Cadorini da la victoria al Real Murcia en el último momento en el Artés

El encuentro comenzó con un intento prometedor del Lorca Deportiva, con un centro desde la izquierda al que no llegó a conectar Carrasco. Ese acercamiento inicial, aunque estéril en términos de peligro real, evidenció la voluntad del equipo de Sebas López de salir con actitud propositiva. Sin embargo, esa chispa se fue apagando con rapidez ante la presión alta y el dominio territorial que impuso el Real Murcia.

Los pimentoneros respondieron de inmediato con una acción clara: un balón filtrado en profundidad permitió a Palmberg plantarse en posición franca de remate, aunque su disparo se marchó desviado, sin poner en apuros a Ernestas. Esta jugada marcó el inicio de una fase del partido donde el Real Murcia asumió el control del ritmo, especialmente en la medular.

En medio del monólogo ofensivo del Murcia, apareció un nuevo disparo desde la frontal del área, esta vez a cargo de Mathieu, quien, tras una jugada elaborada por banda derecha, encontró espacio para armar el disparo. No obstante, su chut se marchó desviado, aunque dejó claro el dominio de los visitantes y su intención constante de finalizar jugada.

Hasta ese momento, el Lorca había mostrado una mayor intención de llevar la iniciativa, aunque sin ocasiones claras. Pero a partir del minuto quince, los lorquinos empezaron a traducir su empuje en llegadas algo más peligrosas, especialmente a balón parado. La primera gran oportunidad llegó tras un saque de esquina en el que a Saturday le hicieron penalti. La responsabilidad desde los once metros recayó sobre Carrasco, uno de los jugadores más experimentados del conjunto local. Su lanzamiento, duro y dirigido a la derecha del guardameta, fue bien intuido por Gazzaniga, que no solo adivinó la trayectoria, sino que además ejecutó una intervención solvente para mantener el 0-0.

Fue un momento clave, no solo por lo que supuso a nivel de marcador, sino también en el plano anímico, ya que el Lorca perdía una ocasión de oro para adelantarse cuando empezaba a controlar el juego. Lejos de venirse abajo, el equipo dirigido por Sebas López insistió en campo contrario, y fue Juanma Acevedo el que, desde fuera del área, buscó sorprender al portero visitante con un disparo seco y bien dirigido, aunque ligeramente desviado. Poco después, una acción bien trenzada por la banda derecha, iniciada por Jaime Escobar, culminó con un preciso centro al área que encontró la cabeza de Naranjo. Sin embargo, el testarazo del delantero no encontró portería.

Por su parte, el Murcia trataba de reaccionar saliendo al contragolpe y explotando especialmente las bandas, aunque sin la profundidad necesaria. Sus centros laterales no encontraban rematador y el equipo parecía algo desconectado entre sus líneas. A pesar de ello, las granas gozaron de dos ocasiones clarísimas en las botas de Mathieu. La primera llegó tras una acción rápida en la que el atacante se plantó solo ante el portero, pero su disparo, con todo a favor, se marchó inexplicablemente por encima del larguero. Y ya en el tramo final del primer tiempo, Mathieu volvió a tenerla: regateó con calidad al guardameta, pero su posterior remate careció de precisión, no encontró puerta.

El segundo tiempo comenzó con intensidad por parte del Lorca, y el equipo lorquino no tardó en adelantarse tras una falta bien ejecutada por Juan Hernández, que Álvaro Martínez transformó en gol con un gran remate de cabeza. Tras el gol, el Murcia reaccionó y tomó la iniciativa en ataque, aunque sus llegadas al área de Ernestas carecieron inicialmente de precisión. Pedro León gozó de varias oportunidades a balón parado, y tras dos intentos desviados, logró empatar con un excelente lanzamiento de falta que superó la barrera.

Cadorini dispuso de una ocasión clarísima al quedarse solo ante el portero, pero Lolo, en una acción salvadora, le arrebató el balón cuando ya se cantaba el gol. Ambos equipos buscaron el tanto decisivo, con oportunidades en ambas áreas, pero los porteros se mostraron firmes... hasta el minuto 90. Entonces, Cadorini se resarció y culminó la remontada con un gol que selló la victoria del Real Murcia, en un desenlace cruel para el Lorca.