El ambiente ya estaba caldeado desde el principio, cuando ultras del Sporting de Portugal accedieron al pabellón Antares con al menos una bengala, mientras los doscientos cartageneros fueron ubicados en una esquina de la grada, muy vigilados por personal de seguridad. Intentaron mediar sin éxito el presidente Miguel Ángel Jiménez Bosque y la alcaldesa Noelia Arroyo. Todo esto viene precedido de otro arbitraje que hizo al club explotar contra la organización y contra la UEFA, catalogada «de chiringuito».
Chemi, fundamental
En medio del caos y la indignación, el Jimbee mantuvo el martillo pilón. Y en una jugada colectiva Waltinho estableció el merecido 2-2 en el minuto 35. En los penaltis marcaron el pívot brasileño, Darío Gil y Motta para traer la medalla de bronce a Cartagena. En el Spprting de Portugal, Taynan y Diogo Santos chocaron contra Chemi.
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