'Capitanes de abril', historia de Portugal

Corría el año 2010 cuando, tras terminar su participación en el rodaje de la película iraní de no animación 'Persépolis', María de Medeiros acudió a la XXX edición del Cartagena Jazz Festival a presentar su último disco por aquel entonces, 'Penínsulas y continentes'. Mucho ha llovido desde entonces pero María no ha perdido ni un ápice de creatividad y vuelve para actuar como cantante pero también para presentar la que fue su primera película como realizadora, 'Capitães de abril', que también protagonizó junto a Stefano Accorsi, Joaquim de Almeida y Fele Martínez.

Para celebrar su vuelta a Cartagena, La Mar de Cine le hace hoy un hueco especial en esta edición, al igual que lo hace la sección musical del festival que la acogerá [mañana] junto al poeta y músico Paulo Furtado, el rockero de Coimbra que está detrás de la marca The Legendary Tigerman. Considerada en la actualidad como la actriz portuguesa con mayor proyección internacional, Medeiros es afrancesada, políglota, risueña y nunca pierde su expresión de dulce niña traviesa, según recuerda el periodista Eugenio González. Habla seis lenguas y ha hecho casi de todo: es actriz de cine y ha participado en más de 60 películas, algunas tan recordadas como 'Henry y June', 'Pulp fiction', 'Huevos de oro', 'Mi vida sin mí', 'Babel' y 'Airbag', pero también es directora, sobre todo de documentales. Ha hecho teatro, musicales y últimamente se ha lanzado a la piscina de la música como cantante, letrista y compositora. «Soy una actriz que canta y lo hago con un pie en el teatro y otro en la música. Me gusta mucho mezclar las dos cosas», suele decir cuando le preguntan por la disciplina por la que se siente más atraída. Su música, como ella, es ecléctica. De Medeiros interpreta fados, salsa, bossanova, jazz e incluso flamenco, y como actriz ha forjado una sólida carrera trabajando con cineastas tan imprescindibles en la historia del cine como Manoel de Oliveira, Quentin Tarantino o Bigas Luna.

'Capitães de abril', que presentará hoy en un coloquio con Joaquín Cánovas y con el público de Cartagena (Nuevo Teatro Circo, 19 horas, con acceso gratuito hasta completar aforo), fue su primer largo de ficción, el proyecto de toda una vida. Y tanto trabajo obtuvo su recompensa con premios como el del público en los festivales de Arcachon y de Cinesone y el Premio a la Mejor Película en el Festival de Cine de São Paulo. La película está ambientada en el Portugal de Salazar, quien mantuvo con mano de hierro uno de los regímenes dictatoriales más antiguos de Europa. Todo empieza cuando, durante la noche del 24 al 25 de abril de 1974, la radio emitió una canción prohibida, 'Grândola'. Podría tratarse de la insumisión de un periodista rebelde pero fue el detonante de un golpe de Estado militar que cambiaría la faz del pequeño país vecino.