Agustín Ramos: «Yo vengo a ayudar y no me llevaré nada; no soy como Moro, García de la Vega o Gálvez»

-Se ha hecho muy popular.

-Yo no lo sabía, desconocía la dimensión de ser presidente del Real Murcia. A veces, cuando voy por la calle o estoy en un restaurante me piden que me haga una foto. Yo no soy nadie, pero es increíble cómo te valoran.

-¿Cómo marcha su mandato?

-He tenido que adaptarme al Real Murcia y también a su forma de trabajar. Aún no he podido hacer las cosas a mi gusto. Hay aspectos que funcionaban muy bien, pero también intento cambiar otros, aunque es complicado y difícil. Estamos intentando ser más ágiles en la toma de decisiones.

-¿Cómo se puede conseguir?

-Con comités ejecutivos, cada uno con una labor muy determinada. Y con un gerente que dirija la orquesta; tiene que haber un equipo que trabaje en el día a día y tomando muchas decisiones.

-¿Y qué ha aportado usted?

-He transmitido un poco más de ilusión y creo que ahora el proyecto es más viable con la aportación que estoy haciendo. Problemas internos hay en todos los sitios, pero estamos intentando solucionarlos. Antes era más negativo con los números de la entidad, pero creo que podemos salir adelante. Si no lo creyera, lo dejaría. Solo busco que el club ascienda y que, cuando me vaya de aquí, pueda decir que he hecho una labor, como mínimo, correcta.

-¿Qué piensa del actual Consejo de Administración del club?

-Le tengo un gran respero, ha hecho mucho por el Murcia, pero llegan momentos en la vida que hay otras fórmulas y otros sistemas. Yo opino que el Consejo debe ser informativo, reunirnos para ver cómo va todo. Pero para ser más rápidos necesitamos comisiones ejecutivas. No podemos reunirnos cada dos o tres meses y hay que ser más productivos. Cuando tienen que decidir muchos se atrasa todo.

-Podría poner más dinero y abrir brecha con el resto de grandes accionistas. Así mandaría más.

-Tenemos una limitación, yo no puedo tener más del 20% del capital. Aportaría más dinero, pero habría que buscar una fórmula legal, si no el club está limitado. No solo por mí, tambien para cualquier empresa que quiera venir. Entiendo que era oportuno poner este límite para evitar que gente se aprovechara del club, pero yo vengo a poner dinero y no quiero llevarme absolutamente nada como anteriores gestores de la entidad. Hay que cambiar esa barrera legal para que la gente invierta.

-¿Qué busca en el Murcia?

-Para mí es un reto, el club no está donde le corresponde. Yo como gestor puedo conseguir llevar al Murcia más arriba en un plazo razonable, pero hay muchas trabas, como De la Vega y las administraciones públicas.

-¿Hasta que punto le quita el sueño el empresario mexicano?

-Preocupa, pero no es vital. Tenemos muchas armas para luchar contra este señor. Me gustaría resolver el asunto, pero él no está por la labor. Es crítico y asegura que cuanto más cosas hagamos, mejor para él. Dice que el club es suyo y que que no tiene obligación de hablar con nadie.

-¿Ha contactado usted con él?

-Una persona, en mi nombre, ha intentado hablar con él, pero la conversación no fue bien. Su posición no es la adecuada. Se aprovechó de unas acciones que todos sabemos cómo las consiguió. El pasado jueves intentamos hablar con él, pero no negocia.

-¿Qué pretende De la Vega?

-Es una persona que no tiene nada que perder y acostumbrada a tener a toda la gente en contra, ya le pasó en otros sitios. Las polémicas le gustan, buscar clubes en dificultades ya que disponibilidad económica no tiene. Quiere hacer negocio con el Murcia, pero ahora no quiere negociar. Pero se puede equivocar, nosotros vamos a ir hasta el final.

-¿Y el concurso de acreedores y las administraciones públicas?

-Al concurso tenemos que darle una solución antes del final de año. Hay que solventarlo con acuerdos o con dinero. Con Hacienda hablamos y salimos desmotivados; no hubo acercamiento. Su protocolo dificulta el acuerdo con la sede regional. Nos mostramos transparentes, les ofrecimos parte de nuestros ingresos, pero dijeron que van a seguir embargándonos. Trabajar así es complicado y debemos buscar aportar una solución económica.

-¿Serán los bajos del estadio?

-Debemos generar riqueza y el Ayuntamiento se está portando muy bien con nosotros, quieren que el Murcia salga adelante, están por la labor. Pero para llegar a un acuerdo con Hacienda el primer paso es sacar adelante la comercialización de los bajos del estadio. Si no, será difícil. Hay que pasar unos filtros, pero la predisposición es muy buena. Todo lo que genere el club con los bajos será para pagar las deudas.

-¿El Ayuntamiento paga ya la luz, como dice el convenio?

-De momento no, están todos los trámites realizados, pero ahora depende de la valoración de un técnico del Departamento de Ingeniería Industrial que hace tapón e interpreta el convenio de uso de erróneamente. Son unos 8.000 euros al mes desde hace mucho tiempo, es mucho dinero.

-¿Y la ciudad deportiva?

-Es vital, es lo que necesitábamos y ya hemos puesto la primera piedra. La inversión que ha hecho KBusiness es para el club. Los que hemos puesto dinero no lo hacemos para lucrarnos. Ahora estudiamos varias formas de financiación para construirla.

-¿Han creado en el club un departamento para llamar a los abonados que no han renovado?

-Es un grupo de trabajo para llegar a todos los socios que no han renovado su carné. La aceptación está siendo muy buena. Queremos saber qué pasa y sacar conclusiones de lo que opina la gente. Haremos igual con las empresas.

-¿Interviene en lo deportivo?

-Un presidente es como un director de una empresa y debe ser intervencionista. No digo cómo tienen que fichar y cómo tienen que jugar, pero sí puedo opinar y compartir impresiones con los técnicos. Eso es constructivo. Tienen su autonomía; mi relación con Molina y Simón es buena.

-Y Pedreño, ¿también opina?

-Es una buena persona, pero no está aquí para aportar en lo futbolístico. Tiene muchos conocimientos respecto a empresas importantes. Viene a sumar en lo económico y puedo garantizar que en temas deportivos no va a intervenir. Los responsables del equipo, para lo bueno y lo malo, son la secretaría y el cuerpo técnico. Si interferimos nosotros sería un error, luego no podríamos exigirles y pedirles responsabilidades. Además, Molina tiene las cosas muy claras y no se deja influenciar.

-¿Habrá fichajes en invierno?

-Si hicieran falta, veríamos la fórmula de hacerlo, pero antes está el concurso de acreedores. El equipo está muy bien, solo falta suerte fuera de casa para que ganemos un partido.