Así puedes ahorrar espacio en tu maleta este verano

El verano es época de viajes. Por ello, muchos se preguntan cómo hacer una maleta y poder ahorrar espacio. Hacer la maleta es una de las tareas que más odia la gente antes de irse de vacaciones. A veces, la gente llena demasiado las maletas de cosas innecesarias. Lo que está claro es que el objetivo de los que se van de vacaciones es que al preparar el equipaje puedan meter en su maleta todo lo que creen que necesitan.

En muchas ocasiones esta tarea es muy complicada porque la maleta no es lo suficientemente grande. En estos casos hay que hacer algo que los viajeros odian, hay que dejar algo en casa que creas que probablemente no tengas que utilizar. Sin embargo, si has organizado mal la distribución de tus prendas en la maleta puede que tengas que deshacerte de más cosas de las que deberías. Por ello, debes seguir un orden y colocar bien todo lo que quieras llevarte de viaje estas vacaciones.

No es necesario que hagas un curso intensivo con Marie Kondo antes de irte de vacaciones, puedes seguir una serie de consejos para economizar el espacio de tu maleta.

1. Un paso importante es elegir la maleta que vayas a llevar de viaje. Lo más recomendable es optar por una maleta que pese menos. Puedes comparar dos maletas de las mismas dimensiones y elegir la que pese menos. La ligereza es esencial para moverse con más agilidad o para no sufrir una penalización en el avión por ello.

2. Si vas a viajar en avión y eliges llevar equipaje de mano, debes tener en cuenta las medidas exactas que permite cada aerolínea, ya que entre ellas difieren en algunos centímetros. Por ello, lo más recomendable es consultarlo antes con la compañía. Por lo general, este tipo de maletas tienen una altura de 55 cm, una anchura de 35 a 45 cm y un grosor de 20 a 25 cm, pero consulta igualmente las medidas de la aerolínea con la que vayas a viajar.

3. Antes de hacer el equipaje, elabora una lista con todo lo que te vayas a llevar, prendas de ropa, productos de higiene personal, toallas, etc. Calcula los días que vas a estar fuera y planea de antemano las combinaciones que se pueden hacer con las prendas que te vas a llevar.

4. Cuando hagas la maleta debes aprovechar cada uno de los huecos que queden libres. En primer lugar coloca tanto el calzado como los elementos más pesados, los cuales deben situarse en la parte inferior.

5. A continuación, guarda las prendas de ropa. En este caso, el modo en que estén dobladas es clave para ganar el máximo espacio posible. Por ello, evita utilizar el formato cuadrado, tal y como están colocadas las prendas en tu armario. Lo más eficaz es colocar la ropa enrollada, aunque también es posible realizar un doblado extra (en forma rectangular) y ordenarlas verticalmente, de manera que cuando la maleta ruede, reposen en horizontal y no se doblen. Los hay que incluso prefieren guardar la ropa en bolsas al vacío, aunque eso supone tener que comprar bolsas especiales o crear dicho vacío con una aspiradora.

6. Aunque con los métodos anteriormente nombrados ahorrarás espacio, debes llevar en la maleta solo lo imprescindible.

7. Si tienes que llevar toallas, se recomiendan las de microfibra porque ocupan mucho menos espacio.

8. La ropa interior y otros artículos de pequeño tamaño, deberán ocupar las zonas que quedan libres entre la ropa y el calzado.

9. La bolsa de aseo debe estar compuesta por recipientes de pequeño formato que no pesen demasiado. De esta forma, será mucho más sencillo colocarla en el equipaje de mano en el caso de viajar en avión.

10. Si vas a viajar en avión, lo más conveniente es llevar puestas el día del vuelo las prendas más pesadas.

Estos son algunos pasos que te ayudarán a hacer la maleta y ahorrar espacio. Por último, cuando hayas terminado tu maleta, no te olvides de pesarla antes de salir de casa para comprobar que no te has pasado con los kilos.

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