El ciezano Joaquín Gómez Carrillo relata la vida rural de los años 60
Publica 'La patria que nos queda', un volumen de más de 600 páginas editado por Letrame
Mirar atrás causa casi siempre sentimientos encontrados entre aquellos acontecimientos que nos causaron alegría y bienestar y otros que marcaron negativamente nuestra existencia. Sin embargo, ambos, sin duda, nos han ayudado a experimentar y, por lo tanto, a crecer y a afrontar con mayor sabiduría el camino que a cada uno nos ha tocado vivir.
Joaquín Gómez Carrillo (Cieza, 1956) tenía la intención de escribir un relato corto de pequeño tamaño. Nada más lejos de lo que al final nos presenta: un volumen editado por Letrame de más de 600 páginas que bajo el título 'La patria que nos queda', retrata varias historias vividas por otras tantas familias del ámbito rural de los años 60, una década llena de carestías, de cierta miseria pero repleta de cambios que marcaron a aquellos que la vivieron en plenitud. Todo ello, el autor lo enmarca en aquellos colegios rurales a los que asistían niños y niñas, por regla general, poco pudientes.
Desde los tejeros que se dedicaban a fabricar tejas hasta los yeseros que tenían que extraer la piedra de las canteras, pasando por los barrenderos y hasta los colmeneros. Son algunas de las historias que Gómez Carrillo va contando a los lectores hiladas con la figura del profesor y de los hijos de estas familias. Eran unos niños que acudían diariamente a aquellos centros de enseñanza en precarios medios de locomoción y que en muchas ocasiones tardaban más de una hora en llegar a su punto de destino.
Habla del esparto y hasta del terremoto que sufrió la ciudad de Cieza en 1967, año en el que estaba en construcción la primera torre de 12 pisos en la Plaza de España
Corrían los locos años 60, felices y esperanzadores para algunos pero más tranquilos y sacrificados para aquellas gentes que habitaban lo que hoy llaman la España vaciada. En los campos no había luz eléctrica y Gómez Carrillo relata, por ejemplo, aquel momento histórico que supuso la llegada de la radio al mundo rural. Fue por medio de los primeros transistores a pilas cuando las mentes de mucha gente se abrieron a un mundo que hasta ese momento se circunscribía casi exclusivamente a su imaginación.
En los campos no había luz eléctrica y Gómez Carrillo evoca aquel momento histórico que supuso la llegada de la radio a estos lugares
El autor describe su libro como una «realidad ficcionada», es decir, todos sus personajes son ficticios y también los lugares donde se desarrollan los hechos. Sin embargo, sí que aparecen a lo largo de los 67 capítulos, pequeños aspectos 'localistas' que podrían situar al lector en Cieza, la ciudad natal de Gómez Carrillo. Por ejemplo: habla del esparto y hasta del terremoto que sufrió la ciudad en 1967, el año que, precisamente, se encontraba en construcción la primera torre de 12 pisos en la Plaza de España. La novela ha sido presentada en la Biblioteca Padre Salmerón de Cieza.
Tercer libro
Joaquín Gómez Carrillo es Graduado Social y Ciencias Empresariales por la Universidad de Murcia. Sus primeros estudios los hizo en una escuela rural y el bachillerato en el IES Diego Tortosa de Cieza. Ha sido funcionario del Ayuntamiento de Cieza hasta su jubilación. Es autor del libro 'Relatos vulgares' (2004) y de la novela 'En un lugar de la memoria' (2006). Es además coautor de los libros 'El hilo invisible (2012) y 'El melocotón. Historia de Cieza (2015). 'La patria que nos queda' es su tercer libro en solitario.
Ha escrito para la revista literaria 'La Puente' y en varias publicaciones del colectivo 'La Sierpe y el Laúd', y ha sido colaborador de revistas de la feria, de la Semana Santa y de varios medios escritos de Cieza.