El UCAM inicia el tercer asalto de su historia al fútbol de élite

El UCAM lo tiene todo para ser feliz. Acabó la primera fase de la temporada en primer lugar tras su victoria en la ciudad deportiva del Granada y afronta la segunda fase de la competición desde el lugar más privilegiado posible. Además posee una larga y equilibrada plantilla para afrontar bajas como las de Tropi ya que Salmerón tiene potencial en todas las líneas para imponerse a rivales como el Algeciras, San Fernando y Sanluqueño, tres clásicos de la Segunda B que han conformado buenas plantillas pero que no tienen el potencial universitario.

Además, los murcianos tienen en su mano, sin depender de nadie, su clasificación para el 'playoff' final de ascenso a Segunda. Forma parte de un grupo en el que arranca como líder, con los mismos puntos que el Linares, y en el que se colarán para el tramo final los tres primeros y el mejor cuarto de los cinco grupos que pelean por este objetivo. Por lo tanto, los universitarios tienen todo de cara para afrontar su tercer gran asalto al fútbol profesional, a una Segunda División que saboreó fugazmente en la campaña 2016-17.

Y es que desde la llegada del UCAM a Segunda B su objetivo siempre fue estar arriba. Excepto en la campaña 2012-13, donde ocupó una plaza en Segunda B y volvió a caer a Tercera, siempre fue candidato a subir. Volvió a Segunda B en la campaña 2014-15 y con Eloy Jiménez en el banquillo llegó hasta la segunda eliminatoria de ascenso tras eliminar al Real Unión y caer ante el filial del Athletic de Bilbao. Un año después y ya con Salmerón, los universitarios ascendieron a Segunda por la vía directa tras tumbar al Real Madrid Castilla. Objetivo cumplido.

Con solo un año en el fútbol profesional, el UCAM tomó nota de cómo es estar en el escaparate y codearse con equipos históricos como el Mallorca, Oviedo y otros del estilo. Por eso, la familia Mendoza ha puesto siempre el listón tan alto con los proyectos de los últimos años. Pero justo cuando más dinero se gastó, menos consiguió. De hecho en las últimas tres temporadas antes de la actual, el cuadro universitario contó con grandes plantillas pero ni siquiera llegó a jugar las eliminatorias para subir.

Hasta que ha llegado de nuevo Salmerón para meter al UCAM arriba. Y a partir de hoy tiene la oportunidad de repetir la gesta de 2016. Tiene una plantilla cargada de dinamita, pero le falta superar esta segunda fase para jugar un 'playoff' en el que ganando dos partidos volverá a la élite.

El Sanluqueño, cargado de veteranos, llega en buena forma a esta segunda fase tras ganar cuatro de los últimos cinco partidos. Y sin nada que perder, ya que para este equipo tan humilde jugar en la Primera RFEF ya es un premio. Aún así, se lo pondrán difícil a un UCAM que debe salir a ganar.