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«Fue la contundencia de los versos de Miguel Hernández los que me llevaron a ponerles música»
El cantante reivindicó como el poeta la vida y la libertad como valores irrenunciables. «Que el porvenir mantenga fresca la memoria y nos libre de aquellos que asesinan a los poetas y a la poesía»
El mejor homenaje para el cantante que ha marcado la infancia de tantas generaciones y acompañado a otras con sus letras. Con sus canciones que no son otras que la herencia de los más insignes poetas. Joan Manuel Serrat, retirado desde el año pasado, apagó ya su voz sobre los escenarios, pero su música sigue latiendo en el corazón de todo un país y muy especialmente en el de un pueblo, el todos los oriolanos y desde este viernes también el suyo. Así se lo hicieron recordar al nuevo hijo adoptivo de la ciudad de Miguel Hernández.
Entre el patio de butacas, el catalán respiró un aire de complicidad, de sentimientos compartidos que se desplegaron en toda su autenticidad cuando se lanzó a confesar los motivos que le llevaron a difundir la palabra del poeta. «Es cierto que la canción ha sido una buena manera de difundir sus palabras. De lo cual me siento orgulloso. Pero esta no fue la razón por la que me vi empujado a ponerles música. No fui tan pretencioso. Sencillamente ocurrió que, al descubrir en versos ajenos emociones que reflejaban las mías, me vi inmerso en aquellos poemas que acabaron siendo mis canciones».
«Fue la contundencia de los versos que este hombre iba mostrándome en cada página. Unos versos redondos, frescos como si hubieran sido escritos ayer. Y la musicalidad de su poesía no era menor. Por eso me empujaron a ponerle música y cantarlos», dijo para echarse en el bote a todos los presentes. Y, pese a que reconoció que seguramente Hernández no hubiera dado visto bueno a sus canciones, «Miguel Hernández es un poeta musical. Se diría que vienen de fabrica con la música puesta». Y para ejemplo, se arrancó con los primeros versos de 'Vientos del Pueblo'.
También recordó el momento en el que él vio en Miguel un soplo de aire fresco mediante el que escapar a la opresiva atmósfera de la dictadura. «Conocí a Miguel en la Universidad de Barcelona, en aquellos ratos en los que hablábamos de amor, leíamos poesía y tomábamos el sol en aquellos jardines entre apuntes y octavillas clandestinas. Íbamos de la mano de unos libros que nos mandaban de Argentina y que eran almas cargadas de futuro, que nos devolvían a aquellos que fueron condenados al silencio», rememoró emocionado.
«No encuentro un lugar mejor, desde su pueblo y el mío, para rendir fraternalmente un homenaje al niño cabrero, al amante exiliado, al padre huérfano, a la víctima de las cárceles de la dictadura y, por encima de todas las cosas, a aquel poeta que amó la libertad y la vida. Que el porvenir mantenga fresca la memoria y nos libre de aquellos que asesinan a los poetas y a la poesía», deseó entre el sonoro y extensísimo aplauso de un público que, si bien no pudo oír al micrófono la voz de su ídolo, al menos pudo cantar de su mano un 'Para la libertad'.
Una gala muy poética
Antes de su discurso, los vítores de un patio de butacas volcado abrieron paso de una comitiva municipal que guiaron dos maceros y remató a la cola el propio intérprete acompañado por la alcaldesa, Carolina Gracia. Una vez formado el 'pleno' sobre las tablas del Teatro Circo, la poética gala arrancó con la virtuosa interpretación de la 'Elegía a Ramón Sijé' de la pianista Carolina Llanes y el clarinetista de José Antonio Moreno.
«En Orihuela, su pueblo y el mío», enunció entonces el actor oriolano Alejandro Sigüenza. Conocido por papeles como el que ha interpretado en series como el 'Secreto de Puente Viejo', declamó el poema con el que Hernández brindó ante todo su pueblo un sentido recuerdo a su mejor amigo recién fallecido. Unas palabras que a más de uno erizó.
Después, Ana Gómez Pardo, cogió a continuación la batuta en representación del colectivo vecinal impulsor del nombramiento de Serrat como hijo adoptivo. «El poder la música y su poesía ha conseguido unirnos a los oriolanos en torno a tu persona. Tú has proclamado por todos los escenarios del mundo lo que era un deber de amor. Y el amor con amor se paga. Bienvenido a Orihuela, tu pueblo y el nuestro», felicitó al catalán.
Gratitud institucional
«Gracias, Joan Manuel por la difusión impagable que has hecho de la obra de nuestro poeta Miguel y, con ella, la de Orihuela. Pero no solo eso. También te queremos reconocer la contribución, como artista, a la música y, como persona a la defensa de valores y cuestiones que hoy damos por sentados, pero que durante mucho tiempo permanecieron en la oscuridad, en la clandestinidad y en el exilio», agradeció por su parte el concejal de Festividades y delegado por el Pleno para otorgar a Serrat esta distinción, Antonio Sánchez.
«No sé cómo se imaginaba el futuro Miguel Hernández. No sé si se imaginó que, 112 años después de su nacimiento, Orihuela lo tendría tan presente. Tampoco sé si imaginaba que sería un cantautor de Barcelona uno de los principales aliados de su poesía. Pero, Joan Manuel, sí tengo una cosa clara: si hubiera tenido la posibilidad de soñar con algo así, se sentiría igual o más agradecido y orgulloso de que seas Hijo Adoptivo de Orihuela», felicitó al cantautor la alcaldesa.
Junto a ella, el president de la Generalitat, Ximo Puig, también compartió unas palabras con el homenajeado y destacó que, tanto Hernández como Serrat, han militado «sin rencor en el bando de la esperanza» y han dejado una obra en la que «aún late el realismo de soñar en un futuro más justo y mejor».
