Una gota de saliva para detectar las hormonas de la fertilidad

Cambios culturales, económicos, del estilo de vida, de los patrones sociales, etcétera, etcétera, etcétera, son algunos de los factores que están asociados a la progresiva disminución (en las últimas décadas) del número de hijos por mujer que nacen cada año, en países desarrollados.

Hablar de fertilidad es hablar de mujeres porque en el caso de los hombres sus gametos (los espermatozoides), en condiciones normales, se pueden generar de forma ilimitada desde la pubertad y hasta el final de su vida; pero la cantidad de óvulos (gametos femeninos) al principio de la vida suele rondar el millón, cifra que desciende hasta aproximadamente la mitad en la adolescencia y de la que tan solo 400-500 ovocitos llegan a la ovulación con cada ciclo menstrual. Asimismo, los óvulos, como sucede con el resto de células del cuerpo, envejecen, influyendo en que las probabilidades de lograr un embarazo vayan mermando y el riesgo de aborto vaya en aumento con la edad.

Así que, aunque la calidad de los espermatozoides también merma con la edad, la mujer tiene un papel más relevante llegado el momento de la reproducción. Y ligadas al ciclo menstrual se encuentran las conocidas como 'hormonas de la fertilidad': progesterona, prolactina, estradiol y hormona luteinizante, todas ellas implicadas en la reproducción.

«Tener controlada la concentración de estas hormonas mejora el éxito de los tratamientos de fertilidad in vitro», según Antonio Javier García, catedrático del área de Ingeniería Telemática e investigador del grupo de Ingeniería Telemática de la Universidad Politécnica de Cartagena quien, junto a su equipo, ha desarrollado un 'Dispositivo para determinación simultánea y rápida en saliva de las hormonas de fertilidad estradiol, progesterona, hormona luteinizante y prolactina'.

«La principal ventaja de esta tecnología es que permite realizar un análisis hormonal a partir de una pequeña muestra de saliva, es decir, de forma rápida, no invasiva e indolora, además de su precio reducido y pequeño tamaño», explica.

Es lo que se conoce como 'diagnóstico Point of Care' (que se podría traducir como 'Punto de Salud) o lo que es lo mismo, son pruebas que se pueden realizar fuera del laboratorio y en lugar que se desee, y que cuentan con muchas ventajas como su efectividad, fácil aplicación, bajo costo y beneficios para la toma de decisiones en relación a la salud de una persona o grupo de personas.

En este caso, apunta García, «con solo depositar una gota de saliva en el dispositivo este informa, en 5-10 minutos, sobre las concentraciones de las hormonas objetivo de este proyecto y el médico sabe, de primera mano, cuál es el mejor momento para realizar una transferencia embrionaria, con mayores posibilidades de éxito».

Otra de las grandes ventajas, es que resulta mucho más precisa dado que permite realizar muchos más muestreos y obtener resultados inmediatos. «Si la prueba tradicional era un análisis de sangre semanal, que posteriormente se debía llevar a un laboratorio y cuyos resultados tardaban algún tiempo, ahora la paciente se puede realizar tantos test como sea preciso, cuyos resultados se conocen en pocos minutos y esto permite llevar a cabo el tratamiento de fertilidad en el momento óptimo, de acuerdo con la concentración de hormonas».

Asimismo, el acceso a este tipo de pruebas 'Point of care' se ha demostrado que reduce notablemente el estrés en las pacientes, «lo que sin duda es una ventaja porque evita la interactuación de otras hormonas, que pueden afectar de forma negativa al resultado del tratamiento», como apunta el investigador de la UPCT.

El dispositivo que ha creado hace posible que la paciente lo tenga en su hogar, se pueda realizar ella misma la prueba y los resultados son enviados de manera inalámbrica a la clínica de fertilidad. «Se trata de unas láminas desechables (biosensores) que se introducen en el dispositivo y sobre las que se deposita la muestra de saliva, en pocos segundos se conecta con la clínica y está informa de los resultados de la misma».

El proyecto, desarrollado por la Universidad Politécnica de Cartagena, ha contado con la financiación de la Fundación Séneca-Agencia de Ciencia y Tecnología de la Región de Murcia, en el marco de su programa ayudas a la realización de proyectos para el Desarrollo de Investigación Científica y Técnica por parte de Grupos Competitivos, en su convocatoria 2018-2022.

Además, ha participado en el proyecto el departamento de Química Analítica de la Universidad Complutense de Madrid, un equipo de relevancia internacional en su área y que contaba con experiencia previa en el estudio de hormonas como la progesterona. El equipo de la Complutense se ha centrado en el desarrollo de biosensores de las cuatro hormonas objetivo de este proyecto.

Por ahora, en la Universidad Politécnica de Cartagena han desarrollado el diseño electrónico y de comunicaciones del dispositivo y han fabricado diferentes prototipos mediante impresión 3D y a través de medios propios, además de haber publicado diferentes artículos científicos en revistas de alto prestigio y registrado la patente USA en colaboración con la Complutense.

«En la siguiente fase esperamos poder llevar a cabo pruebas clínicas a gran escala, con una muestra suficiente de mujeres que valide los resultados que hemos obtenido. Si todo avanza según lo previsto, esperamos poder avanzar con el proceso de comercialización y que en poco tiempo el dispositivo esté en el mercado. Es una solución que haría viable estos procedimientos de fertilidad en países y regiones que en este momento lo carecen debido a no disponer de un laboratorio a tal efecto por su alto coste».

• Temas
• ciencia