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Multa con la infracción.
Multan a un motociclista por no llevar puesto «el cinturón de seguridad»

Multan a un motociclista por no llevar puesto «el cinturón de seguridad»

Un agente de la Policía Local requirió al conductor por haberse saltado supuestamente un semáforo pero le sancionó con 200 euros por no llevar un sistema de retención homologado en un vehículo que carece de ello

B. SAUS

Sábado, 3 de octubre 2015, 00:31

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A Carlos Marín, por muchas vueltas que quiera darle, la Policía Local lo multó el pasado miércoles por un hecho cierto e incontestable: no llevaba puesto el cinturón de seguridad. Así que debería pagar la sanción, que asciende a doscientos euros. Pero Carlos -es un nombre supuesto pues así lo prefiere- pagaría con gusto otros doscientos al agente que lo multó si logra explicarle la forma de adaptar un cinturón de seguridad a la motocicleta que conducía en aquel momento.

Los hechos ocurrieron en la Gran Vía, en pleno corazón de Murcia. Carlos aguardaba en un semáforo sobre su moto de gran cilindrada y, «cuando se puso en verde, me dispuse a seguir mi camino. Entonces, me pararon. Así, de golpe».

El agente de la Policía Local le advirtió de que se había saltado el semáforo, a lo que Carlos repuso que no era cierto. Y comenzó la típica discusión entre agente y ciudadano.

Aunque el policía local pareció tenerlo claro. «Ni caso me hizo el zagal, que era de los 'nuevos' -continúa Carlos-. Sacó su máquina y comenzó a tocar teclas». A tocarlas con poco acierto que sancionó al motorista por un concepto poco habitual.

Carlos, por la agitación propia del instante, continuó su camino. Sin embargo, más tarde, cuando se detuvo a comprobar la papeleta de la multa, se quedó, como asegura, «de piedra. No creía que fuera posible ser tan torpe, la verdad».

El motorista acababa de ser denunciado por esta sorprendente infracción: «No utilizar el pasajero del vehículo, mayor de 12 años y con altura superior a 135 centímetros, el cinturón de seguridad o sistema de retención homologado, correctamente abrochado».

El error del agente de la Policía Local, quien sin duda debió confundirse al teclear la infracción adecuada, provocó en Carlos «un gran enfado, como es natural. Porque si ya es mentira que me saltara un semáforo, resulta imposible que no llevara cinturón. ¡Y menos abrochado, 'pijo'!». Así que se dirigió al cuartel para informar de lo sucedido y que la multa fuera anulada. O que le explicaran cómo instalar el cinturón.

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