Chema García: «Sé que mi peli no aspira a estar en muchos cines, pero querría que siguiera viéndose»

A Chema García Ibarra, ilicitano del 80, le atraía la idea de mezclar lo «doméstico» con lo «fantástico». Armar, dice, una película de ciencia ficción despojada de todo elemento ilusorio. Ni naves, ni extraterrestres ni mucho menos un viaje al futuro. Su cinta, cuenta, pretendía dejar flotar toda esa fantasía en el imaginario del espectador, presentando ante sus ojos personajes reales, situaciones cotidianas y vidas «normales». 'Espíritu sagrado' cumple con todos esos objetivos y también con la filosofía que este cineasta, con amplio recorrido en el mundo del corto, imprime a cada uno de sus trabajos. Estrenada en el Festival de Locarno, en Suiza, donde logró una mención especial, la película 'Espíritu sagrado' se podrá disfrutar esta tarde –18.45 horas– en la Filmoteca Regional de Murcia dentro del ciclo 'La sala de los cineastas', impulsado por la Unión de Cineastas y organizado por la Filmoteca y el Aula de Cine de la Universidad de Murcia. La proyección irá acompañada de un coloquio con su director y la responsable de arte de la cinta, Leonor Díaz. 'Espíritu sagrado' también se proyectará mañana a las 21.30 horas.

Definida por su creador como una «película pequeña, hecha con un presupuesto normal y un poco al margen de la industria del cine», sigue la vida de José Manuel, miembro de una asociación de aficionados a la ufología a quien golpea la muerte de un amigo. Su argumento, sin embargo, no es, cree García, lo principal. «Me interesaba más rodar una cinta de ciencia ficción a la que se le han extraído todos sus elementos», y en la que se ve, apunta, «a gente normal subiendo a un coche normal en un barrio de Elche». «Esa mezcla me gusta y me divierte».

«Creo que se pueden encontrar cosas originales y excitantes en aquello que estamos menos acostumbrados a ver, y precisamente esas combinaciones de extremos, de lo fantástico y lo doméstico, son un mundo a explorar», afirma García, autor, entre otros, de los cortometrajes 'El ataque de los robots de Nebulosa-5' (2009), 'Protopartículas' (2010) y 'Uranes' (2014).

Comprometido con el cine que se realiza fuera de los grandes núcleos de producción, García rodó la totalidad de la cinta en su Elche natal. Grabar en la periferia, asegura, «no implica renuncias», tan solo mayor complejidad logística pero «nada grave» y, sin embargo, explorar nuevos escenarios aporta «frescura». «Cuando ruedas algo, lo erosionas un poco. Y si grabas un lugar muchas veces el plano acaba totalmente erosionado; todo misterio que pudiera tener se convierte en anodino, y lo mismo ocurre con las personas, con las expresiones, con la forma de hablar..., pierden atractivo», subraya García, quien apuesta por actores no profesionales.

Es consciente de que es difícil llegar al espectador porque hay «una parte del proceso que no depende de nosotros», especialmente en el campo de la distribución, pero se siente cómodo «fuera de la industria», sobre todo «geográficamente». Es algo, dice, «bastante sano». Estrenada en cines el pasado noviembre –antes se pudo ver en el Festival Internacional de Cine de Cartagena (FICC)–, su cinta sigue proyectándose en diversas salas: «Sé que es una peli que no aspira a estar en muchos cines, pero me gustaría que siguiera viéndose».

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