Estas son las bonificaciones que puedes pedir antes de darte de alta como autónomo

Hacerse autónomo no es nada fácil, quien lo conoce lo sabe. Dar el paso supone muchas dudas, consultas, quebraderos de cabeza y, claro, también dinero. Porque el autoempleo es un recurso que cada vez utilizan más personas para llevar a cabo una actividad por cuenta propia para tener ingresos. En muchos casos, la ilusión es mayor que la experiencia, por lo que hay muchas particularidades que se desconocen.

Es el caso de las ayudas a las que se puede optar antes de abrirse camino como autónomo. Están destinadas a colaborar en la puesta en marcha de un proyecto emprendedor sin tener que hacer frente a todos los gastos iniciales. Se solicitan conjuntamente con el proceso de alta como autónomo en la Seguridad Social. Para quienes están interesados en beneficiarse de estas bonificaciones y reducciones de las nuevas cuotas, estas son las opciones a las que se pueden acoger quienes se den de alta por primera vez en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).

Es la bonificación por excelencia. Los nuevos autónomos o quienes hayan tenido un parón de dos años pagarán una tarifa plana de 60 euros al mes, independientemente de la edad, durante un año completo. El principal y obvio requisito es no haber estado dado de alta anteriormente como autónomo, en el plazo de dos años anteriores (o de tres si se ha disfrutado de bonificaciones en el pasado).

En el caso de que el autónomo opte por la base mínima de cotización, podrá aprovecharse de la cuota mensual de 60 euros durante los 12 meses siguientes a la fecha del alta. Si, por el contrario, opta por una base de cotización superior a la mínima que le corresponda, la reducción mensual es la equivalente al 80% de la cuota.

Después de los primeros 12 meses, podrán aplicarse otras bonificaciones durante otro periodo igual: una reducción del 50% durante los 6 meses siguientes y una bonificación del 30% en el último semestre.

Además de las reducciones con carácter general durante dos años descritas, los hombres menores de 30 años y las mujeres menores de 35 pueden acceder a una bonificación adicional por figurar como autónomos jóvenes. Se trata de un 30% sobre la cuota durante los 12 meses siguientes al periodo general, de manera que la duración máxima de las bonificaciones para estos autónomos será de hasta 36 meses.

Los trabajadores por cuenta propia que desarrollen su actividad en municipios de menos de 5.000 habitantes tendrán derecho a disfrutar de los mismos incentivos del 50% y 30% respectivamente de los dos semestres del segundo año, también durante los doce meses posteriores. Así, encadenarán también 36 meses de reducción en la cuota.

El autónomo en estos casos tendrá que estar empadronado en un municipio de menos de 5.000 habitantes en los cuatro años siguientes y mantener el alta en la actividad por cuenta propia en el mismo municipio durante al menos dos años.

Los trabajadores por cuenta propia con un grado de discapacidad igual o superior al 33%, víctimas de violencia de género y víctimas de terrorismo que causen alta inicial o que no hubieran estado de alta en los dos años anteriores en el RETA también se benefician de bonificaciones. Quienes opten por la base mínima de cotización cuentan con una cuota única de 60 euros mensuales durante doce meses; mientras, la reducción en ese periodo será del 80% para quienes tengan una base de cotización superior a la mínima.

Después del primer año, la bonificación que se puede aplicar es de un 50% de la cuota durante 48 meses, sumando un periodo máximo de 5 años de reducciones desde la fecha de alta en el régimen.

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